6/12/2012

Publicado por flag-es Elisa A.C — hace 6 años

Blog: Dá a día
Etiquetas: General

Hola a todosss,

Por fin se está acabando el jueves y mañana nos vamos a París jejeje, lo estoy deseando.

Hoy son todo buenas noticias; La huelga de autobuses también se ha acabado y por fin podemos ir a comprar al supermercado Auchan y movernos libremente por la ciudad.

Lo que me hace recordar que teníamos que ir también a quejarnos al Conforama de que no han venido a cambiarnos el sofá roto, pero en fín, ya lo haremos cuando volvamos, o a este paso, después de las navidades.

El día ha sido frío como ninguno hasta ahora. Según el tiempo en internet va a nevar dentro de unas horas, sobre las once de la noche. Así que estaremos pendientes de mirar por la ventana, a ver si es verdad.

Por lo menos en París hace un poquito menos de frío, aunque tampoco mucha diferencia. La verdad es que no estoy acostumbrada a viajar a un sitio donde haga menos frío que donde estoy jajaja. Como normalmente estoy en Andalucía es difícil ir a un sitio donde haga más calor jejeje.

Bueno, la cosa es que nos levantamos con la intención de ir a comprar al Auchan, ahora que se nos ha acabado la huelga. Pero al levantarnos y mirar qué faltaba nos dimos cuenta de que día a día al final lo habíamos acabado comprando tod por aquí. Menos la carne, claro, que es imposible comprarla en cualquier sitio de por aquí cerca. Pero también ir hasta el Auchan con lo que se tarda, sólo para comprar la carne, y teniendo en cuanta que nos vamos dos días, pues era una tontería.

Así que al final nos hemos quedado en casa, que todavía teníamos comida para hacer el almuerzo.

Como yo no tenía clase hasta las cinco de la tarde, decidimos salir de aquí una horita antes e ir a la Gare du Nord a comprar los billetes del tren y de camino a hacer la compra juntos, que queríamos comprar unos zumitos de cajita y algunas galletas para llevárnoslas el fin de semana para el desayuno y para llevarlas en el bolso, que siempre vienen bien por si nos entra hambre estando por ahí.

Cuando hemos entrado en la estación de tren hemos visto que había unas máquinas para sacar los billetes. Como la cola para comprarlos en ventanilla era muy larga, nos decantamos por probar con la máquina. De dos que había una parecía que no funcionaba porque todo el que intentaba comprar ahí el billete acababa entrando a comprarlo en ventanilla.

Nos colocamos en la otra máquina, elegimos el idioma, que por suerte había español, y empezamos a seguir los pasos, pero en el último paso no nos dejaba elegir la hora que queríamos de ida y con ese error ya no nos dejaba seguir adelante.

Lo intentamso varias veces con horas diferentes, pero no dio resultado. Así que, al igual que todas las personas anteriores, tuvimos que ir a comprarlos en ventanilla. La verdad es que no se para que ponen las maquinitas esas si a nadie le funciona nada de lo que quieren comprar, pero en fin.

Resultó que la cola no iba muy lenta y además unas chicas nos dejaron pasar delante de ellas, así que no tardamos mucho en llegar a uno de los mostradores. Empecé a pedir nuestros billetes y el chaval debió darse cuenta de que mi francés no era muy bueno porque empezó a hablar en inglés jajaja. Elegimos la hora de ida y nos dijo el precio con nuestro descuento por ser menores de 25 años, como ya sabíamos.

Ahora empezó el problema, resulta que volver este sábado directamente de París a Amiens es una locura porque la vía está en obras, así que hemos tenido que coger la opción de ir en tren hasta no se que pueblo que hay por el camino y allí nos ponen un autobús para llegar hasta aquí. Así que como nos pille tráfico podemos tardar muchísimo más en volver.

En principio hemos elegido la hora de vuelta que queríamos, que eran las siete y media de la tarde, y según el chaval que nos los ha vendido, llegamos a la misma hora que si fuésemos en tren, pero nunca es tan seguro ir en autobús, que los atascos atrasan mucho y más en una ciudad como París.

En fin, al final nos ha salido la ida y vuelta para dos por 63 euros, justo lo que teníamos calculado, así que estupendo.

Nos hemos ido de allí con nuestros billetes al centro comercial La Halle, que está aquí en el centro también. Hemos ido a la tienda del indio, que nunca me acuerdo de cómo se llama, a comprar nuestro candadito para ponerlo en el puente de París. Los había muy grandes y fuertes, pero no está la economía para gastar mucho en candados, así que hemos comprado el típico pequeñito de 1,50 euros.

Después hemos pasado por el Match para comprar los zumitos y las galletas para el viaje, aunque hemos acabado comprando más galletas de la cuenta para merendar también aquí en casa jejeje.

Después yo me he ido a mi clase, he pasado por la biblioteca para cambiar unos libros por otros y al salir hemos ido al banco, que teníamos que hacer una transferencia a Portugal y de camino sacar dinero para llevarnos en efectivo al viaje.

La cosa es que la transferencia nos ha dado tantos problemas porque la mujer decía que nos faltaban datos y no se que cosa, que al final se nos ha olbidado sacar dinero del cajero. Pero bueno, cajeros de La Poste hay por todas partes, así que ya sacaré allí cuando llegue o en la Gare du Nord, que también hay uno junto a la estación jeje.

Después del banco ya nos hemos venido para casa, que el frío era insoportable en la calle. Teníamos los pies helados y los cachetes también. Yo me tenía que haber traido mis calcetines para nieve que tengo en España. A ver si me los traigo cuando vuelva de las vacaciones que hará más frío todavía, que si no no sobrevivo aquí jajaja.

Bueno ya en casita, hemos merendado que era tardecillo y nos hemos dedicado a hacer la maleta, que para dos días tampoco hay mucho que guardar, aunque yo soy muy de meter en la maleta los típicos “ Por si acaso…”, que nunca se sabe si te puedes mojar los pies y necesitas otro par de calcetines, o si te manchas con el ketchup el vaquero en el McDonald´s…pueden pasar muchas cosas, así que siempre es mejor llevar ropa de más.

Se supone que el hostal este, albergue o lo que sea incluye toallas, pero no me da mucha confianza, así que yo llevo también mi toalla del Decatlon que va liadito formando un rosco y no me ocupa nada de espacio.

Bueno estaré sin escribir mañana y puede que el sábado también, dependiendo de si vuelvo muy cansada, así que ya os contaré el domingo como nos va en París.

 

Saludos a todoss.

 


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