Cheesecake Factory y Hash House a Go Go

¡Hola a todos y bienvenidos un día más a mi blog! Hoy os quiero hablar de dos restaurantes que he tenido la oportunidad de probar mientras estaba aquí en San Diego y que me han encantado:

1) Cheesecake Factory

2) Hash House a Go Go

Son dos restaurantes muy americanos, y no sé el segundo, pero el primero es una cadena que se encuentra en muchos estados de los Estados Unidos. La verdad es que solo he ido una vez a cada uno, pero me gustaron tantísimo que tengo la necesidad de contar un poco sobre cada uno en este blog. Así que... ¡Vamos a ello! (Y espero que no os entre mucha hambre leyendo el post...).

1) Cheesecake Factory

La primera ver que me hablaron sobre este restaurante pensaba que era un sitio de tartas de queso, sin embargo, nada que ver. Es un restaurante y además, tiene tartas de queso.

En su carta tienen una gran cantidad de variedad de platos, desde pasta hasta pollo o pescado. Los platos son realmente enormes y están muy ricos.

Además, algo muy guay de este sitio es que nada más sentarte te ponen una bandejita con panes en los que en teoría puedes untar paté o lo que te traigan. Esto puede parecer algo muy normal, pero aquí en Estados Unidos no es muy común.

Después de los platos principales, viene la especialidad de este restaurante: las tartas de queso. Tienen una gran variedad de tartas de queso, desde la más básica hasta alguna con chocolate, chocolate blanco... No sé, la verdad que no exagero si digo que tienen más de quince tipos de tartas de queso. Por aquí os dejo una foto para que las veáis:

Lo que yo recomiendo es pedir un plato para compartir y un trozo de tarta para compartir, ya que sino te va a ser imposible probar ambas cosas. Para que os hagáis una idea, la última vez que fui me pedí solamente un trozo de tarta y no pude ni acabármelo... 

Aquí os dejo una foto para que veáis cómo de grandes son los trozos de las tartas de queso (yo recuerdo que me pedí una con chocolate blanco, pero no me acuerdo exactamente del nombre):

Este restaurante tiene alguna cosa mala, y es que al menos al que fui yo no dejan reservar, por lo que normalmente hay que esperar bastante para sentarte (pueden ser unos quince minutos o unos cuarenta...). Sin embargo, creedme que la espera merece muchísimo la pena.

Además, los precios no son extremadamente altos. Hay que tener en cuenta que Estados Unidos es un país bastante caro, y California aún más. Sin embargo, la Cheescake Factory tiene unos precios bastante aceptables teniendo en cuenta lo grandes que son los platos.

En San Diego hay varias Cheescake Factory, pero a la que  yo he ido es la que está en el centro comercial Fashion Valley (sin embargo, creo recordar que también hay una por la zona de Downtown...).

Así que desde luego que la Cheesecake Factory es un restaurante que recomiendo totalmente.  

2) Hash House a Go Go

Pues bien, este restaurante está en mi zona favorita de San Diego, que por si no os acordáis cual era, es Northpark. 

La vez que yo fui fue para tomar un "brunch" (ya sabéis, lo que se come a media mañana y sirve tanto de desayuno como de comida). La verdad es que no sé si también sirven comidas, pero el Hash House a Go Go es un sitio que recomiendan para el "brunch".

Fuimos a este restaurante por recomendación de mi compañero de piso que lleva viviendo en San Diego unos cuantos años ya, y dice que este es su sitio favorito de toda la ciudad.

Tienen una carta muy variada, y de hecho a mi me costaba un poco entenderlo todo porque a todos los platos les ponen un montón de añadidos... Sin embargo, lo que hay que hacer es irse fijando en lo que llevan los camareros para guiarte por la buena pinta que tienen.

Los platos de este restaurante son enormes, y es que si ya os decía que los de la Cheesecake Factory son grandes, estos lo son aún más. De hecho, os voy a dejar por aquí una foto de mi amiga Sara en cuanto vio su plato:

Yo soy muy de dulce, así que lo que hice fue pedirme una tortita para compartir con mi amiga Zoe, y sí, en cuanto veáis la foto vais a entender el por qué la pedimos para compartir:

Por aquí os dejo también una foto del resto de platos que comieron mis amigos para que os hagáis una idea de cómo son:

La verdad es que estaba todo súper rico, y como en la mayoría de sitios aquí en San Diego, lo que no te comes te lo meten en una cajita para que te lo puedas llevar a casa y no tirarlo. La verdad es que me parece una idea muy buena, ya que creo que nadie sería capaz de acabarse estos platos, así que es una forma de poder comértelo en dos ocasiones.

En cuanto a los precios, este sitio también están bastante bien, y es que aunque los platos pueden parecer caros, no lo son porque tienen muchísima cantidad y podrías compartirlo con alguien perfectamente. Por tanto, me parece que está bastante bien.

Para que os hagáis una idea, la tortita que habéis visto en la foto y que compartimos entre dos, creo recordar que nos costó unos ocho o nueve dólares, que si los divides entre dos se queda en bastante poco...

Este sitio es otro de los que recomiendo en San Diego, y seguiré contandóos alguna que otra recomendación, pero de momento me despido por hoy. Espero que os haya parecido interesante y que no os haya entrado mucha hambre... ¡Hasta la próxima!

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