Siena sempre nel mio cuore
Hace un año terminé mi experiencia ERASMUS en una ciudad que sin duda me sorprendió y superó con creces todas mis expectativas: SIENA
Siena es una pequeña ciudad que se encuentra entre Pisa y Florencia. Llegar desde estas dos ciudades es muy sencillo, y se puede hacer en tren o en autobús. En mi caso, eran muy frecuentes las visitas a Florencia a comer uno de los famosos bocatas del Antico Vinaio, los días que no sabíamos qué hacer.
Esta ciudad te va a atrapar desde el primer momento. Famosa por su fiesta il Palio, suele haber muchas fiestas en alguna de sus 17 contradas (barrios). El Palio es una carrera de caballos, donde cada uno representa un barrio. Es un evento realmente importante, ya que todos los habitantes de Siena lo viven con mucha intensidad. Es frecuente ver cada barrio con su bandera representativa.
Elegir un sitio favorito de Siena es algo realamente dificil: La Piazza es simplemente maravillosa y perfecta para tomarte una cerveza Moreti y un trozo de pizza cuando hace buen tiempo. El Duomo y su plaza, impresionantes. Cualquier rinconcito de la ciudad tiene un encanto especial, pero sin duda a mi me atrapó la iglesia San Domenico y su mirador. Te recomiendo visitar alguna de sus fuentes, sobre todo la de Fontebranda, seguro que no has visto ninguna igual.
Una de las primeras cosas que pensé cuando llegué a Siena, fue lo bien que olía. Huele a dulce, te invita a comer y a probar todo tipo de comida italiana. Relacionado con esto, no os podéis perder los Picci, sobre todo con calcio e pepe. Se trata de una pasta típica Sienesa. Una especie de Spagueti más gorditos que los habituales. También riquísimas las pizzas del Pomodorino o los helados de Venchi, y cualquier plato de pasta casera de alguna de sus Trattorias, como la Cice.
Para salir de fiesta, era común ir a il Cambio, un pub muy pequeño donde se celebraban siempre las fiestas de Erasmus y que estaba en pleno centro. Era nuestro sitio favorito sin duda ya que siempre veías gente conocida, y la ESN preparaba temáticas muy chulas. SI querías ir a una discoteca más grande, podías ir a Vanilla, fuera de la ciudad, pero había que coger autobús o taxi. Otra opción era ir a Florencia. El ambiente allí era genial y podñías encontrar discotecas como las de Madrid en pleno centro. Además, al lado de la estación de autobúses había un McDonalds!
En cuanto al alojamiento, yo me quedé en un hotel que alquilaba sus habitaciones. Estaba un poco retirado del centro pero andando era cerca de 15 minutos. Para ir a la universidad solíamos coger un mini autobús que nos dejaba en la puerta.
Sin duda de Siena me quedo con su gastronomía y sus lugares, pero sobre todo con la gente que allí se conviritó en mi familia y que hoy son unos grandes amigos que me hicieron vivir la mejor experiencia de mi vida.
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