Qué hacer antes de ir a San Diego
¡Hola a todos y bienvenidos un día más a mi blog! Ya he terminado con todos los posts de mi primer roadtrip en América y esta vez os traigo un poco de información práctica por si os estáis planteando venir a estudiar aquí o simplemente por si tenéis curiosidad de cómo funciona la parte "menos bonita" de irse a vivir fuera.
Yo ya experimenté todo el tema de papeleos y demás cuando el año pasado me fui de Erasmus a Niza, sin embargo, si eso me pareció demasiado no podía imaginarme cómo iba a ser Estados Unidos. Todos sabemos lo pesados que se ponen con visados y demás, pero de verdad que estuve literalmente dos o tres meses liada con este tipo de cosas. A continuación os cuento todo así que si os interesa no dudéis en quedaros por aquí.
TENER EL PASAPORTE EN VIGOR
Parece una tontería, pero lo primero que necesitas para viajar a Estados Unidos es un pasaporte válido, es decir, no caducado. Parece obvio pero hay que tener en cuenta que vas a estar fuera durante un año, así que el pasaporte debe ser válido durante todo ese año para evitar problemas. Por ejemplo, aunque a mi pasaporte le quedaba aún un año de validez, tuve que renovarlo ya que caducaba en abril y yo me quedaba en California hasta junio. Así que estad muy atentos con esto. Respecto al tema de pasaporte tampoco hay nada más que saber.
SACARSE EL VISADO
Lo primero que hay que pedir cuando sabes que vas a irte a estudiar a América es el visado. Hay muchísimos tipos de visas y en la página web de la embajada de Estados Unidos en España te lo explican todo muy bien. Sin embargo, no deja de ser un rollo y quitarte muchísimo tiempo.
Lo primero que tuve que hacer fue descubrir cual era la visa que yo necesitaba teniendo en cuenta que iba a estar estudiando en San Diego durante un año. Después de informarme bastante llegué a la conclusión de que tenía que sacarme la visa J1. El programa visa J1 es un programa para no-inmigrantes que quieren visitar Estados Unidos ya sea por trabajo o como estudiantes o escolares de corto plazo (un año se considera corto plazo, sí). Lo bueno de esta visa es que permite a las personas trabajar y estudiar al mismo tiempo, sin embargo, antes de buscar trabajo hay que investigar sobre qué tipo de trabajos están permitidos, durante cuanto tiempo, etc. Hay que ser súper cuidadoso con este tema porque a la mínima te pueden denegar el visado.
Una vez has descubierto que necesitas este tipo de visa, necesitas el documento llamado DS 2019, también conocido como "Certificate of Eligibility for Exchange Visitor (J-1) Status". Este documento es el que certifica que eres un estudiante de un programa de intercambio y es el papel que te permite concertar una cita con la Embajada para poder conseguir tu visado.
Este papel incluye una descripción del programa de intercambio que vas a realizar en Estados Unidos, así como la fecha de inicio y la fecha de finalización. Estas fechas son las que indican el período que puedes estar en Estados Unidos, y no la visa J-1, sin embargo, algo bueno que hay que tener en cuenta es que te permiten alargar tu estancia hasta treinta días después de la fecha de finalización del programa. Es decir, por ejemplo, mi programa termina a finales de mayo pero puedo quedarme haciendo turismo o algún curso de inglés hasta un mes después, es decir, finales de junio. Mucha gente no sabe este pequeño detalle y se vuelven antes incluso queriendo quedarse, por ello es importante conocerlo.
Para conseguir este documento no tienes que hacer nada, al menos los alumnos de mi universidad (que por si no sabéis cual es, es la Universidad Carlos III de Madrid). La universidad de destino que en mi caso es San Diego State University manda directamente este documento a mi universidad y esta me informa cuando lo recibe para poder ir a recogerlo. Suele tardar un poco de tiempo, así que no os agobiéis si veis que llega abril y aún no tenéis vuestro DS 2019. Llegará, porque siempre llega.
Una vez tienes este documento firmado por tu universidad, ya puedes pedir cita en la embajada. Se hace todo online y no os voy a mentir, el proceso es bastante. Lo primero que tienes que hacer es pagar una tasa que te permite pedir la cita en la embajada. ¡Ojo! Esta tasa NO es el precio de la visa, es simplemente una cantidad que hay que pagar para que puedan abrir tu expediente en la embajada. Una vez pagado esto, ya puedes empezar a rellenar el interminable formulario de preguntas sobre ti, tu familia, tus amigos, tu pasado... Te preguntan por absolutamente todo, así que hazlo cuando tengas tiempo.
A este formulario hay que añadir la foto que servirá de identificación en tu visa. Tienes que escanearla y subirla a la red, y tiene que cumplir unas características específicas. Por lo que recuerdo, tiene que ser en formato cuadrado de cinco por cinco centímetros, y se te tienen que ver las orejas. Sí, este detalle es muy importante y recuerdo que yo tuve que irme a hacer nuevas fotos de carnet porque obviamente nunca me hago fotos con el pelo por detrás, ¡no me gusta nada!
Dejando de lado este gracioso detalle, el último paso es pagar la visa. Una vez pagada, se te generan varios documentos que tienes que imprimir y llevar a la embajada el día de la cita. La verdad es que suelen tardar bastante en darte la cita, así que te recomiendo que en cuanto tengas el DS 2019 rellenes el formulario y la pidas, para evitar problemas de plazos.
Cuando llega la cita en la embajada, llevas todos los documentos y simplemente tienes una pequeña entrevista con un señor o señora que te atiende en una pequeña ventanilla. No conozco a nadie que le hayan denegado la visa en este punto, pero por si acaso no digas nunca que vas a trabajar; siempre a estudiar. Una vez terminada la entrevista, se quedan con tu pasaporte y aproximadamente tres semanas después te lo mandan a casa con la visa dentro. Et voilà, ya has conseguido la visa, que en mi opinión, es lo más importante.
INFORMARSE SOBRE LA UNIVERSIDAD Y LAS ASIGNATURAS
Cuando te aceptan en la universidad, lo primero que tienes que hacer es enterarte bien de los plazos para la matrícula, para pedir alojamiento si quieres vivir en las residencias que ofrece la universidad… Todo esto varía mucho de una universidad a otra, así que busca toda la información lo antes que puedas.
En cuanto a las asignaturas que vas a cursar en la universidad de destino, lo que tienes que hacer es lo mismo que cuando te vas de Erasmus. Tienes que buscar asignaturas que se parezcan a las asignaturas que tendrías que cursar en tu universidad, y crear lo que se llama el “acuerdo de estudios”. Es un documento en el que relacionas la asignatura en tu universidad con la asignatura en la universidad de destino. Cuando lo has creado, tu tutor asignado te lo tiene que aprobar, y si te lo deniega, tienes que volver a repetir el proceso hasta que finalmente te lo termine aprobando.
Es cierto que el primer acuerdo de estudios no es definitivo, ya que cuando se hace aún falta mucha información sobre horarios, profesores… y seguramente cuando llegues a destino tengas que cambiar cosas, sin embargo sirve al menos como aproximación.
Respecto a cómo elegir las asignaturas, eso depende mucho de la libertad que te den en tu universidad para hacer el acuerdo. La verdad que en mi universidad no suelen ser muy estrictos y es más o menos fácil siempre y cuando se parezcan al menos un poco. Si necesitáis ayuda con esto no dudéis en contactarme, ya que creo que no tiene mucho sentido que os cuente con todo detalle mi acuerdo de estudios y cómo lo hice.
Sin embargo, algo que sí es importante que sepáis es el nivel de las asignaturas. En Estados Unidos, o al menos en California, las asignaturas tienen un número de tres dígitos y el primero de ellos indica el nivel de dificultad de la asignatura. Es decir, una asignatura 200 será muchísimo más fácil que una asignatura 400. Yo por ejemplo estoy cursando una gran variedad de asignaturas y se nota mucho la diferencia.
Además, como todos sabéis ya, el profesor es muy importante a la hora de elegir una asignatura, ya que no es lo mismo que la clase sea aburrida y con muchísimos deberes, a que el profesor sea bueno y haga la asignatura mucho más llevadera. Los nombres de los profesores nos sonarán a eschino, pero en Estados Unidos hay una página web que se llama "Rate My Professor". Es básicamente un buscador en el que pones el nombre de tu profesor y tu universidad, y te salen las opiniones que tienen los alumnos sobre él basados en nivel de dificultad, asistencia, carga de trabajo... y un largo etcétera. Esto es súper útil y se cumple totalmente, así que si en la página te pone que es difícil aprobar te recomiendo que no elijas esa asignatura, o al menos, a ese profesor.
En cuanto al número de asignaturas, todo depende de la suerte que tengas. Yo conozco que gente que haciendo únicamente cuatro tiene muchísimos deberes y gente como yo, que haciendo seis, podemos llevar las cosas al día fácilmente. Así que, si no quieres arriesgarte yo te diría de coger cinco asignaturas por cuatrimestre.
Finalmente, algo que hay que aprovechar de Estados Unidos es la gran variedad de asignaturas que tienen. Aunque no estén incluidas en tu acuerdo de estudios, tienes la posibilidad de elegir clases de canto, baile o fútbol, entre otras. Y sí, generalmete son gratuitas.
INTENTAR CONOCER GENTE
Esto no es muy importante ya que la gente la conocerás cuando llegues, sin embargo, siempre viene bien saber algo sobre alguien que está en la misma situación que tú para poder intercambiar ideas u opiniones, sobre todo al principio.
INFORMARSE SOBRE EL LUGAR ANTES DE IR
Finalmente, mi último consejo es que antes de viajar te informes de la ciudad a la que vas a ir. Esto es aplicable a cualquier intercambio que realices, ya sea en Estados Unidos, en Europa, o en la ciudad que está dos horas de tu casa. Es necesario, por ejemplo, saber el tiempo que va a hacer, enterarte un poco de a qué hora se come o se sale… Es cierto que todo eso lo vas aprendiendo cuando llegas, pero si ya vas con una idea premeditada todo es muchísimo más sencillo.
Además, te recomiendo que busques con antelación cómo vas a llegar a destino, ya que de esta forma podrás ahorrar bastante. Si buscas con antelación vuelos, o incluso autobuses, puedes llegar a gastarte bastante menos dinero, así que ya sabéis. Tened en cuenta que todo el dinero que ahorréis en estas cositas lo podréis utilizar después para hacer cosas más productivas en la ciudad de destino.
Pues bien, dicho todo esto, espero que no se me haya olvidado nada y que os sea de ayuda la información que os he dado. Como siempre os digo, no dudéis en preguntar si necesitáis saber cosas sobre algo concreto ya que estaré encantada de resolver todas las dudas. ¡Hasta el próximo día!
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