Cascadas de Micos y Tamul

¡La actividad más divertida y de más adrenalina que realicé en México fue, sin lugar a dudas, en las cascadas de Micos, en el estado de San Luis Potosí! Una vez en la parte más alta de estas cascadas, te colocas un casco, un chaleco salvavidas y estás listo para lanzarte entre las siete maravillosas cascadas , todas de diferentes alturas, que discurren por un camino de aproximadamente un kilómetro de largo. Atención, porque una vez que te tiras desde la primera cascada, ¡ya no es posible echarse atrás! Así que respirad profundo y sin pensarlo dos veces lanzaros en esta increíble aventura inmersa en la naturaleza salvaje que corre junto al flujo de agua y los impresionantes colores del río en el que os encontráis, tal como lo hago yo en la foto que inmortaliza el momento de mi vuelo.

Si después de esta ruta aún no estáis cansados, podéis terminar el día visitando la cascada de Tamul, que actualmente simboliza la Huasteca Potosina, siendo la cascada más alta del estado de San Luis Potosí.

Para llegar a la cascada, tendréis que remar en una canoa a lo largo del río Tampaón durante unos pocos kilómetros. En el punto donde las corrientes son más fuertes, se continuará a pie para hacer ese último tramo y encontrarnos frente a la cascada.

El color turquesa del agua parece artificial, y el paisaje que se encuentra frente a él es completamente irreal: ¡innumerables metros cúbicos de agua chocan continuamente hacia abajo, regalando a cualquier persona que asista a este espectáculo momentos que nunca jamás lo olvidará!

Una vez que hayáis tenido la valentía de dejar atrás este maravilloso escenario, llega el turno del juego de las corrientes: desde este momento en adelante, las corrientes os permitirán volver al punto de llegada. Sin embargo, a mitad de camino, si os acercáis al arroyo que se abrirá en el lado izquierdo del río, podéis descansar y tal vez comprar una refrescante "copa de frutas" antes de continuar y terminar vuestra aventura en Aquismón (nombre del municipio donde se encuentra la cascada).

Como siempre, ¡muchas gracias a Godo por las fotos que nos hizo en el agua!

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