Pisa nel cuore

Se dice que el erasmus no es un año de tu vida, si no tu vida en un año, una historia que comenzó al poner el primer pie en ese avión de ryanair con destino a Pisa ,donde en tu mente solo tenias infinitas preguntas sobre el año que te esperaba: ¿ cómo serán los demás erasmus?, ¿ aprobaré alguna asignatura?, ¿ terminaré con cara de pasta al final del año?, preguntas en las que hoy en día algunas se quedaron sin respuesta.

Llegas a esta pequeña ciudad, de la que te avisaron que solo tiene una torre y una catedral y empiezas a investigar, a descubrir, a ver que no es cierto, cada calle, cada plaza, cada rincón tiene algo mágico, y es cuando te das cuenta que nunca olvidarás esta pequeña y adorable ciudad.

Tu primera noche y comienzas a conocer a los demás erasmus, muestras tu mejor cara, das lo mejor de ti, sabes que vas a vivir un año con ellos, pero no piensas ni una milésima de segundo en lo que se llegan a convertir al final de esta gran experiencia. Muchos de ellos serán amigos, algunos conocidos y otros familia.

Quién nos iba a decir que esa sensación de echar de menos a la gente que dejaste en España al llegar a Pisa, se iba a duplicar  al final del erasmus con estas increibles personas, aquellas con las que te has reido, has brindado con moretti, has descubierto lugares inimaginables de Italia, incluso has sabido buscar junto a ellos planes impensables en aquellas tardes vacías. Es lo que me hacer ver que en la sutileza de las pequeñas cosa, ahí es donde reside la felicidad.

Comienza tu año, un año cargado de viajes, de conocer personas de todos los rincones del mundo, un año lleno de momentos los cuales te acordarás días tras días, guardandolos para toda la vida. Cada sorprendente fiesta, cada beso que has regalado, cada tarde de río, cada noche en vela que resultaba mejor que el verano de tu vida.

Hemos dejado huella en nuestra encantadora Pisa. Siempre somos la alegría de la fiesta, ahora es el momento de echar la vista atrás, aquellos momentos de sentimientos, alegrías y emociones que nos han llenado tanto durante este año pero que siempre permanecerán dentro de nosotros.

Como echaremos de menos las tardes en el río, la torre, nuestras tardes en la playa o nuestras innumerables cenas y comidas por cada acontecimiento que sucedía. Este no será solo un viaje, será un punto y aparte en nuestras vidas. Hoy podemos decir que somos más independientes, que llevamos a nuestras espaldas una gran experiencia y aunque parezca mentira somos más responsables.

Nos acompañan personas que ahora son nuestra segunda familia. Pisa no has sido ni serás solo un momento en nuestras vidas, siempre permanecerás en nuestras memorias, haciéndonos recordar posiblemente los mejores momentos de nuestra juventud y nuestra suerte de haber compartido esta experiencia con personas que hacen un año no sabíamos que se convertirían en algo tan importante.

Somos afortunados, si, todo lo que hoy sea duro por nuestra marcha, mañana será una sonrisa por recordar cada uno de los momentos que hemos tenido la oportunidad de vivir. Es el momento de cerrar los ojos y sentirnos orgullosos de cada día que hayamos pasado en esta ciudad, de recordar cada risa y cada llanto, desde nuestro primer y tímido día de erasmus hasta hoy. Seguro que cada imagen que nos venga será un motivo más por el que nunca podré olvidar esta bonita experiencia.

Hoy y siempre Pisa nel nostro cuore.

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