Jënd ci jub, realización del proyecto

Jënd ci jub, compra

La realización del proyecto in situ

Nos pusimos manos a la obra en Malem así como en Hodar (un pueblo más alejado y pequeño) para mostrar nuestro entusiasmo y nuestra entrega con este proyecto que significaba tanto para nosotros.

Ayudamos en los huertos para mantener los productos indispensables para la realización de nuestro proyecto.

Vimos cómo se hacen las cuentas y los inventarios.

Los sacos de cacahuetes se almacenan y amontonan en un cuarto. Son bastante grandes y pesados a la hora de transportarlos.

Probamos las máquinas que sirven para desgranar los cacahuetes. Nos dimos cuenta de que se necesita mucha fuerza y energía.

Se aplastan y comprimen en otra máquina. Quedando con una forma sólida, una especia de pasta circular comestible. El líquido que se recoge proporciona el aceite de cacahuete, el cual se necesita para fabricar el jabón.

El procedimiento necesario para fabricar jabón es bastante tóxico y químico, por ello se deben llevar guantes y una mascarilla en la boca.

¿No te parece extraño que haya que protegerse para constituir lo que más tarde utilizaremos en nuestro cuerpo? Confieso que me desconcertó un poco tener que llevar tanto cuidado cuando, al fin y al cabo, el jabón nos permite desinfectarnos.

Estos accesorios son bastante desagradables con el calor asfixiante africano e insoportable cuando debemos estar en una cabaña durante horas para fabricar el jabón.

Es, entre otras, una de las razones por las que admiro tanto la dedicación, la paciencia y la tranquilidad de estas mujeres trabajadoras y valientes en todas las situaciones.

El proceso es bastante largo, hay que mezclar muchos productos, entre ellos el aceite de cacahuete, removerlos y dejarlos reposar. Después, se vuelve a empezar la misma operación muchas veces.

Una vez que los productos se han puesto en sus moldes, hay que esperar que se sequen.

El resultado es sorprendente, un jabón puro, natural, rugoso e inodoro.

El objetivo es sensibilizar el comercio justo y transmitir un mensaje de apoyo a estos grupos de mujeres, hicimos una obra de teatro divertida y apropiada.

La obra contaba el recorrido de una cáscara de cacao. Esta obra, "cabosse et chocolat", nos hizo reflexionar mucho sobre lo que se conoce como chocolate belga.

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