Los 10 mejores consejos para sobrevivir siendo estudiante Erasmus

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1. La planificación y la organización son fundamentales

El papeleo del Erasmus puede acumularse fácilmente, y no mantenerlo al día puede generar mucho estrés de última hora, pánico a la hora de buscar documentos que están perdidos hace tiempo y problemas con tu solicitud. También es útil planear de antemano lo que necesitas hacer al llegar para evitar sentirse sin rumbo y no tener que estar recibiendo correos electrónicos de los coordinadores de Erasmus solicitando documentos.

2. Skype

Una palabra muy usada en el vocabulario de los estudiantes Erasmus es "Skype" y su utilidad no se puede negar. Esta maravilla de la tecnología me ha permitido mantenerme informado y ponerme al día de todo lo que estaba pasando en casa, además de asegurar a mis amigos y familia que, en efecto, sigo vivo. He pasado horas sumido en la nostalgia al ver vídeos, y aunque los mensajes, los correos electrónicos y las llamadas ayudan, no hay nada como ver la cara de un ser querido.

3. Las comodidades del hogar

Desde algo tan insignificante como una foto borrosa de tu perro o un collage de todos aquellos a las que conoces y quieres, los toques personales ayudarán a que tu habitación parezca menos fría y a mantener la nostalgia a raya. Traer unas pocas de tus golosinas favoritas o que te las envíen, sabiendo que no puedes comprarlas en el lugar en el que te encuentras, puede ser muy reconfortante. La costumbre británica de esperar a tomar una taza de té al llegar a casa también se puede mantener cuando estás en el extranjero!

4. Los amigos

Los estudiantes Erasmus que sean menos extrovertidos y no tengan seguridad en sí mismos pueden tener dificultades para salir. Sin embargo, acudir a cualquier actividad, iniciar una conversación con cualquiera que quiera hablar contigo o incluso prestarle algo a un vecino, te ayudará a encontrar amigos rápidamente. No te escondas en tu habitación, sobre todo durante las primeras semanas, que es cuando la gente está todavía acomodándose. Tendrá algunas de las mejores experiencias y salidas nocturnas de tu vida con la rara y a la vez maravillosa gente que conoces durante tu Erasmus!

5. Encontrar cosas para hacer

Evidentemente, estás ahí para estudiar, pero tu estancia en el extranjero estará llena de muchísimos recuerdos si se combina con unas cuantas experiencias. Viaja, únete a un club deportivo, o acude a tantos eventos culturales de tu zona como sea posible, y antes de que te des cuenta, tendrás excursiones, festivales y fines de semana locos de los que hablar hasta que estés viejo y canoso.

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6. Cuídate

Habrá cantidades copiosas de alcohol, los cuadrantes de comida sana pueden tender a convertirse en una prioridad menor y es más que probable que desarrolles un patrón de sueño que ni siquiera se asemeje a un patrón. Una de las cosas que más cambió en mi vida diaria durante el Erasmus fue la rutina. Asiste a tantos eventos como puedas, experimenta tanto como sea posible y lucha contra el cansancio siempre y cuando tu cuerpo te lo permita. Sin embargo, ¡también se puede hablar de quedar con los amigos algunas noches por semana, cocina la cena juntos, ver una película y dormir 8 horas!

7. ¡Deja de comparar!

Está bien, es posible que solo puedas conseguir patatas fritas en los restaurantes en lugar de patatas fritas de bolsa, los modales y las maneras de la gente sean diferentes a lo que estás acostumbrado, y ciertas cosas pueden ser más caras de los que son en Tesco, pero ya no estás en tu país de origen. Acepta las cosas que tu país de acogida hace bien y la manera de ser de la gente; tal vez aprendas algo. Esta filosofía me ha hecho una persona mucho más paciente si cabe.

8. Mañana será otro día

Llegará el momento, por muy breve que se, en el que te encontrarás a tí mismo solo con algo en la cabeza y lo único que querrás hacer será volver a casa. Tal vez ha sido un domingo un poco aburrido, el tiempo una basura y estás deseando cenar la carne al horno con verduras de tu madre. Tal vez, te has perdido el cumpleaños de tu mejor amigo y te sientes culpable y fuera de juego. En mi caso, sentí que había abandonado a mi familia para estar una gran temporada de vacaciones, dejándoles hacer cosas en las que debería haberles ayudado. Sin embargo, las cosas mejorarán y recuerda, es un año en el extranjero, no es para siempre.

9. Mantente informado con lo que ocurre en casa

Internet es todo lo que necesitas para estar al tanto de las últimas noticias, los episodios de tus programas favoritos o las canciones que todo el mundo está escuchando (¡que con total seguridad serán muy populares en casa aproximadamente un mes antes de llegar a los clubes del país en el que estás!), así que no hay necesidad de sentirse aislado mientras estás fuera.

10. ¡Ama a tu prójimo!

Ya sea si estás en un piso compartido o en un piso privado, ayuda siempre a mantener la paz con tus vecinos. Descubrí que mis compañeros de piso franceses y alemanes eran más estudiosos que mis anteriores compañeros británicos, así que mantener el ruido a un nivel razonable y limpiar después de ensuciar algo, definitivamente ayuda a mantener todo en orden.

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