Los charcos de agua que son de agua

Desde hace aproximadamente una semana, en la ciudad que me encuentro de Erasmus este curso, Zilina (Eslovaquia), ha comenzado a nevar y las temperaturas son acordes a la situación. Es decir, nos encontramos bajo cero bastante a menudo por lo que, pese a no nevar de momento muy fuerte,  se conserva la nieve que ya ha caído casi de forma permanente.

El caso es que debido a estas temperaturas un nuevo enemigo ha hecho acto de presencia en nuestra apacible existencia: >>los “supuestos” charcos de agua.

Y digo supuestos porque normalmente solo aparentan serlo y cuando los pisas, aunque sea en un borde, te das cuenta de que en realidad es una placa de hielo…. Os podéis imaginar que acto seguido sueles besar el suelo, o al menos tienes que hacer gala de tus mejores reflejos para no caerte. De momento a título personal no me he caído pero en una semana no tiene ningún mérito, veremos en adelante cuantas veces ruedo por el suelo.

Los resbalones son comunes con la nieve. Lo normal es que se forme una capa de hielo bajo la nieve en el suelo si ha nevado cuando la gente la va pisando, pero eso ya lo tienes en cuenta y te lo esperas. Sin embargo, los charcos son un falso amigo que aparece cuando no hay nieve ya sea bien porque ha subido algo la temperatura o bien porque las máquinas la han retirado. La temperatura es lo suficientemente baja como para mantener congelado el agua en los puntos que se había acumulado hielo y muchas  veces no se puede retirar o ni si quiera se ve a simple vista. Cualquier pequeño hilo de lo que parece ser agua suele ser hielo en  realidad. Es decir, te lo encuentras sin aviso y hace que sea más emocionante moverse por aquí.  Como digo, no es para nada dramático pero resulta gracioso ir en grupo ya que todo el mundo está pendiente de no caerse y también, como humanos que somos, de no perderse si alguien se cae para incluso hacer la foto correspondiente, si puede ser.

Por supuesto, en una comunidad Erasmus como esta hay mucha gente acostumbrada a la nieve y el hielo pero los que provenimos mas del sur nos suelen pillar estas cosas de sorpresa generalmente. De todos modos no deja de ser algo tan divertido como tirarse bolas de nieve como si tuviéramos 10 años y no hubiésemos visto la nieve en nuestra vida, algo que también ocurre.