Si te gustan los cuentos de hadas, Praga es tu ciudad.

¿Has oido hablar alguna vez de la ciudad de las Cien Torres o la Ciudad Dorada? Bien, pues a quien se le ocurrió poner estos nombres a la ciudad de Praga no le hizo falta demasiada imaginación, una vez que estés allí podrás verlo con tus propios ojos.

Si te gustan las ciudades de cuentos, encantadas o con mucho misterio e infinidad de rincones por descubrir, no podrías haber elegido ninguna ciudad mejor. 

Sinceramente no sabría decidirme por cual es su símbolo más emblemático o su monumento turístico más importante, ya que todos tienen algo especial, pero creo que me voy a decidir inicialmente por "El puente Carlos". Praga tiene varios puentes paralelos, pero sin lugar a dudas este es el más importante, una vez que pases por él entenderás por qué. A lo largo de este puente te encontrarás a infinidad de artistas callejeros que te van a hacer el paseo más ameno, eso sí, no esperes un paseo tranquilo y sin gente, porque simplemente su entrada suele estar siempre abarrotada de gente. 

Po otro lado, otro de las imagenes más representativas de Praga, es el reloj que está en la Plaza de la Ciudad Vieja, el cual personamente me defraudó ya que para variar, debe estar siempre en reparación. No te olvides de ir a las horas en punto, donde el reloj hace su pequeño espectáculo. Dejando a un lado el reloj, la plaza tiene su propio encanto, con puestecillos y un montón de ambiente todo el tiempo, no te olvides de recorrer las calles que están al rededor, con tiendas que realmente llaman la atención, aunque no para todos los bolsillos. Una vez en la plaza, puedes ver la "Torre de la Pólvora", que como hemos mencionado antes, podría ser el castillo de cualquier princesa, realmente son edificios de cuento de hadas como te voy a enseñar en esta imagen, pero no te olvides de que las ciudades tienen su propio encanto de noche, como es este caso. 

Obviamente no es una ciudad que se pueda ver en un día, ya que muchas cosas merece la pena pararse a contemplarlas o simplemente disfrutar de muchos ratos de tranquilidad que te proporciona la ciudad.

Ahora llega la casa de la reina, a la cual solo le faltan los dragones para hacerlo más idílico. Praga tiene un castillo enorme que podras ver desde distintos puntos de la ciudad, ya que está en lo alto y debido a su majestuosidad llama bastante la atención. Merece la pena subir a verlo ya que allí puedes encontrar una de las mejores vistas de todo Praga.

El castillo es realmente enorme con un monton de recovecos que tendrás que ir descubriendo. Otra parte dentro del castillo que no te va a hacer falta buscar mucho para encontrar, es la catedral de San Vito, evidentemente para un castillo como este la catedral no podía quedarse atrás, así que aquí tenemos, una catedral que no tiene nada que envidiar a Notre Damme en París.

Solo necesitas una cosa para poder disfrutar de Praga, buen tiempo. Esto es realmente esecial, ya que aunque sea una ciudad pequeña que puedas ver en pocos días, lo que de verdad marca la diferencia de esta ciudad es poder dar un paseo tranquilamete e ir descubriendo los rincones que aunque no sean especialmente turísticos estoy segura de que te causarán muy buena impresión.

Ya sabes, cuando visites Praga, hazlo con la mente abierta y mucha imaginación, puedes encontrar dragones en cualquier esquina ;)

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