20 maneras de hacer la maleta de forma más eficiente

Hacer la maleta es uno de esos aspectos del viaje que, por sí solo, consigue despertar una gran variedad de emociones. Lo que comienza como entusiasmo, se torna rápidamente en tensión y, a medida que la maleta se vuelve más pesada y comienza a llenarse, nuestros niveles de irritación y de preocupación se disparan de forma directamente proporcional. Los sentimientos encontrados tampoco terminan aquí. Incluso cuando está hecha, nuestra tranquilidad se ve interrumpida por algún pensamiento irritante y esporádico: "¿mi maleta pesa demasiado?" o peor: "¿he olvidado algo?".

No obstante, como en todos las situaciones, no tiene por qué ser así. Con algunos ingeniosos trucos y un poco de organización extra, incluso las maletas más complicadas se pueden hacer de forma muy simple. A continuación, he hecho una lista de veinte de mis mejores consejos para todos los viajeros nerviosos de ahí fuera, ¡para que paséis menos tiempo estresados y más progresando!

Fuente

Antes de empezar a hacer la maleta

¿Preparándote para un nuevo viaje? ¡Adopta estas medidas de precaución para que la experiencia te resulte más sencilla y fluida!

Comprueba el límite de equipaje

Incluso antes de abrir tu maleta, es buena idea que sepas, más o menos, cuántas cosas te puedes permitir meter. Lo primero que debes hacer antes de empezar es comprobar las restricciones de tu aerolínea en cuanto a las dimensiones y al peso del equipaje. El hecho de ser consciente de esta información, debería ayudarte a tomar mejores decisiones en cuanto a lo que necesitas o no llevar al viaje.

Utiliza una maleta más pequeña

No hace falta decir que, si llevas una maleta más pequeña, no podrás llevar tantas cosas. Si no tienes mucho autocontrol, es mejor que dejes la maleta grande en casa e intentes conformarte con menos espacio. De esta forma, no solo evitarás llevar cosas de más, sino que también ahorrarás mucho tiempo y esfuerzo físico.

Haz una lista de las cosas que te quieres llevar

Hacer listas es muy útil por dos razones: no solo sabrás exactamente lo que tienes que buscar en casa, sino que también es menos probable que se te olvide algo, especialmente si tachas lo que metas en la maleta. Crea tu propia lista o busca una plantilla en Internet. ¿El viaje es largo? Échale un vistazo a este artículo, ¡en el que he recopilado diez artículos imprescindibles que quizás se te hayan olvidado!

Fuente

Lleva conjuntos enteros, en lugar de prendas sueltas

Cuando escribas tu lista, piensa en qué prendas de ropa puedes conjuntar e intenta no llevar más de un conjunto por día (o menos, si te vas a quedar en un sitio que tenga lavadora o esté cerca de una lavandería). Recuerda que los vaqueros (y, en general, las partes de abajo) puedes ponértelos varias veces antes de necesitar un lavado, así que intenta incorporar estas prendas básicas en todos los conjuntos que puedas.

Pon todo en el suelo

Cuando ya hayas hecho tu lista de qué llevar, ponlo todo en el suelo, junto a tu maleta, para que puedas visualizar exactamente cuántas cosas quieres llevar contigo. Si quieres organizarte aún más, tómate tu tiempo para dividirlo todo en distintos montones: uno para las partes de arriba, otro para los artículos de baño, otro para los aparatos electrónicos, etc.

Reduce el peso a la mitad y vuélvelo a reducir

Si de verdad estás intentado disminuir el peso, una de las mejores cosas que puedes hacer es reducirlo una vez a la mitad y, después, otra vez. Es fácil sobrestimar cuánto vas a necesitar mientras estás fuera y este truco te ayudará a separar los artículos necesarios de los más triviales. Dile adiós a ese vestido que no te has puesto ni una sola vez desde que lo compraste o a ese producto de maquillaje que tenías tantas ganas de probar (pero que por alguna razón nunca lo hiciste). Lo más probable es que, si algo ha estado siglos y siglos muerto de risa en tu armario o cuarto de baño, se pasará todas tus vacaciones olvidado en la maleta, ¡así que no te lleves nada a no ser que estés completamente seguro de que lo vas a usar!

Fuente

Reducir el peso de tu equipaje

Hacer la maleta de forma eficiente significa respetar los límites de peso (y, de manera ideal, estar por debajo de ellos). Continúa leyendo para saber cómo puedes mantener el peso de tus maletas en el mínimo.

Pésala mientras la haces y no solo cuando la hayas acabado

Está muy bien tener el peso en cuenta mientras haces la maleta, pero, a no ser que seas una maga (o seas una viajera muy experimentada), no sabrás exactamente cuánto pesa tu maleta si no la pones en una báscula. Esto, por supuesto, puede dar lugar a algunas sorpresas desagradables, que se pueden evitar si pesas tu maleta de forma regular mientras la haces. De esta forma, tendrás siempre una idea de cuántas cosas más puedes añadir a tu equipaje.

Limita la cantidad de calzado que te llevas

Cuando vas a algún sitio, puede resultar tentador llevar contigo todo tu armario. Sin embargo, si hay un artículo de ropa que realmente aumentará el peso de tu maleta, son los zapatos. Por lo tanto, es mejor llevar un máximo de tres pares. Puede que esto no parezca mucho, pero si escoges zapatos que puedas usar en distintas situaciones y que queden bien con varios conjuntos, no deberías tener problemas si dejas algunos en casa.

Limita la cantidad de artículos de baño que llevas

Los artículos de baño también pueden añadir mucho peso a tu equipaje, especialmente si no hay restricciones en cuanto a los líquidos. Intenta meter solo las cosas esenciales, como pasta de dientes o champú y, si puedes, lleva envases de tamaño viaje. Si ocurre lo peor y te quedas sin un producto en particular, siempre puedes comprar más en tu lugar de destino.

Fuente

Descárgate libros o escúchalos en tu teléfono

Entiendo perfectamente a esas personas que prefieren libros en su versión física, pero estas preferencias no son prácticas si estás intentando que el peso de tu maleta sea el mínimo. Si quieres leer un poco en verano, utiliza aplicaciones como iBooks o Kindle para descargarte los libros en tu teléfono o tableta o puedes probar los audiolibros.

Intenta no llevar comida o bebidas

Existen muchas razones por las que no hay que llevar comida o bebidas: pueden ponerse malas en tu maleta, se pueden derramar sobre todas tus cosas, pueden emanar olores desagradables, pueden violar las condiciones de embarque de algunos países y, lo más importante, pueden añadir muchísimo peso a tu equipaje. Por lo tanto, lo mejor es dejarse todas esas cosas en casa y comprar cualquier refrigerio que necesites en el aeropuerto o en el avión.

Lleva puesta la ropa más pesada al aeropuerto

Si quieres llevar alguna prenda de ropa que pese bastante, como petos, abrigos o botas de montaña, asegúrate de llevarlos puesto en el vuelo de ida y vuelta. Esto marcará la diferencia en cuanto al peso final de tu maleta y, si empiezas a tener calor, siempre puedes quitártelo cuando estés en tu asiento.

Mete cosas en los bolsillos

Además de esto, utiliza todos los bolsillos de la ropa que lleves en el viaje para meter cosas pequeñas como calcetines o ropa interior. Una vez, mi hermano y yo nos pasamos media hora en el aeropuerto metiendo cosas en cada bolsillo que encontramos, todo para que, al final, ¡no nos llegaran a pesar las maletas cuando llegamos a la puerta de embarque! No importa: al menos estábamos listos para lo peor.

Lleva tus artículos más pesados en el equipaje de mano

A colación de esto, me he enterado de que, en los últimos años, las aerolíneas nunca comprueban lo que pesa tu equipaje de mano. Por lo tanto, no suelo prestarle atención a las normas sobre el peso y siempre meto mis artículos más pesados (libros, secadores de pelo, etc. ) en estas maletas. No es un truco infalible, pero, hasta que me pillen, ¡seguiré haciéndolo!

Fuente

Maximiza el espacio en tu maleta

Quedarse sin espacio en la maleta es otro de los problemas típicos a los que se enfrentan los viajeros de todo el mundo. Aquí, sin embargo, os dejo algunas formas de evitarlo.

Haz la maleta de forma vertical

Si le pides a cualquier persona que haga la maleta, lo más probable es que lo hagan de forma horizontal, es decir, una cosa encima de la otra. No obstante, es mucho más eficiente poner las cosas en vertical (piensa en cómo colocas los libros en una estantería). Este consejo te cambiará la vida y todo el mérito de la invención se lo doy a Marie Kondo.

Enrolla tu ropa en vez de doblarla

Otro truco genial es enrollar tu ropa en vez de doblarla. La mayoría de las prendas no se arrugarán aunque hagas esto y no ocuparán tanto espacio como de la otra manera. Si no te quieres arriesgar a arrugar una prenda en concreto, intenta, por lo menos, colocarla de forma plana en tu maleta, en lugar de doblarla.

Mete cosas en tus zapatos

Si llevas artículos muy pequeños (¡y prefieres no meterlos en tus bolsillos en el aeropuerto!), utiliza el espacio que hay dentro de tus zapatos. Te sorprenderás de lo mucho que puedes meter ahí y, si además los metes en bolsas de plástico, ni siquiera te tendrás que preocupar de que cojan mal olor por el calzado.

Fuente

Lleva cosas que se puedan doblar

Las prendas más gruesas, como abrigos o jerséis, siempre van a ocupar más espacio de lo que deberían, así que, si es posible, intenta reemplazarlos por prendas más finas y que se puedan doblar (partes de arriba térmicas, leggins, etc. ). No solo ahorrarás espacio en tu maleta, sino que, además, podrás ajustar tus conjuntos vacacionales a cambios repentinos de temperatura de una forma más sencilla.

Utiliza bolsas de envasar al vacío

Tanto si estás recopilando prendas para llevarte de vacaciones como si lo estás haciendo para guardarlas en el trastero, si quieres minimizar su volumen las bolsas de envasado al vacío te vendrán de perlas. Son fáciles de utilizar, se pueden reutilizar y no dejan ni un poco de aire. ¡Solo asegúrate de que tienes acceso a una aspiradora antes de volver a casa!

Siéntate en tu maleta

A veces, cuando tu maleta está a rebosar por los cuatro costados, no hay nada mejor que sentarse encima de ella. Coloca todo de la mejor forma posible, siéntate y, en cuestión de segundos, ¡tendrás tu equipaje cerrado y listo para el viaje!

Y si todo falla...

Aprovéchate de tus acompañantes

Si estás al límite y no puedes, incluso con los trucos mencionados, reducir el peso o el tamaño de tu equipaje, pregunta y mira si alguno de tus compañeros o compañeras de viaje tienen sitio de sobra en sus maletas. ¡Solo tienes que apuntar a qué persona y qué cosas le has dado!

Fuente

¡Bon voyage!

Así que ahí lo tenéis: mis veinte consejos para hacer la maleta de forma eficiente. Espero que hayas aprendido uno o dos trucos nuevos y que tengas ganas de probarlos la próxima vez que vayas de viaje. Buena suerte a los que tengáis un viaje planeado para el futuro cercano. ¡Que el proceso de preparación de tu equipaje sea rápido y sencillo! Y recuerda: ¡si dudas, déjalo en casa!

---

Galería de fotos