Multiculturalidad

Aquí en Francia, en la universidad, más concretamente en Saint Nazaire, que es la ciudad de la que puedo opinar de buena mano, hay algo que quizás en España no se ve tanto y seguramente tenga una explicación. Hablo de la multiculturalidad. Es cierto que en Valladolid, durante mis primeros años en la universidad, he coincidido con gente de otros países y culturas, pero aquí en Francia este fenómeno se ve de forma mucho más común. En Valladolid en una clase de unas cincuenta personas, podía coincidir que había algunos erasmus de otros países de Europa, pero sin ser nunca una cidra significativa. También se veían estudiantes de otros países que sin ser erasmus estaban estudiando allí en Valladolid por que realmente vivían por diferentes motivos en España y era allí donde estaban instaladas sus familias, como puede ser el ejemplo de una compañera colombiana que tuve el año pasado u otra rusa que he tenido durante los dos últimos años. Pero lo normal es que esta cifra fuera al igual que la de estudiantes erasmus, no muy grande dentro del conjunto de la clase.

Este año, me encuentro con que esa tendencia de convivir con estudiantes de países varios aumenta significativamente. En las clases comunes, donde somos veinticinco personas normalmente, se pueden encontrar personas de diferentes países y diferentes culturas que han llegado a Francia por motivos varios a estudiar. Por poner algunos ejemplos, en mi clase convivimos entre un grueso de estudiantes franceses, otros estudiantes chinos, alemanes, de Madagascar, de Marruecos y de Argelia. En total, la “balanza” queda con nueve estudiantes no franceses y con dieciséis franceses, por lo que se puede decir que uno de cada tres estudiantes no es francés. Además, entre todos los departamentos, también se pueden encontrar estudiantes que sin ser erasmus, provienen de países como Perú, Vietnam u otros países de África como Camerún o Túnez, donde el francés es lengua oficial.

Y es que en Francia hay una gran convivencia entre diferentes gentes provenientes de muchos puntos del mundo, hecho, que se puede ver sin ir más lejos y que se puede comprobar sin mucho esfuerzo en las selecciones nacionales de los diferentes deportes que se practican en Francia. En las diferentes selecciones francesas, es fácil encontrar jugadores cuyos padres provenían de algunas de estas antiguas colonias francesas, como Argelia, Túnez, Camerún y otros tantos países en su mayoría de África. Algunos de los más conocidos ejemplos son los jugadores de futbol campeones del mundo de futbol en el año 1998, en el mundial disputado precisamente en Francia, Zinedine Zidane, David Trezeguet, Karembeu o Patrick Vieira y los actuales jugadores Samir Nasri, (Manchester City) o Karim Benzema, (Real Madrid). Esto que se refleja en el deporte, se refleja también en el día a día de este país tan multicultural.

Y el porqué, seguramente le encontremos en la cercanía a Francia de las antiguas colonias Africanas, donde la lengua francesa es lengua oficial y que hace mucho más fácil la inmigración al país del gallo, al igual que para las gentes de Sudamérica es más fácil plantearse inmigrar a España antes que a otros países, debido a que compartimos lengua y tenemos muchos otros paralelismos.

Como digo, Francia es un claro ejemplo de multiculturalidad y aunque en España estamos acostumbrados a la convivencia con gentes de otros países, desde mi punto de vista, en Francia lo están aun más.

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