10 formas de convertir los viajes en un hobby más asequible

Ya lo he dicho antes y lo repito ahora: viajar es uno de los mayores placeres de la vida. Tanto como si estás explorando la ciudad de al lado por ti mismo como si te vas a la otra parte del mundo, seguramente conozcas a muchas personas y descubras nuevas tradiciones y modos de vida a los que probablemente no estés acostumbrado. No obstante, uno de los mayores problemas cuando se trata de conocer nuevos lugares es el gran precio que normalmente hay que pagar por vivir esas experiencias. ¿Esto tiene que ser un problema? ¡Por supuesto que no! ¡Aquí está mis mejores consejos para viajar de forma barata para que puedas pasar menos tiempo gastando y más tiempo disfrutando!

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Ahorra dinero antes de ir

Una de las mejores formas de convertir el estilo de vida nómada en algo barato es aumentar tus ingresos. Aquí os dejo algunas formas para hacer esto.

Conseguir un trabajo

Si tienes tiempo, consigue un trabajo. Puede ser cualquier cosa, desde repartir periódicos hasta cuidar a los hijos de tus vecinos, o trabajar en una tienda o restaurante local. Cualquier cosa que te haga ganar un dinero extra te ayudará mucho a la hora de reservar vuelos y alojamiento para cualquier viaje. Si no te sobran horas (quizás seas estudiante a tiempo completo) otra opción es trabajar a turnos. Yo, por ejemplo, he tenido muchos trabajos remunerados en hostelería en festivales de música y he conocido otras personas en estos eventos que ganaban dinero haciendo fotografía y vídeos.

Vender cosas

Como alternativa, limpia a fondo tu casa y ¡vende algunas de tus viejas posesiones! Hay montón de páginas web que te ayudan a hacerlo (eBay, Depop y Gumtree son algunas de mis favoritas) y, aunque se llevan un porcentaje de comisión, definitivamente verás cómo el dinero te llueve. Dile adiós a esos vaqueros que te compraste hace cinco años (no te pongas nostálgico, nunca te los ibas a poner) ¡y di hola a nuevas aventuras!

¡Ahorrar, ahorrar, ahorrar!

Una vez que hayas guardado algo de dinero, ¡no te lo gastes todo de inmediato! Recorta los gastos de tu día a día (¿realmente necesitas esa tableta de chocolate? y aparta el dinero que ahorres. Si es necesario, abre una cuenta de ahorros en el banco; de esta forma, no sentirás la tentación. ¿Te cuesta? ¡Recuerda que estos sacrificios te ayudarán a tener el viaje de tu vida!

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Escoger destinos baratos

Una de las formas más sencillas de ahorrar dinero cuando se viaja es quedarse en sitios económicos. Una búsqueda rápida en Google, 'escapadas urbanas baratas', por ejemplo, y tendrás infinitas opciones donde escoger. Si te sientes aventurero, también puedes optar por opciones menos comunes. El mundo está lleno de tesoros escondidos y, en ocasiones, si una ciudad aún no tiene una industria turística bien establecida, el coste de la visita será mínimo.

Finalmente, ahorra mucho escogiendo destinos dentro de tu propio país. Incluso si llamáis casa al mismo pedazo de tierra, ¡tú y tus compatriotas podéis tener formas muy distintas de vivir y de ver las cosas!

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Viajar en momentos inusuales del año

Otra forma genial de reducir gastos es viajar en momentos inusuales del año. Muchos destinos vacacionales alcanzarán sus precios más altos durante los meses de verano (aunque ten en cuenta que esto varía dependiendo en qué hemisferio se encuentren), así que intenta evitar reservar tu viaje en esta época.

Tras haber dicho esto, cada país tiene su época en la que el turismo está al máximo, así que investiga por ti mismo para descubrir cuándo es la temporada baja en tu destino particular. El alojamiento en la India, por ejemplo, tiende a ser mucho más barato durante la temporada de los monzones (desde mitad de junio hasta finales de septiembre), así que, si estás dispuesto a correr el riesgo de empaparte, viaja en esta época del año.

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Recortar en gastos de transporte

Antes de llegar

¿No es triste el hecho de que tengas que vaciar tu cuenta bancaria incluso antes de llegar a tu destino? Vuelos de largo recorrido, en particular, nunca son baratos, pero definitivamente existen formas para rebajar el coste. En primer lugar, reserva tu viaje con tanta antelación como puedas o espera a que las empresas hagan rebajas. Además, intenta, cuando sea posible, volar con aerolíneas low-cost y utiliza webs de comparación de precios cuando organices un viaje. Puede que encuentres que alguna compañía de la que nunca habías oído hablar te ofrece el vuelo que buscas por una parte del precio normal.

Como alternativa, considera hacer escalas. Hay muchas historias de gente que cogió varios vuelos cortos y más baratos para no despilfarrar en uno más largo. Esta táctica no es muy buena para el medio ambiente, pero si sabes lo que haces, te ayudará mucho a gastar lo mínimo. ¿Has encontrado el vuelo perfecto? Ahorra dinero, especialmente en vacaciones más cortas, llevando tan solo equipaje de mano.

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Cuando estés allí

El uso del transporte no cesa cuando has llegado. ¿Tentado a coger un taxi desde el aeropuerto hasta tu alojamiento? ¡Resiste y encuentra otras opciones de transporte público en su lugar! Mientras exploras la ciudad, camina tanto como puedas. No solo ahorrarás dinero, sino que también harás mucho ejercicio y podrás disfrutar al máximo del lugar que estás visitando. Después de todo, ¿cuántas ciudades pueden decir que tienen monumentos impresionantes escondidos en los túneles del metro?

Por último, si te vas a quedar bastante tiempo en un país y quieres ser prudente en cuanto al dinero que gastas en un día o en escapadas de fin de semana, investiga cuál es la forma más barata de ir de A a B. Los autocares tienden a ser más baratos que los trenes, pero no asumas nada. Si quieres invertir en un bono de tren o quieres comprar billetes con mucha antelación, puede que este último sea el mejor medio de transporte para tus bolsillos.

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Recortar en gastos de alojamiento

El alojamiento también puede costar una fortuna, pero incluso las ciudades más caras cuentan con barrios más baratos y los viajeros más exigentes podrán encontrar sitios agradables donde alojarse por menos dinero. Cambia los hoteles de lujo por hostales baratos y por una habitación en apartamentos de alquiler y verás de inmediato cómo el precio de tu viaje se reduce a la mitad. ¿Quieres rebajarlo aún más? Prueba Couchsurfing: no tendrás que pagar ni un solo céntimo y podrás conocer a lugareños, quienes conocen el destino de tus vacaciones como la palma de su mano.

En general, el mejor consejo que puedo dar es que no tengas muchas expectativas. Sí, siempre es mejor volver a un apartamento lujoso, pero si vas a pasar todo el tiempo afuera explorando, ¿por qué malgastar el dinero? Obviamente no seas tonto y reserves en un sitio con pésimas valoraciones, pero piensa bien cuáles son tus prioridades.

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Recortar en gastos de comida

Me encanta comer fuera, especialmente cuando estoy en un sitio nuevo, pero comer en un restaurante cada noche puede ser demasiado. Haz esto por todos los medios si tienes muchas ganas de probar delicias locales, pero intenta ir a sitios más baratos y ten cuidado con las trampas turísticas. Si quieres ahorrar algo de dinero, haz una compra grande cuando llegues y come casi siempre en casa. Además, lleva bocadillos y aperitivos cuando salgas de casa para evitar la tentación cuando no puedas cocinar.

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Recortar en gastos turísticos

Hacer turismo es una de esas cosas que puede dejarte en bancarrota, pero hay formas de solucionarlo. Comienza haciendo un tour a pie gratis del lugar que estás visitando, si hay alguno disponible. De esta forma, podrás descubrir la ciudad sin gastar un solo céntimo (¡aunque siempre está bien darle una propina a tu guía!) y sabrás a qué lugares merece la pena echarles un vistazo. Después, intenta encontrar monumentos e instituciones cuya entrada sea gratuita o barata y priorízalos por encima de los más caros.

Si hay algo más caro que quieras hacer, intenta encontrar ofertas o descuentos para seguir gastando lo mínimo. Por ejemplo, muchas ciudades tienen carnets para los museos, que a priori pueden parecer caras, pero te ahorrarán mucho dinero a la larga.

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Viajar con otra gente y repartir los gastos

Una forma genial de ahorrar en las cosas que acabo de mencionar es ir de vacaciones con otra gente. Incluso si solo vas con otra persona, es más probable que ahorres en costes de alojamiento y, además, ¡siempre está bien tener compañía en los viajes! ¿Vas con mucha gente? Aprovechad los descuentos grupales y compartid coche si os sale más barato que ir en transporte público.

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Trabaja o haz voluntariado mientas estés allí

Trabajar en el extranjero

¡Tan solo porque no estés en casa no significa que no puedas ganar algo de dinero para pagar tus aventuras! Si tienes el derecho a trabajar en el país que estás visitando (o puedes obtener la visa necesaria) intenta ver si puedes conseguir un trabajo a corto plazo allí. ¿No tienes mucha suerte? Intenta hacer voluntariado en su lugar mediante páginas web como Workaway y WWOOF. Puede que no ganes nada de dinero a cambio de este tipo de actividades, pero la mayoría vienen con beneficios como alojamiento o comidas gratis, así que, al menos, recortarás en gastos.

Trabajar sobre la marcha

Si vas a estar desplazándote constantemente, también puedes probar con el blogging o el vlogging. Te costará algo de tiempo crear un buen perfil, pero una vez consigas audiencia, podrás ganar dinero haciendo lo que realmente te gusta. Además, ¿quién sabe? ¡Quizás, algún día, las empresas comiencen a patrocinarte para que explores nuevos lugares!

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Planear un presupuesto antes de irse

Por último, pero no por ello menos importante, el mejor consejo que te puedo dar es que planees y calcules los gastos con antelación. Ser espontáneo está genial (y no debes en absoluto sacrificar oportunidades que se dan una vez en la vida tan solo por ser un par de euros más rico), pero si te dedicas a malgastar el dinero a lo loco en cosas como comer fuera o ir de fiesta, fundirás tu presupuesto en menos que canta un gallo.

Decide cuánto dinero estás dispuesto a gastarte en tu viaje y, después, investiga y decide qué lugares y actividades tienes más ganas de tachar de tu lista. Si hay algo un poco más caro (como un viaje en globo, por ejemplo) mira a ver si puedes recortar gastos de otro sitio para compensar el despilfarro. No tienes que hacer sacrificios enormes, tan solo intenta equilibrar las cosas lo mejor que puedas.

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¡Sal ahí y ve el mundo!

Así que ahí lo tienes: diez formas de convertir los viajes en un hobby más económico. Ver el mundo nunca va a ser el pasatiempo más barato, pero si sigues estos consejos, ¡estarás menos estresado por culpa de tus gastos y tendrás más dinero para gastar en futuros viajes! Así que, ¿a qué estás esperando? ¡Compra tus billetes hoy y recibe el estilo de vida nómada con los brazos abiertos!

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