Un año inolvidable

Estuve en Ratisbona todo el año. Apenas llegué y ya había conocido a un montón de gente de Erasmus, gracias a un curso intensivo de alemán que daban en la universidad y a unas cuantas actividades que habían organizado como excursiones, fiestas, etc.

Los primeros meses fueron muy intensos. Siempre había algo que hacer o algún sitio al que ir. Es una ciudad muy bonita y romántica.

En general las residencias están muy bien de precio. No es difícil encontrar alojamiento porque se encarga la universidad.

Por ejemplo, la zona de Gesslerheim y la de Vor der Grieb están muy bien.

En cada residencia hay una sala en la que se organizan fiestas. Todos los días hay fiesta en alguna parte.

Ratisbona tiene un festival de la cerveza llamado "Dult", muy parecido al Oktoberfest. Se celebra uno en septiembre y otro en mayo y duran unas tres semanas. Es muy divertido.

La universidad está muy bien organizada; los trabajadores se preocupan por ayudar a los estudiantes. En cuanto a la comida, tan solo necesitas 3 o 4 euros para comer en Mensa.

Puedes ir a cursos de alemán gratuitos.

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Hay un gimnasio en el campus de la universidad en el que solo pagas 15 euros por semestre.

Un inconveniente es que los autobuses solo salen cada media hora los domingos. Y, por la noche, no hay autobuses después de las 11:30 o 12 h. Pero, de todas formas, la ciudad está muy bien conectada.

Además no hay aeropuerto en Ratisbona. Tienes que coger un autobús desde el aeuropuerto de Múnich hasta Frisinga. Luego, desde la estación de tren de Frisinga, coges un tren hasta Ratisbona. Puedes hacer todo esto con un bayern-ticket.

Pero casi todo son ventajas.

Para salir de fiesta, recomiendo Suite, Gloria y Susi Wong. Para salir de copas, "Carlitos". En cuanto a los restaurantes, hay una pizzería muy barata y buena que se llama "Losteria". Si quieres probar la comida típica alemana, hay sitios muy buenos y "Beer Garten" está muy bien.

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Cuando hace buen tiempo, es una maravilla hacer barbacoas a orillas del río.

Además es muy útil comprarse una bici de segunda mano, por ejemplo, que sea barata.

¡Espero que lo paséis bien!