El Gran Cañón está en los Estados Unidos, más concretamente, en el estado de Arizona. Es un cañón enorme, mide unos 450 km de largo y fue nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Ofrece unas vistas espectaculares, y es uno de los parques nacionales más visitados de los Estados Unidos.
Basta con llegar y echarle un vistazo a las vistas de este impresionante cañón para quedarte sin aliento. Personalmente, nunca había ido a ningún sitio que pareciera tan irreal, incluso aunque lo tengas justo en frente. Es tan impresionante que pareces estar de pie delante de un fondo de pantalla enorme. El cañón parece no acabar nunca, con todas sus capas de rocas multicolores y el río Colorado que lo atraviesa. Parece demasiado bonito para ser verdad.
Cuando fui al Gran Cañón, fuimos a pasar el día para andar por la zona y admirar las diferentes vistas. Hay muchos senderos para ir a caminar por todo el parque nacional, algunos más fáciles y cortos, y otros más difíciles y largos. Cogimos uno que bajaba por el valle del cañón, y tardamos dos horas en ir y volver. Era un sitio espectacular para ir de senderismo, y había muchísimos puntos buenos para echar fotos. Algunas veces hasta me encontraba con animales, como ciervos o roedores.
Luego cogimos un bus para ir a otra parte del cañón y ver el parque nacional desde otro punto. Creo que los buses y los caminos te llevan a un montón de sitios con vistas preciosas a lo largo de todo el cañón. Además, si tienes algo de dinero ahorrado, puedes reservar un paseo en helicóptero por encima del cañón, o paseos en canoa y ráfting por el río Colorado.
Ya sea haciendo un tour o explorándolo por tu cuenta, el Gran Cañón es un lugar único, no hay nada parecido en ninguna otra parte del mundo. Asegúrate de llevar bastante agua contigo, sobre todo si vas en verano, porque hace muchísimo calor. Obviamente, llévate la cámara, porque hay vistas que merece la pena conservar como recuerdos.
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