Tips para un comienzo no tan desastrozo

Creo que los he tenido un poco desatendidos con respecto a mi nueva vida en la playa, platiqué anteriormente de como fue la noticia de mi cambio y de cómo fueron los mis primeros días en Puerto Vallarta, hoy, después de un mes, casi dos meses, puedo compartirles un poco más de lo que ha sido esta nueva e interesante experiencia.

Aprende a encajar.

Los seres humanos somos seres sociales, y creo que por más que nos guste la soledad, llega un punto donde buscas la interacción con más seres humanos y el buscar ser parte de un grupo, por fortuna, yo me percaté rápidamente de esta necesidad y busque velozmente como satisfacerla, en los primeros días de mi nuevo trabajo, me preguntaron si a mi me gustaba jugar futbol o si practicaba este deporte, como lo he hecho desde que era pequeño y en realidad es de mis deportes favoritos, respondí con un rotundo si, y fue así como empezó mi integración con los miembros del trabajo y en un nuevo grupo social.

Creo que es muy sabido que el futbol es de los deportes que es capas de unir naciones, a mí, me invitaron a jugar un día lunes y sin falta me presente ese día con toda la actitud de relucir y meter la mayor cantidad de goles posibles, hacia ya un buen tiempo atrás que no había jugado por lo que no me resultó de lo más sencillo, pero aunque sea hice mi mayor esfuerzo, mi habilidad y cualidades futbolísticas fueron apreciadas y me invitaron a formar parte del grupo oficial de la empresa en un torneo que llevaba ya unas semanas antes llevándose a cabo.

 Aquí voy a interrumpir un poco para darles un comentario del tema, en todo trabajo, es muy importante dar a notar que te gusta o gustaría integrarte al mismo, ser parte de esta nueva sociedad o conjunto, y esforzarse por complementar a los integrantes, siempre tengan presente una idea: Hay que sumar, nunca restar.

Justo el día de hoy (martes veinte de junio) nos reunimos como ya se ha estado haciendo costumbre, para jugar futbol, formamos equipos de seis o siete según sea la afluencia de personas, y jugamos por un lapso aproximado de dos horas ( o hasta que se oculta el sol) y posteriormente nos tomamos unas cervezas, lo sé, tal vez no sea la manera más atlética de lidiar con la situación, pero al final el calor y el gasto de energía, son la excusa perfecta para “chelear”.

No te cotices tanto.

Este título viene a que generalmente cuando recién están integrándose a un nuevo trabajo, siempre hay alguien o un grupo de personas que va a intentar integrar, te invitará a algunos eventos que ya hayan estado organizados  o talvez a ir a comer o por una cerveza, muchas veces el miedo, o que y teníamos planes previos, nos lleva a rechazar la invitación y después de unas dos o tres invitaciones rechazadas la gente comenzará a dejar de invitarte, es mejor aprovechar cada oportunidad que se te ofrezca, para conocer a tus compañeros de trabajo, y estrechar lazos de un inicio, solamente así te irás dando cuenta de que relaciones vas a querer mantener, y cuales es mejor simplemente manejarlas como relaciones profesionales, por ejemplo, un sábado me invitaron a una excursión a uno de los rios del Puerto Vallarta (está la publicación en mi perfil), y sin pensarlo dos veces accedí porque además de que no hay mejor manera de conocer un lugar que a través de los ojos de un local, fue una gran manera de conocer más a mis compañeros de trabajo y darles a entender que estoy abierto a formar parte de su grupo.

Practica la resiliencia, pero también aprende a tomar acción.

Finalmente este comentario viene de un hecho que hace poco me acaba de suceder, no se si lo comenté en la publicación anterior, pero en el trabajo me ofrecieron un departamento por una temporada de un mes en lo que yo buscaba por mi cuenta otra opción o alternativa para vivir, comencé a buscar, de preferencia cercano a mi lugar de trabajo (con la experiencia he aprendido y disfrutado del goce de vivir cerca del trabajo), vi demasiadas alternativas, de diferentes precios, y de diferentes características, pero por simple descarte, fui eliminando todas las opciones hasta quedarme finalmente con tres, un departamento en el que me iban a cobrar diez mil pesos por dos recámaras, otro departamento en el que me cobraban siete mil quinientos por dos recámaras pero me tenía que ir en enero (para que la rentaran a un mayor precio) y un estudio de cinco mil pesos, en lo personal, la alternativa de dos recámaras por diez mil pesos me parecía bastante factible, pero no encontré a ninguna persona que estuviera dispuesta a pagar la mitad de esa cantidad, y por supuesto que no estaría dispuesto a volver a buscar una alternativa meses después con la presión de que tenía que cambiarme de lugar, por lo que al final tome la decisión de rentar el estudio, está un poco descuidado y poco anticuado, pero al final pensé que podía llegar a hacerle algunas modificaciones y mejoras.

El titulo de esta parte, hace alusión a que hay momentos en la vida en las que únicamente te va a quedar la opción de irte adaptando a las circunstancias, pero eso no significa que debas ser un mediocre o dejar que la gente o situaciones manden tu día a día, yo vi que por las circunstancias el rentar ese estudio era la mejor alternativa, pero eso no significa que voy a estar sufriendo por no encontrar un departamento o casa como tenía en mente, si ya es lo que tuve que escoger por las circunstancias, está en mis manos hacerlo más acogedor y agradable para mí.

Comentario final.

Espero que esta breve publicación semi actualizada de lo que me ha estado ocurriendo en mi llegada a Puerto Vallarta, pueda dar un mensaje positivo o unas ligeras enseñanzas para cuando es encuentren en la misma situación, tan solo recuerden: Aprende a encajar, No te cotices tanto, y Practica la resiliencia, pero también aprende a tomar acción. Espero que, si siguen estos consejos, su estancia en una nueva ciudad pueda llegar a ser más agradable. 

Acontinuación un grupo de imagenes de lo que han sido las primeras semanas siguiendo estos consejos:

Una foto panorámica de una de las obras en las que se esta trabajando en la oficina, ahí me ofrecieron ir de visita y sin dudarlo dos veces acepté la invitación, para toparme así con esta maravillosa vista de Puerto Vallarta.

Fotografía de un atardecer en lo que será mi próxima vivienda, Bucerias.

Una de las tardes en donde nos hemos estado reuniendo para ir a practicar el futbol con los compañeros del trabajo.

Otra parte del aprendizaje conlleva a observar, analizar y preguntar, como este "fruto" que me he estado encontrando frecuentemente de un árbol muy colorido, lo abrí y me topé con lo que puede ser un buen elemento decorativo.

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