Descubriendo la vida en Trieste

Curiosos viajeros,

Es un placer presentaros mi experiencia Erasmus porque seguro que es algo que nunca olvidaré.

Me llamo Marija, estudio piano en el conservatorio y he pasado un año en Trieste, el lugar más especial de Italia.

El mar abierto, la ''bora'' (el famoso fuerte viento de Trieste), las vistas increíbles y la gente agradable... Todo eso fue suficiente, en unas cuantas semanas me enamoré de Trieste.

Me gustó mucho el ambiente internacional. Mientras que cruzas la Piazza dell'Unità escuchas muchos idiomas, y eso te da la sensación de que perteneces allí. Conocí a muchas personas especiales, los más especiales fueron los habitantes de esta ciudad. Son muy expresivos y graciosos. Hice un curso de italiano y lo mejoré mucho (aunque ya sabía cosas básicas). Me costó entender el dialecto de Trieste, tienen sus propias palabras pero me gustaba escucharlos.

El conservatorio Giuseppe Tartini me dio la oportunidad de mejorar mis habilidades musicales. Tienen departamentos de jazz y electro, lo que no pasa en Montenegro, así que utilicé todas las oportunidades para mejorar en la música. Los profesores eran geniales y hice muchos conciertos. Mis compañeros eran de Italia, Eslovenia y Croacia, pero muchos de ellos eran estudiantes Erasmus de Albania, Servia, Macedonia... Fue un placer conocer y tocar con esa gente tan especial.

La comida estaba buena, incluso fui a restaurantes de estudiantes. Me gustó la tradición italiana del Aperitivo a partir de las siete de la tarde, cuando íbamos a la calle Torino para cenar y beber. Había mucha gente en la calle hablando y divirtiéndose después del trabajo, era mi parte favorita del día.

Mis lugares de evasión eran sitios como Miramare, la catedral de San Justo, la playa Barcola, Molo Audace y osmicas, tabernas especiales donde puedes comer carne, queso y vino hechos directamente por el dueño. Pasé la mitad del semestre leyendo libros y relajándome al sol y viento. El atardecer de Trieste es algo que todo el mundo debe ver. es inolvidable. No hay solo lugares en la naturaleza, también hay muchos museos, conciertos y eventos culturales cada mes. Cada conservatorio organiza conciertos.

Ahora hablemos sobre la vida nocturna de Trieste. Prefiero lugares como Romi con música buena y ambiente normal. Otro lugar interesante es Round Midnight, un lugar donde hay jam sessions de jazz los domingos. Los lunes íbamos a un bar chino. Sé que suena tonto porque no está bien diseñado, pero es un lugar que tiene bebidas muy baratas y si estás en buena compañía puedes pasarlo genial. Para los que les guste la música disco, hay discotecas como Mandracchio y Colonial.

El tiempo era perfecto porque era la primera vez que viví el fuerte viento y la lluvia a la vez. También se está genial cuando brilla el sol. Me encantaba el tiempo de Trieste en cualquier época.

Lo único que no me gustaba era que no había muchas academias de arte y más creatividad en los jóvenes.

El programa Erasmus me dio la oportunidad de conocer una cultura diferente, gente especial de todo el mundo y mejorar el idioma y las habilidades profesionales.

Además, si te administras bien la beca puedes viajar en vacaciones. He visitado Bolonia, Padua, Venecia, Liubliana, Berlín y Ámsterdam de esa forma.

Mi consejo es que solicites el programa Erasmus y que lo uses de la mejor forma: para mejorar como persona, conocer una cultura y gente nueva y, por supuesto, viajar tanto como puedas porque es la única forma de convertirse en mejor persona.