Bilbao en un fin de semana

Estuve en Bilbao un fin de semana (de viernes a domingo) y fue un viaje súper especial. La verdad es que yo ya había estado antes en Bilbao pero no lo recordaba muy bien, y esta vez me enamoré de la ciudad. Soy amante del norte, de su comida, de sus paisajes y de su gente. Me encantó prácticamente todo de Bilbao y qué mejor que compartirlo aquí también.

Desplazamiento

Hasta allí fuimos en tren. Tardamos 5 horas desde Madrid pero se hicieron muy rápidas. La verdad que normalmente los viajes en tren se hacen cortitos porque puedes levantarte, caminar etc. Además como no íbamos a necesitar el coche allí, pues nos quitábamos de preocupaciones. Para encontrar unos billetes baratos hay que estar atentos a las ofertas y a los días libres. Es importante saber cuándo puedes tener un par de días para escaparte y aprovechar las ventajas de algunos billetes. 

Alojamiento

Nos alojamos en un Airbnb (https://www.airbnb.es/) en el centro de la ciudad durante dos noches. Era bastante pequeñito, pero muy cómodo y con una localización excelente. Escogimos un apartamento con cocina para poder cocinar allí y ahorrarnos alguna comida. Este es el link del apartamento: https://www.airbnb.es/rooms/14184446?location=Bilbao&adults=2&guests=1&toddlers=0&s=BznC0mEN.

Estaba en la zona perfecta, en el casco histórico de la ciudad, un supermercado debajo, la fiesta estaba cerca, los bares de pintxos en una calle paralela... ¡inmejorable, de verdad!

Comida

Yo ya os digo que si vais a Bilbao por primera vez os enamoraréis de su cocina, porque si ya habéis ideo quiere decir que ya lo estabais. No hay otra opción. Unos pintxos originales, ricos, sencillos y que te saben a gloria con una buena cervecita. Para ser sinceros, comer de pintxos al final sale caro si vas de bar en bar, pero principalmente por la bebida. Ponte que pagues 4€ por persona una bebida y un pintxo... Solo con que te tomes 5, ya te cuesta 20€. Por eso, es importante tener en la mente el ahorro. Lo que nosotros hacíamos era pedir una racioncilla de algo que nos llenara y después con un par de pintxos cada uno íbamos servidos. Nos costaba la comida alrededor de 10€ por persona cada vez. Pero ya os digo, no os privéis de hacer un par de comidas fuera de casa porque no os arrepentiréis nunca, es maravilloso. 

La ciudad

Bilbao es una ciudad que tiene casi de todo: río, montaña, mucho verde, casco histórico, parte nueva... Ojalá tuviera playa, porque ya sería casi perfecta. Realmente en un fin de semana te da tiempo a ver todo lo que hay que ver, pero siempre es guay tener un rato para perderte por las callecitas pequeñas o pasear por la orilla del río sin ninguna prisa. 

Qué visitar

Como ya he dicho antes, básicamente, hay que visitar el casco histórico entero, pasear y perderse por las callecitas, porque son una auténtica preciosidad. Después tienes el paseo fluvial por la orilla del río que te lleva hasta el museo Guggenheim. Si tenéis la oportunidad de entrar en el museo, de verdad que tiene exposiciones muy interesantes y creativas, es de arte contemporáneo. También hay un monte al que se sube con el funicular de Artxanda, que también merece bastante la pena. Se respira mucha calma allí arriba, hay unas vistas espectaculares y además mucho silencio. Me gustó especialmente ese sitio. La plaza nueva, es el sitio ideal para tomarse unos pintxos. Es pequeña, pero muy bonita, un sitio excelente para disfrutar de la terracita al sol que tanto ansiamos en este país. 

Por qué me gustó tanto

Tengo que decir que generalmente todos los viajes que hago, me encantan. Es normal, yo creo, porque sales de tu ciudad, ves cosas nuevas, estás en otro ambiente, no sigues una rutina... así que como norma general, me suelen encantar los sitios a los que viajo. Pero es verdad, que de esta ciudad me siento profundamente enamorada. Tiene un ambiente en sus calles que no se ve en otro sitio. Se respira calma a la vez que escuchas un gran jaleo de alegría. Pasear por elcentro es como estar en otra época. Y la comida es un manjar de campeonato. No sé por qué será que me encanta esta ciudad, pero ojalá todo el mundo la conociera, porque es absolutamente preciosa. 

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