Turín

Torino (Turín en español) es una ciudad de la región de Piemonte, al norte de Italia. Se trata de un importante centro cultural y de negocios del país. Se encuentra en una situación privilegiada, rodeada por los Alpes y bañada por el río más importante del país, el Po. Tras la unificación de Italia, Turín se convirtió en su primera capital entre los años 1861 – 1865, siendo la residencia de los últimos reyes italianos.

¿Cómo llegar a Turín?

La ciudad está bien comunicada por tren y autobús, a 1 h 30 min de Milán. Otra opción es llegar por avión al aeropuerto.

¿Qué ver en Turín?

Piazza San Carlo

Independientemente si llegamos en tren o autobús, partiremos de la Estación Central Porta Nuova hacia la Piazza San Carlo, pasando por la Vía Roma, una calle ancha y larga con numerosos comercios. La Piazza San Carlo es una de las principales plazas de la ciudad, con dos iglesias similares (Iglesia de Santa Cristina e Iglesia de San Carlo Borromeo) y una espectacular estatua de Emmanuel Philibert, duque de Sabaya, presidiendo la plaza. En uno de los extremos de esta plaza encontramos un toro representado en el suelo. Este toro es el símbolo de Turín y la tradición cuenta que si pisas sus partes te traerá buena suerte.

Piazza Castello

Si seguimos caminando, llegaremos a la Piazza Castello, centro de la ciudad. En esta plaza se encuentra el Palazzo Reale y el Palazzo Madama.  

El Palazzo Reale fue construido en el siglo XVII y fue residencia real hasta el año 1865. Merece la pena visitar su interior y así imaginar como vivían los reyes italianos en este palacio. La entrada cuesta 14 €.

A la derecha del Palazzo Reale encontramos el Palazzo Madama. Inicialmente fue un castillo medieval pasando a convertirse en un palacio posteriormente. Actualmente en su interior se encuentra el Museo de Arte Antiguo, que alberga una bonita colección de cerámicas y esculturas.

En la parte trasera del Palazzo Madama encontramos un imponente monumento conmemorativo de la Primera Guerra Mundial, en homenaje a Emanuele Filiberto, duque de Aosta.

Catedral de Turín

En la parte posterior del Palazzo Reale, pasando por un arco, llegamos a la catedral (Duomo) de Turín, construida en el siglo XV. Sinceramente la catedral no presenta una gran fachada que admirar e incluso puede que sea difícil reconocerla, pero en su interior se encuentra la Sábana Santa. En realidad, no se puede contemplar porque se expone una copia, cubierta por un manto y viéndola desde la distancia, a través de unos cristales blindados. La original sólo se muestra cada 25 años, y la última vez fue en el año 2000.

Mole Antonelliana

La Mole Antonelliana es el símbolo de la ciudad. Si tienes a mano una moneda italiana de 1, 2 o 5 céntimos, veras que en la cruz de la moneda aparece esta imagen. Fue construida a finales del siglo XIX como una sinagoga, es decir, una iglesia judía, pero actualmente alberga un museo de cine. Este es uno de los museos de cine más importantes del mundo, dedicado al cine italiano e internacional. Se puede subir a la parte superior por un ascensor y disfrutar de las espectaculares vistas de la ciudad. La entrada al museo cuesta 11 € y si quieres subir por el ascensor debes pagar 4 € adicionales.

Museo egipcio

Si tienes tiempo en tu visita a la ciudad puedes disfrutar del Museo egipcio. Tiene cuatro plantas y numerosas salas de exposición, siendo el segundo museo egipcio más grande del mundo, después del museo de El Cairo. La colección incluye estatuas, sarcófagos y momias.

Museo del Automóvil

Otro museo que se puede disfrutar si hay tiempo es el Museo del Automóvil, donde puedes ver desde automóviles de vapor hasta los últimos modelos del mercado.

Personalmente pienso que es necesario permanecer en la ciudad más de un día si quieres ver todo. La visita a cada uno de los museos dura un par de horas, por tanto, recomiendo estar en Turín al menos dos días. Te quedarás enamorado de su belleza.

Buen viaje!

Top 3 lugares imprescindibles deTurín:

1.- Palazzo Reale

2.- Mole Antonelliana

3.- Museo egipcio

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