Una breve ausencia justificada

Saludos de nuevo, compañeros de Erasmusu.

Durante estos días he vivido el peor cambio de semestre de toda mi carrera, algo que quiero compartir con vosotros.

Para empezar, hacía mucho tiempo que tenía que haber terminado los exámenes, disfrutando de unas considerables vacaciones de algo más de un mes, días que aprovecharía para dedicarme a viajar por Italia y conocer un poco más el país en el que estoy ahora.

Cual fue mi sorpresa cuando se cambiaron las fechas de algunos exámenes. Bueno, no pasaba nada de nada, todavía me quedaban los carnavales de Venezia, al menos eso pensaba.

Entre el proyecto de fin de carrera y que los últimos exámenes de las asignaturas que me quedaban eran el día siguiente de volver de mi viaje, no pude ir a festejarlos. Perdí, lógicamente, el dinero que había pagado por la reserva de los viajes y de los hoteles (era un viaje por Padova, Verona y Venezia). Me quedé estudiando mientras mis amigos se divertían. ¿Mi sorpresa? El día antes del examen que más había preparado y el motivo de que no fuese al viaje, mi tutor erasmus me dice que me sobran unos créditos y que quite esa asignatura... cabreo, enfado, mosqueo.

El malestar me duró poco tiempo, la semana siguiente comenzaba el segundo semestre y no iba a amargarme los últimos días que me quedaban para disfrutar, además, los exámenes de la otra asignatura me habían salido bastante bien...

Mi último fin de semana lo dediqué a, con amigos, recorrer algunos pueblos y ciudades de la Toscana.

Comencé el segundo semestre el pasado lunes, con fuerzas, con ganas, pero al segundo día, al ir a por los resultados de los exámenes de la última asignatura, me entero de que la nota no me servirá de nada, que simplemente eran para ver quién se podía presentar al final, vamos ¡no me jodas! aún por encima el profesor dice: el final no sé si será en marzo, abril, mayo o junio, ya os avisaremos. Seguro que alguien se puede imaginar mi enfado, ¿no? Ya pasa de un simple mosqueo o un leve cabreo.

Así que, aquí estoy, puteado, como el resto de estudiantes de mi clase, viendo como estudiantes de otras carreras tienen que leerse un libro de 100 páginas y hacer un comentario para sacar la máxima puntuación en un examen final, donde no les hace falta siquiera ir a la facultad, porque con hablar con el profesor el día antes y decir;es que soy erasmus; les sirve para tener la nota mínima de aprobado.

Lo que aumenta mi malestar y cabreo es que no dejo de oír comentarios como:;relájate, estás de erasmus;,;sal más de fiesta, eres erasmus; o;si en erasmus no se estudia tanto;. El día que empiece a desarrollar tendencias psicópatas, va a haber cerca de 400 personas menos en Siena, número que se corresponde a la población erasmus.

Un abrazo de un erasmus enfadado:

-FD