Experiencias de aeropuerto

Hoy 15 de Septiembre del 2017 pongo pie nuevamente  en un aeropuerto después de seis meses, me voy a una boda a Monterrey, y me vinieron a la cabeza muchas situaciones que me han ocurrido en los aeropuertos en estos años: casi perder el vuelo, dormir en el suelo y ser despertado por el de limpieza, hecho lazos con un inmigrante, entre otras cosas. Dividiré la publicación de la siguiente manera: tips de aeropuerto e historias de un aeropuerto, empezando por algunos tips que me vienen a la cabeza.

Hay muchas ocasiones en las que el vuelo sale a muy tempranas horas y no tiene algún caso el pagar por un hostal u hotel, así que el ir a pasar la noche el aeropuerto puede llegar a ser la mejor opción, curiosamente los aeropuertos buscan hacer las sillas lo más incómodo posible para que esto no pase  (que malas personas) pero hay aeropuertos como los de Helsinki Vantaa en Finlandia, el aeropuerto internacional de Singapur o el de Amsterdam Schiphol en los Paises Bajos, que al contrario, buscan que la comodidad sea la primera opción, estaba leyendo en una ocasión que el aeropuerto de JFK en Nueva York inauguró unas butacas demasiado cómodas y que se pueden usar por todas las personas.

En la foto: cápsulas Jet blue en el aeropeurto JFK

Con respecto a que deberíamos tener siempre en el equipaje para cuando nos toque pasar noche en el aeropuerto, yo comúnmente viajó con una cobija pequeña que debo admitirlo, le pertenece a la compañía aérea de Avianca, pero no me juzguen no sabía que se debe devolver, o quería no saber...
No creo que viajar con una almohada sea algo fundamental, se puede remplazar si juntas un grupo de ropa y la envuelves con una camiseta o sudadera como en la foto, lo cual tiene la ventaja que se puede hacer una almohada del tamaño que se requiera agregándole o quitándole prendas de ropa.

Inclusive si acomodan con inteligencia la mochila puede servir de almohada e inclusive puede llegar a ser cómoda, es más,  hasta te aseguras que no te roban el equipaje porque te tendrían que mover (si tienes el sueño muy pesado esto no aplica para ti).
¿Tienen algo de ropa sucia o un poncho para lluvia? Porque No ponerla bajo a ustedes si es que van a dormir en el piso, dicen por ahí que dormir así te ayuda a arreglarte los huesos de la espalda, yo no sé qué tan cierto pueda ser porque a veces acabo más molido, quizá solo sea yo.
También recorrer el aeropuerto puede ser de buena ayuda, quizá encuentren de los sillones que hacen masaje si les colocas una moneda, ya si te llegan a reclamar puedes argumentar que te dormiste por culpa del masaje, si no contamos con la buena fortuna de encontrarnos con algo así, mínimo podremos ver el lugar que sea menos transitado para colocar nuestra "cama", aquí dejo una página con algo de información extra en inglés acerca de dormir en los aeropuertos.
Está de más mencionar que amarrarnos nuestra maleta previene que algún malora amante de lo ajeno o ladrón (para más rápido) haga de las suyas, y unos candados también, por si las dudas.
Hablando del Internet yo comúnmente lo que hago es ir a un módulo de asistencia, preguntarle a algún policía o cajero en algún local si existe Internet y cuál es la clave, porque en muchas ocasiones hay más de una red y que aparece sin seguridad pero que por razones no funciona, así que para evitarme el tiempo de batallar por horas me aseguró si hay Internet funcional.
En algunas de las franquicias que están en los aeropuertos  (ubicados generalmente antes de pasar el chequeo de seguridad) podemos encontrar Internet gratis o te lo brindan con el consumo, en los Starbucks la clave del Internet viene en el ticket de compra, podría apostar que en el basurero hay muchos de éstos,  u olvidados en alguna mesa.
¿Hay que cambiar dinero? Un amigo me comentó que la mejor forma de ahorrarse dinero es comprar en llegadas y vender en salidas ¿Por qué? Funciona como la ley de la oferta y demanda y la ley del mínimo esfuerzo, la gente que va llegando de Estados Unidos, por ejemplo, a México busca cambiar sus dólares por pesos mexicanos y recurren a las tiendas de cambio que hay más cerca (las de llegadas) entonces las tiendas de cambio aprovechan esta situación y encarecen el precio del peso, pero si tú lo que quieres es comprar dólares aquí vas a encontrarlos más baratos, o puedes acordar con los extranjeros que estén llegando y acordar un precio intermedio para ahorrar aún más.
Para la comida no hay gran chiste, es muy sabido que el precio en los aeropuertos es caro y más pasando el chequeo de seguridad, aunque no llega a ser una regla, pero yo siempre procuro comer antes de ir o cargar con algún tentempié en la mochila  (las manzanas son muy buenas para controlar el hambre y darte energías, corre el mito que te pueden mantener más despierto que un café, o si no, al menos te sirve igual).
Finalmente, Observar, para mi es la habilidad esencial  para la supervivencia en cualquier situación,  antes de actuar el observar te permite pasar por debajo del radar, entender cómo actúan los locales para poder aparentar ser uno, la gente compra una tarjeta para el metro, ¿dónde la compro? ¿Qué calle es la principal? Esa de ahí se ve muy transitada, probablemente sea esa. Espero este siendo claro, hay observar para poder comprender y preguntar para afirmarlo.

Historias de un aeropuerto

La primer historia que me viene a la cabeza es cuando estaba regresando de mi viaje de Milán a México, estudie con detenimiento las políticas de equipaje de la aerolínea y quise "jugarle al vergas "(es una expresión que significa querer pasarse de listo, o en esta ocasión como burlar al sistema). Había adquirido muchas cosas después de un año y era muy difícil desprenderse de ellas, llevaba mi maleta grande (que se pasaba por unos 2 kilos o poco menos) la maleta mano y la mochila de la computadora (que estaba repleta de cables y aparatos electrónicos y probablemente pesaba más que la maleta de mano). Para mi sorpresa, a pesar que estaba entrando "en las normas" mi mochila se consideraba una maleta de mano,  por lo que tenía cerca de 10kg de sobra y que tenía que des hacerme de ellos, mi primera opción fue pagar el equipaje extra pero no llevaba efectivo y mi tarjeta no pasaba, mi siguiente opción fue el deshacerme de lo imprescindible y a lo que menos apego le tenía y colocarme capas de ropa encima, me coloqué short encima de otro short,  encima de otro y otro más,  pants, pantalones y al final mi pantalón hippie o pañalero como le dice mi mamá  (de los que son muy flojos y cómodos), arriba las capas eran playeras de pequeñas a grandes, iba colocándose probablemente la quinta playera cuando se me acerca una señora y me propone una buena oferta, ellos no tenían equipaje de mano y que si confiaba en ellos, ellos podían pasar el filtro de seguridad con mi mochila y regresármela ya dentro, pero que por favor me quitará tanta ropa de encima que me iba a morir de calor, claramente no lo pensé dos veces y regresé al módulo de check-in para documentar mi equipaje, la señorita me pregunto por mi otro equipaje de manera ruda, me amenazó que no podía meterla y que iba a anotar en mi boleto que sólo podía llevar dos equipajes  (para que no me pasará de listo y me revisarán al subir en el avión) le argumenté que tuve que deshacerme de la mochila para ver si se comparecía de mi pero sólo la enfurecía más,  parece que no me creía nada, regrese con mi pareja salvadora y no estaban ni ellos ni mi maleta, esa era mi preocupación, afortunadamente ahí seguían y comenzamos a conversar, les agradecí enteramente su gesto y hasta las fechas les mando mis buenas vibras, en la fila previa al chequeo de seguridad la mujer voltea y con un tono tajante me pregunta ¿no tienes ninguna droga verdad? Porque si tienes algo que me incrimine te hundes conmigo, vaya susto que me dio, hasta me hizo dudar de si tenía algo (a pesar de saber que estaba más limpio que el cloro) y regreso a si semblante amable y finalizó, bueno tenía que asegurarme una ya nunca sabe en estos días.

La siguiente historia es de mi vuelo Quebec - México. Para todo extranjero que ha pasado por Estados Unidos o ha hecho una escala en este país, como fue mi caso, sabe lo insoportable, tedioso y tardado que puede llegar a ser el proceso en la zona de migración,  mi problema fue, que mi vuelo estaba conectado y contaba con muy poco tiempo para abordar el vuelo a México por lo que en cuanto pase migración corrí con toda velocidad a realizar el check in, faltaban unos 30 minutos del despegue y en la aerolínea me comentaron que había cerrado el proceso y ya no podía subir, les explique la situación de la migración y me regañaron por no decirle a nadie de mi vuelo, pero hablaron para que me esperará el avión y me pasaron como a un VIP, me salté los filtros y en menos de cinco minutos ya estaba abordando el avión,  pero no todo fue miel sobre hojuelas, no pude documentar mi maleta así que dos cervezas de sabores que llevaba para mis hermanos tuve que vaciarlas completamente en la basura para conservar aunque fuera los envases.

Esta historia es algo corta y fue en el aeropuerto de la ciudad de México,  estaba junto con mi hermano esperando la hora del vuelo y nos topamos con un señor, estaba demasiado preocupado por su familia, llevaba ya unos seis días durmiendo en el aeropuerto esperando noticias de su esposa e hijos, él como miles de mexicanos fue deportado, iba manejando al trabajo y en una vuelta estaba oculta la policía, tuvo que dejar su vida de 20 años para volver a empezar de cero, pero primero tenía que encontrar a su familia.

Dormir en suelo del aeropuerto no es lo más cómodo de la vida, pero si no queda de otra hay que intentar hacerlo aunque sea una experiencia lo más confortable posible, queriendo ahorrarnos el hospedaje y estando el aeropuerto algo retirado de donde nos quedamos nos fuimos a éste, nuestra sorpresa fue cuando el aeropuerto era demasiado pequeño y no tenía ningún espacio decente, creo que ni asientos tenía, buscamos un rincón desocupado (No éramos los únicos en el aeropuerto) y nos pusimos a dormir,  pero como a la hora llega un señor con un carrito de limpieza y un policía que nos comienza a despertar a todos, vaya gilipollas como dirían los españoles, tuvimos que esperar al check in y buscar si se podía buscar un lugar más cómodo después del chequeo de seguridad, adivinen que, no hubo nada, y fue así de como caí en coma instantáneo en cuanto me subí al avión.

En el año 2013, como lo comenté en mi primer publicación del blog, me gané un año de vuelos gratis con una compañía aérea,  para poder utilizar los vuelos teníamos que llenar un formulario y mandarlo, 10 días antes para vuelos nacionales y con 15 días de anticipación para internacionales, mi hermano y yo habíamos llenado el formulario con tiempo y ya teníamos los asientos asignados pero al ir camino el aeropuerto tuvimos un ligero contratiempo y llegamos con el tiempo demasiado justo  (Pero no en retardo) y en la ventanilla de check in nos informaron que habían  revendido los boletos y por el tipo de boleto que teníamos  y el hecho de que habíamos llegado "tarde" tenían que darle prioridad a los que llegaron antes, tuvimos que batallar un rato y argumentarles que estábamos en tiempo hasta que nos dieron un vuelo para la siguiente mañana (era noche) y nos pagaron la noche de hotel con Buffet (Si por culpa de las aerolíneas no vuelas en el horario que escogiste ellos tienen la obligación de cubrir con tus gastos). Me comentaban en una ocasión que las compañías aéreas pueden revender hasta un 10% de los asientos y no ser penalizados, la cosa siempre es no dejarse y exigir un trato justo en todo momento.

Esas son unas de las historias que recuerdo de momento, pero voy a cerrar con las más actual (hoy 17 de septiembre cuando regresaba de la boda a mi ciudad). El vuelo estaba programado para 10 para las 7, por lo que teníamos que estar en el aeropuerto como 5:30 o 6:00, nos despertamos a las 4:00 y ajustamos todo para estar tomando el Uber del hotel al aeropuerto a las 4:30, después de media hora de recorrido llegamos al hotel y nos dio tiempo de desayunar algo, todo el proceso siguió a la normalidad y parecía que todo iba viento en popa hasta que nos tuvieron esperando unos veinte minutos arriba del avión, nos anunciaron que le estaban dando mantenimiento a la aeronave y nos pidieron paciencia para esperar otros minutos, pasada la hora nos pidieron que nos bajáramos del avión y que en media hora nos daban respuesta de que era lo que teníamos que hacer, obviamente la gente comenzó a alterarse y exigían aunque fuera el desayuno gratis y otro vuelo próximo para los que tenían prisa de llegar a sus destinos, no sé cómo funcione en otros países pero dentro de los derechos de los viajeros ya se incluye la indemnización por retrasos por parte de la aerolínea, lamentablemente esta práctica queda muchas veces más en dicho que en hecho. Después de otros veinte minutos en la sala de espera nos volvieron a subir al avión y finalmente poder despegar, esperábamos al menos un tentempié en el avión pero pareciera que las dos horas extras de espera no fueron la gran cosa para ellos.

No cabe duda que si los aeropuertos pudieran hablar tendrían una infinidad de historias más para contar…

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