5 sitios buenos, bonitos y baratos para comer en Madrid

5 sitios buenos, bonitos y baratos para comer en Madrid

Madrid es una ciudad de muchos contrastes. Tan pronto te puedes encontrar tiendas o restaurantes con auténticos chollos que adquirir como visitar sitios en los que simplemente te exijan cierta etiqueta para poder entrar. Esto es así en todo el mundo, y como la mayoría de las personas que habitamos en él no podemos permitirnos cierta clase de lujos, lo que hacemos es buscar siempre sitios que tengan un precio y una calidad que este a las alturas de nuestras expectativas tanto económica como cualitativamente.

En este post me voy a centrar en hablar sobre sitios que considero que cumplen este patrón. Madrid es una ciudad casi infinita con lo que a esta clase de sitios respecta, todo es cuestión de gustos y de buscar. Pero sin duda estos cinco son mis favoritos, o al menos los mejores que he tenido la oportunidad de descubrir durante todo el tiempo que llevo moviéndome por aquí.

Restaurante Etíope Nuria

Este restaurante se encuentra en la calle de Manuela Malasaña 6, a la altura del metro de Bilbao (L1 y L4).

Es un restaurante étnico especializado en comida típica de Etiopia. Es un local que paree pequeño viendo la entrada, pero subiendo las escaleras se descubre una planta bastante espaciosa con unas cuantas mesas. La decoración es minimalistas con aparejos típicos de la zona.

El camarero que atiende es etíope, es muy amable, y desde el primer momento se preocupa por recomendar y aclarar todas las dudas. La primero de todo lo que dice es que la comida se come con las manos, tal y como es habitual en muchos países africanos. Esto al principio choca bastante, pero un día es un día. Además a pesar de esto también hay cubiertos en la mesa para quien no se sienta cómodo comiendo con las manos.

La comida es muy buena y realmente uno se siente estar comiendo comida típica de allí, no una sencilla imitación. Como curiosidad, cabe destacar que los platos de comida son servidos en una especie de fardos de mimbre que le dan una presentación muy cuidada. Son fardos muy grandes, parece que lo que trae el camarero va a ser enorme, pero al abrirlo se descubre que es una ración normal, suficiente para acabar llenando a la mayoría de personas.

El precio del restaurante es muy asequible para la clase de comida que sirven. Por persona un menú puede salir por 15 euros aproximadamente.

Ochenta Grados

Se encuentra prácticamente al lado de este último, en la Calle Manuela Malasana 10 (esta zona es muy buena para comer). La parada de metro es la misma.

Se puede resumir en que es un sitio de tapas, pero no unas tapas de cualquier tipo: son tapas de diseño.  Esto significa que, por ejemplo si pides un huevo trufado con patatas (la tapa estrella) este te venga metido en un vaso en un estado semilíquido muy curioso. De primeras puede echar para atrás, pero es mejor verlo que el que te lo cuenten. Personalmente, hasta el momento no he encontrado una sola tapa de todas las que sirven que no me gusten. Y las que me gustan me encantan.

El sitio está decorado de forma muy moderna y minimalista con un hilo musical de fondo estilo “chill out” a un volumen perfecto.

Es un local muy grande, pero casi siempre, por no decir siempre, se suele llenar. Por lo tanto si no se quiere esperar un rato en la puerta, conviene llamar por la mañana para reservar mesa (y a veces ni por esas). Es un sitio muy de moda por la zona. Pero lo mejor es que a pesar de la gran cantidad de gente que reciben prácticamente cada día, las tapas salen muy rápido. El servicio es excelente, retiran los platos en cuanto acabas, siempre hay un camarero cerca.

La carta es bastante amplia, con platos muy originales, tanto fríos como calientes. Y por supuesto, postres, los cuales para mí son lo mejor del restaurante. Sin duda, hay que probar la versión de autor que tienen de la leche con galletas.

Con lo que respecta al precio, es quizás el sitio más caro de todos. Cada tapa ronda los 5 euros, pero con 3 tapas es perfectamente suficiente para una cena, por ejemplo. Lo mejor es ir sin prisas y probándolas de poco en poco, ya que no tardan casi nada en prepararse.

Tierra Burrito Bar

De todas las cadenas de tacos y burritos que hay por la ciudad, esta es sin duda es la mejor. Existen varios por toda la ciudad, pero al que suelo ir yo es al que se encuentra en la calle de Guzmán el Bueno 52.

Lo primero que llama la atención del sitio es su sencillez. Una sola barra y mesas y sillas de diseño muy bonitas. Con buena música ambiente, es un local muy agradable en el que comer o cenar a pesar de ser una cadena de restaurantes.

Básicamente existen las opciones de pedir tacos o burritos de cinco tipos: pollo, carnitas (la mejor), steak, barbacoa y vegetal. Una vez que lo elijes te lo rellena muy generosamente y vas pasando hacia la izquierda de la barra, en la que diferentes camareros te ofrecerán todas las opciones que hay para rellenarlo al gusto. Al final se llega a la parte de las salsas, la más delicada. Existen tres salsas, la picante, la media y la normal. Esta última no pica nada, y la media es un buen equilibrio para cualquier persona que le guste mínimamente el picante. Aun así, es posible rebajar este picante pidiendo que te echen salsa de yogur.

Y eso es todo. Luego puedes pedir bebidas variadas (a rellenar libremente los refrescos) y pagas allí mismo.

El burrito es buenísimo y muy grande. Ha habido días en los que yo ni he podido comerlo entero. Por lo tanto, en relación calidad-cantidad-precio es el mejor sitio de todos, ya que burrito y refresco sale por menos de 10 euros. De las mejores opciones para solucionar una comida.

Restaurante Sumo

Es una cadena de restaurantes japoneses que ofrecen buffet libre de platos típicos de una forma muy original. Cada menú incluye una serie de platos numerados de los cuales tendrás que apuntar 5 en una hoja de papel y dárselo al camarero. Este los llevará a cocina y no suelen tardar mucho en traerlos a la mesa. Una vez acabados, se podrá repetir el proceso, así hasta un máximo de 3 veces. O sea, como máximo se pueden pedir 15 platos, lo cual es realmente suficiente para cualquier persona sana.

Hay muchísima variedad, más de cien platos en los que se incluyen sushis de todo tipo y diversos tipos de platos japoneses de lo más variados también. A pesar de ser estilo buffet la calidad de la comida es muy buena con lo que a sushi respecta.

En cuanto al precio, dependerá de a la hora del día a la que se vaya y del día de la semana, oscilando entre los 13’50 euros y los 20 euros el menú (no incluye bebida). Un día entre semana al medio día, que es cuando sale más barato, es de los sitios más recomendables para comer si te gusta la comida japonesa. Eso sí, hay que tener cuidado porque si te dejas un plato sin comer te pueden cobrar una penalización por cada plato que no se coma. Así que cuidado y comed bien.

Aunque también hay menú del día por 10’50 euros, lo cual no está nada mal tampoco.

The Knife

Quizás sea el lugar en el que uno mejor puede comer, pero para llegar a él hay que moverse un poco del centro de Madrid. Se encuentra en la calle de Arturo Soria 126, en el interior del centro comercial que allí se encuentra.

Es un buffet libre de carne argentina al que, si se va un día entre semana al mediodía, se puede comer carne de gran calidad a un precio de 16 euros, el cual incluye todo lo que se desee de carne argentina y acompañantes del tipo puré de patatas, arroz, ensalada… una bebida y un postre. Una oferta sin duda a considerar. Hoy otras opciones más caras de menú que incluyen cosas como una empanada argentina y una botella de vino. Pero la mejor opción es la más barata.

Para coger la comida sólo hay que levantarse con un plato y dirigirse a la parrilla, en la que hay una serie de cocineros, argentinos muchos ellos, sacando carnes continuamente. Hay de casi todos los tipos que habitualmente se ven en los restaurantes y tiendas, y los cocineros atienden muy amablemente a las dudas y recomiendan muy bien si te sientes perdido entre tantos trozos de carne.

Además de carnes, también hay una mesa de buffet libre de complementos muy variados. Puré de patatas, arroz, ensaladas, sopas de verduras... Además de muchas salsas con las que acompañar las carnes. Hay incluso algunos pescados preparados y otras muchas cosas que descubrir si eres capaz de no centrarte únicamente en las carnes.

De todos los sitios mencionados, es el sitio en el que más se puede comer, y además bien.

Conviene hacer reserva antes de ir y así evitar esperas, las cuales a partir de cierta hora pueden ser largas.

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