Praga, una ciudad de cuento

Como os dije en mi anterior post, el post de Budapest, hicimos un viaje incluyendo ambas ciudades, Budapest y Praga. Y vaya combinación de ciudades…Cada cual más bonita. Al volver del viaje nos preguntaron cuál nos había gustado más, y la verdad es que es demasiado difícil decidirse por una o por otra.

A mí, personalmente, me gustaron mucho las dos. Cada cual tiene su encanto. Quizás Budapest sorprende más, con su aire bohemio y ese toque tan original que tiene la ciudad. Pero por supuesto, Praga, una ciudad tan de cuento… Es imposible no enamorarse de ella. Es de esas ciudades que cuando te vas, no puedes imaginar una vida sin volver a pasear por sus calles.

Antes de empezar, quería contaros que la moneda en la República Checa son las coronas checas, y el cambio es el siguiente: 1 corona checa= 0,039€. 1€= 25,63 coronas checas.

A continuación, os contaré más detalladamente como fue nuestro tour por Praga.

 

Dónde alojarse

Si ya habéis leído alguno de mis posts, sabréis que en la mayoría de ocasiones, solíamos alojarnos en hostales. Aparte de ser la opción más barata (al fin y al cabo estábamos de Erasmus y queríamos gastar lo menos posible), era interesante compartir “casa” con gente de tantos países, y tan diferente.

En Praga nos alojamos en el Hostal Ibex, algo alejado del centro histórico, pero estaba muy bien comunicado tanto con la estación de autobuses, como con el centro, lo cual es de agradecer. El Hostal estaba genial, con una decoración muy original, y todo muy limpio. Tenía una amplia cocina con unas mesas inmensas, así que era bastante cómodo por si tenías que guardar cualquier cosa. El personal, atento y amable, hablaba inglés perfectamente. La conexión WiFi también funcionaba muy bien.

Dónde salir

No sé si estaréis enterados, pero Praga cuenta con la discoteca más grande de Europa del Este, la Karlovy Lazne. Se trata de un edificio antiguo, situado justo antes de cruzar el Puente de Carlos, que ha sido remodelado para convertirse en una discoteca de 5 pisos. Nosotras fuimos la primera noche, y, aunque evidentemente no estaba mal, pues había muchos ambientes distintos, fue algo agobiante. Al parecer, anteriormente contaban con una terraza que cuando nosotras fuimos ya no estaba, y realmente hace falta. La entrada fueron unos 15€, por si os interesa.

En cambio, hay un sitio que si os recomendaría sin dudarlo. Un ruin bar conocido popularmente como el bar de los perros, el Vzorkovna es un bar alternativo donde pueden entrar perros. Se trata de un bar muy original, en el que pagas al entrar (creo que la entrada mínima es de unas 100 coronas checas), y ese dinero te lo ingresan en una tarjeta que te entrega el señor que está en la entrada (muy antipático, por cierto, casi nos quita las ganas de entrar). Dentro del bar, tienes que ir pagando con esa tarjeta, y cuando sales, devuelves la tarjeta y lo que no te lo hayas gastado te lo devuelven en metálico. A mí, personalmente, me encantó este sitio, la decoración, la música en directo… Tiene una gran cantidad de salas, como una para jugar al billar, e incluso una con un piano que pueden tocar los clientes.

Qué hacer en Praga

La ciudad vieja

En Praga no realizamos ningún free tour (aunque los hay disponibles en español), vimos la ciudad por partes en los dos días completos que estuvimos allí, por lo que os la iré explicando dividida por zonas, para evitar explayarme y liarme demasiado.

Nuestro primer punto fue la Plaza de la ciudad vieja, donde pudimos integrarnos con el ambiente de la ciudad, con una cerveza bien fresquita en la mano (allí te dejan beber por la calle). La Plaza constituye uno de los lugares más bonitos de la ciudad, famosa por sus fachadas únicas, y sus preciosos monumentos. La plaza alberga el Ayuntamiento de la ciudad, que destaca por su alta torre (a la que es posible subir para contemplar las vistas, pagando unas 130 coronas), y por el famoso Reloj Astronómico, el reloj medieval más famoso de todo el mundo, que se encuentra en una de las fachadas del edificio. Cuando fui, estaba en obras, lo cual es una pena… Es importante que sepáis que justo al lado del Ayuntamiento encontramos una oficina de turismo, por lo que os podéis informar allí de todo lo que necesitéis.

En la misma plaza se encuentra la Iglesia de Tyr, un edificio gótico de dos torres que sin duda constituye el monumento que más destaca al estar allí. Si buscáis alguna foto de esta plaza seguro que sabréis a cual me refiero. Otros puntos de interés son la Iglesia de San Nicolás y el Palacio de Goltz Kinsky.

Un poco más al sur de la plaza, encontraréis la famosa cabeza de Kafka, conocida por su tamaño y por los giros que da cara pocos minutos, recomponiéndose de distinta forma. La escultura es en honor al famoso escritor checo Franz Kafka, conocido por obras como “La Metamorfosis”, presente en muchos de los souvenirs que podéis obtener en la ciudad.

Si en vez de seguir esta dirección, seguimos hacia el norte de la plaza, encontraréis el barrio judío Josefov, muy conocido por sus sinagogas y su gran cementerio. Resulta muy interesante conocer la historia del mismo, pues durante unos 300 años constituía el único lugar de la ciudad donde era posible enterrar a los judíos.

Para los que decidáis dedicarle más tiempo a esta ciudad, os recomiendo que miréis los museos que podéis encontrar en la misma, pues Praga se encuentra plaga de diversos e interesantes museos.

 Al sur de la ciudad vieja, tenéis la Plaza de Wenceslao, centro de la parte de la ciudad nueva, que ha presenciado los acontecimientos históricos más importantes de la ciudad ocurridos en los últimos años. En esta plaza encontraréis el Museo Nacional de Praga.

Cruzando el Puente de Carlos

El Puente de Carlos es el más antiguo y más famoso de la ciudad y atraviesa el Río de la ciudad, el Río Moldava. El puente, lleno de estatuas de personajes de gran importancia, comunica la ciudad vieja, con la ciudad pequeña de Praga, que veremos a continuación lo que podemos encontrar en esta zona. Las vistas desde este puente son increíbles, y es bonito atravesarlo mientras escuchas a diferentes grupos de música tocar, y ves a los diferentes pintores callejeros retratar las maravillosas vistas.

También es posible realizar un paseo en barco, e incluso contratar un paseo con cena. Por si os interesa, encontraréis en los laterales del río los puestos para preguntar por la información y contratar sus servicios. Sin duda, tiene que ser una experiencia maravillosa que me gustaría vivir la próxima vez que visite la ciudad (que sin duda, volveré).

Uno de los puntos más famosos a visitar es el Castillo de Praga, sin duda, este edificio histórico que data del siglo IX, constituye uno de los iconos de la ciudad, y es interesante que sepáis que se trata de uno de los castillos más grandes del mundo. Desde 1918, lleva siendo la residencia del presidente de la ciudad, quien tiene allí su despacho (quién pudiera...).

El acceso es gratuito en cuanto al complejo en sí, ya que puedes entrar, pasear por el mismo, y contemplar las increíbles vistas de la ciudad sin ningún problema. Lo sí es cierto, es que hay que pagar entrada para poder visitar los lugares que alberga el mismo, que son el Antiguo Palacio Real, la Catedral de San Vito (símbolo de la ciudad y del país), la Basílica y el Convento de San Jorge, el precioso Callejón del Oro, diversas torres y exposiciones que se realizan en su interior. El precio de la entrada sería pues de 125 o 175 CZK con tarifa de estudiantes, y dependiendo del día.

Los horarios de apertura del castillo son los siguientes:

- Desde noviembre hasta marzo abre todos los días de 6:00 a 23:00 horas., pero el horario de visita a los monumentos es de 9:00 a 16:00 horas.
- Desde abril hasta octubre abre también todos los días, pero de 5:00 a 00:00 horas, y el horario de apertura de los monumentos se amplía de 9:00 a 18:00 horas.

Otro punto muy famoso que ver en esta parte de la ciudad es el muro de John Lennon, todo un símbolo de libertad. Se trata de un muro lleno de pinturas que surgió a raíz de que Lennon fuera asesinado. Apareció en este muro una pintada, a la que se le fueron sumando más y más. Los grafittis fueron borrados del muro en diversas ocasiones, hasta que las autoridades terminaron por rendirse. Este muro está localizado en la Isla Campa, al cruzar el puente de Carlos, girando a la izquierda y recorriendo un par de calles (es algo lioso, pero seguir a los turistas nunca falla). Suele estar bastante lleno de gente, por lo que os recomiendo que intentéis ir en horas poco concurridas si queréis sacar una buena foto. Tras ver el muro, nosotras fuimos a un bar situado muy cerca inspirado en el cantante, muy recomendable para tomar algo.

Si cruzáis el puente de Carlos, y en vez de ir hacia el muro, andáis hacia la derecha, pegados al Río Moldava, acabaréis encontrando una preciosa estampa de cisnes, una imagen bastante conocida también de esta ciudad. Es increíble tenerlos tan sumamente cerca, mientras contemplas las vistas al puente de Carlos y la Ciudad Vieja.

El Teatro Negro en Praga

Otra actividad que realizar en esta ciudad, es ver un espéctaculo de teatro negro, que aunque hoy en día, se realiza en más ciudades, tiene su origen en esta ciudad. Se trata de un teatro de negro sobre negro (actores vestidos de negro sobre fondo negro). Se caracteriza por ser una forma de teatro mudo en el que predomina la música. Es algo muy curioso y muy diferente de ver. Este tipo de teatro se realiza en varios sitios en Praga, como el Teatro de Imagen de Luz Negra, que no nos puede indicar mejor que ese tipo de obras se realizan allí.

Recomendaciones

Mi visita a Praga fue a principios de junio, y no pudo hacer más calor. Se agradece el buen tiempo, pero un calor tan sofocante impide un disfrute total a la hora de subir al Castillo de la ciudad, que se nos hizo un poco cuesta arriba. Si tenéis la oportunidad de iros en unas fechas menos cálidas, lo agradeceréis.

Al igual que en Budapest, en Praga también está la Prague Card, una tarjeta con diferente precio según los días que queráis incluir, con la que puedes acceder a diferentes monumentos de la ciudad por el precio que habéis pagado. Os recomiendo que lo miréis bien, pues os puede salir más rentable que pagar la entrada a los sitios por separado.

Existen unas tiendas de souvenirs por toda la ciudad que tenían unos recuerdos muy originales, con unos diseños preciosos. No eran las típicas tiendas de souvenirs que siempre suelen tener lo mismo, y además, los precios estaban muy bien. Todos los souvenirs tienen diseños ilustrados, y hay desde postales hasta camisetas. No recuerdo si el nombre de la tienda era Praga Gifts, ni tengo claro si se trataba de una cadena, o simplemente muchas tiendas de souvenirs compraban estos productos. Pero sin duda, si cualquiera de vosotros decide pasarse por esta ciudad, acabará dando con estos regalos de los que os hablo.

Moverse por Praga es sencillo, y sale bastante bien de precio, ya que hay bonos de transporte para varios días (es lo que más rentable os puede salir). Os recomiendo tener cuidado, pues en esta ciudad suelen timar mucho a los turistas con el tema del transporte. Se trata de personas que van vestidas normal, pero se suben a los medios de transporte haciéndose pasar por revisores. Habíamos leído sobre este tema ya que nos lo habían contado, y en una ocasión, pudimos verlos en el autobús en el que íbamos montadas.

Espero que os haya gustado el post, ¡nos vemos en el siguiente!

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