Camino a Philadelphia y a Washington D.C

Bueno, el viaje a Washington fue un viaje muy largo, salimos desde Nueva Jersey por la mañana muy temprano, para que nos diera tiempo ver también Philadelphia ya que nos cogía de camino. El trayecto hacia Philadelphia lo hicimos de forma rápida y sin ningún contratiempo, el problema fue cuando partíamos rumbo hacia la capital de los Estados Unidos de América.

Pusimos en el GPS la dirección del Washington, y tras llevar tres horas en el coche nos fuimos dando cuenta de que no íbamos en la dirección correcta. Paramos en una estación de servicio, que por cierto parecía un centro comercial, y una anciana muy amable que nos encontramos en el parking nos dijo que íbamos hacia el estado de Washington pero no a la capital de los Estados Unidos, la cual es Washington D. C. (abreviatura de Distrito de Columbia).

La verdad, es que yo personalmente me sentí un poco tonto o ignorante de la vida, y creo que alguno de mis familiares que iban conmigo también, pero lo peor es que ninguno caímos en ponerlo bien desde el principio. Al fin y al cabo, lo importante es que nos dio tiempo a rectificar, aunque perdimos tres horas en el coche.

El conductor era yo, y la verdad es que cuando me enteré que después de cinco horas conduciendo, primero hacia Filadelfia y después hacia el Washington equivocado, tenía que conducir cinco horas más para llegar a la capital se me hizo algo complicado hacerme la idea. Así, que partimos hacia Washington D.C. precipitadamente.

Al llegar allí, yo me esperaba un lugar estéticamente grandioso, repleto de grandes edificios y con un muchísimo ambiente de la calle, pero cuando llegué allí después del largo viaje en coche,Me di cuenta que al contrario, era un lugar muy silencioso, muy limpio, tranquilo en sus calles, donde era muy agradable caminar cuando anochecía.

Era como una mezcla entre lo rural y lo urbano, había edificios pero no ostentosos, sin contar con el Capitolio o con la Casa Blanca que no deja de ser una casa. Había muchos parques y jardines preciosos, llenos de plantas y flores exóticas. Muy poco tráfico, se podía conducir sin peligro alguno, al contrario que en Manhattan. En definitiva y según mi gusto, un lugar ideal para pasar la última etapa de tu vida.

Después de ver el Capitolio, el Obelisco, la Casa Blanca, a la cual hay que acceder caminando para poder estar lo más cerca posible de ella, decidimos volver a casa, pero antes había que parar en un McDonald para picar algo.

Por cierto, y antes de que se me olvide nosotros estuvimos en Washington en la época del atentado del Boston, lo cual provocó el establecimiento de un complejo de seguridad en la Casa Blanca, recuerdo de francotiradores en el tejado de la casa, ¡increíble!

De vuelta, buscamos el pentágono, pero al no ser un edificio de gran altura, siendo sin embargo un edificio de gran extensión, no fuimos capaces de encontrarlo. Llegamos muy tarde a Nueva Jersey, además nos cogió un atasco muy grande por qué estaban haciendo obras en la carretera de madrugada.

Personalmente, fue un gran viaje y una gran paliza sobre todo para el conductor, o sea, yo, pero también os digo y así término que volvería a conducir tantas horas para llegar a estos dos destinos.

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