Las Fallas

La fiesta más grande y espectacular de Valencia son las Fallas (o, en valenciano, “Falles”), que se celebran en la mitad de marzo. Es una conmemoración de San Josep y la palabra “fallas” significa tanto la celebración misma, como las construcciones que aparecen en los barrios durante los días de fiesta. Es decir, cada barrio tiene su propia Falla. Una construcción muy grande, básicamente de papel. Las temáticas de cada falla son variadas. Hay fallas que su objetivo es la sátira y otras que tienen que ver más con un tema de arte o una época muy específica. Cada barrio tiene su propia falla “normal” y otra, más pequeña, de niños. Las fallas infantiles son de la misma temática con las originales -así hay una armonía en el barrio. Durante las fallas, gente de toda España, pero también de otros países, viene a Valencia para admirar las fallas de cada barrio, elegir sus preferidas y participar en las fiestas que duran hasta el 19 de marzo.

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Cada día y sobre todo cada noche hay varios eventos. Los falleros y las falleras se visten en sus trajes y vestidos espectaculares (y muy caros, como me han dicho) y salen por la calle. Cada Falla elige la Fallera Mayor que es como la “conductora” o algo como líder de las demás. Es increíble ver tanta gente participar en un evento tal, representando su barrio con orgullo y felicidad. Hasta los bebés se visten como Falleros y Falleras y todavía me acuerdo de esas chiquititas jóvenes que tampoco podían caminar, pero llevaban sus super pequeños vestidos de Fallera, con el pelo hecho de la manera típica de cada fallera y con una sonrisa en la cara, mientras estaban en los brazos de sus madres -también falleras.

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Cada mañana hay “La Despertá” -y como uno puede bien entender de la palabra esa, hay orquestras de cada falla que despiertan a todo el mundo tocando sus instrumentos de manera festiva y alegre!

Mis amigos y yo no podríamos faltar de las Fallas y sus celebraciones. Los hosteles-hoteles-apartamentos estaban alquilados por muchos turistas, entonces nosotros que ya estábamos en Valencia, teníamos que aprovechar de esa ocasión. Voy a escribir en detalle sobre unos momentos específicos de las Fallas en otra entrada, pero aquí os voy a dar la idea general.

Pues, cada día quedamos todos, mis amigos de teatro y yo, para participar en los varios eventos. Me acuerdo muy bien de la Mascletá: cada día a las dos de la tarde había fuegos artificiales en toda la ciudad, pero los más impresionantes en la Plaza de Ayutamiento, por el Centro Histórico de Valencia. En realidad nos dimos cuenta de que a los valencianos les encantan los fuegos artificiales. Igual por la noche había más fuegos artificiales en varios lugares -me acuerdo de los en el fuente de Alameda, pero estoy segura de que había también en otras partes -he estado en tantos lugares distintos que no me puedo acordar de todos, pero sí que me acuerdo de que cada noche, antes de salir de fiesta, estábamos mirando al cielo de Valencia que de repente se convertía en un jardín de luces multicolores. La última noche de los fuegos se llama “Nit de foc” que es valenciano para “noche de fuego”.

Por la noche, los falleros y las falleras organizan eventos, como conciertos o fiestas para bailar, justo al lado de su falla. Esos eventos se llaman 'verbenas', pero de eso voy a escribir en detalle en otra entrada.

Las fallas se acaban con “la cremá”. Una fiesta para el final de las celebraciones, cuando todas las fallas se queman. Nosotros, que nunca antes habíamos asistido en las Fallas, estábamos muy sorprendidos cuando aprendimos por primera vez lo de la Cremá. Sin embargo, los valencianos, que ya estaban acostumbrados de la temática esa y les parecía absolutamente normal, nos miraban y, muy tranquilamente, nos explicaban que simplemente “así es” y que “sin cremá, no hay fallas”. Pues, a lo mejor eso hace las fallas aún más especiales: esa sensación de que no van a durar para siempre. Quizás eso nos hace disfrutar al máximo de esos cinco días.

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Al final de las celebraciones, había muchos premios para las mejores fallas. Aunque mis compañeros de teatro españoles intentaron de explicarme el sistema de evaluación, todavía estoy bien confudida, entonces no intentaré explicarlo. Lo único que puedo decir es que hay distintos premios para las fallas “normales” y las infantiles y que hay un gran número y varios premios para cada categoria de fallas -y creo que las categorías están decididas según el tamaño y la altura de cada falla.

Las fallas son una fiesta muy importante para los valencianos. Yo, antes de estar de erasmus en Valencia, tampoco conocía esta tradición. Pero ahora ya he formado parte de esas celebraciones y tengo los mejores recuerdos de esos cinco días. Porque no solo pude conocer una parte muy especial de la cultura valenciana, sino también pude estar con mis amigos y celebrarlo al máximo.

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