9/12/2012

El domingo la verdad que fue un día de absoluto descanso porque estábamos reventados de los días que habíamos pasado en París, así que no hay mucho que contra, pero me gusta seguir bien un orden y tener una entrada con cada fecha, así que cuento rápido lo que hice para no saltarme ningún día.

Por primera vez no pusimos el despertador y dejamos la persiana echada hasta abajo.

Como no tenemos cortinas y la ventana es muy grande, yo normalmente lo que hago es que dejo la persiana un pelín levantada para que entre la luz del día e ir despertándome sola, que me gusta más que despertarme sobresaltada cuando suena el despertador, pero como no teníamos intenciones de salir de casa, pues la dejamos echada hasta abajo del todo.

Así que entre eso y que estaba nublado, tampoco nos entró mucha luz por la ventana de la cocina, que esa directamente no tiene ni cortinas ni persiana. Con lo cual no nos despertamos hasta las once y media de la mañana.

Ahora eso sí, estábamos muy relajados y descansaditos.

No nos habíamos podido duchar la noche anterior porque aquí el termo funciona con un botón que está incorporado al planel eléctrico. Normalmente el botón tiene tres posociones, apagado, automático y uno. Si lo dejamos en automático funciona todo menos el agua caliente y si lo ponemos en el uno funciona todo, pero gastamos muchísima más luz porque siempre vemos como el contador empieza a girar rapidísimo.

Así que lo que solemos hacer es dejar el botón siempre en automático y como normalmente nos duchamos por la noche, pues encendemos el botón unas tres horas antes y con eso sale agua caliente suficiente para ducharnos los dos.

El problema es que si lo enciendes, al momento todavía no sale suficiente agua caliente, porque el termon es muy grande y tarda un poco en calentarse.

Y como llegamos a las diez y media la noche anterior pues no nos dio tiempo a que se calentara bastante el agua, así que nos dimos sólo una ducha rapidita, pero yo estaab deseando lavarme el pelo.

Así que nada más levantarme, desayunamos y me fui al baño a darme una buena ducha larguísima jejeje.

Así ya me quedé relajada del todo jejeje. Y nada, durante el día lo único que hicimos fue ver series y películas sentados en casa calentitos.

Como teníamos comida y no hacá falta salir a la calle para nada, disfrutamos de un día tranquilos en casa.