París ~ Amor a primera vista

Unos pocos días en París, Francia, son suficientes para dejarte sin aliento. Yo crecí leyendo libro tras libro sobre Francia, la familia real y la historia de este país tan artístico y extravagante. A causa de leer desde las hazañas de El conde de Montecristo y los paseos en carruaje de sus conocidos por los Campos Elíseos hasta ahondar en los relatos de ficción histórica de la joven vida de María Antonieta, yo ya tenía muchas ideas en mi mente acerca de cómo sería París. De todas formas, unos pocos días en la ciudad me dieron una perspectiva fresca, corrigieron algunas opiniones equívocas y me aportaron una nueva imagen acerca de esta ciudad preciosa y de sus gentes.

I visited many places during my few days in Paris and had many unique experiences, and several stuck in my memory really well and have given me a wonderful image of Paris in my mind to remember forever. Estos fueron mis mejores momentos en esta maravillosa ciudad:

1. Visitar la Ópera Garnier: el tan famoso lugar en el que se ambienta El fantasma de la ópera

   Este gran libro, luego convertido en película, me emociona y conseguir hacer un tour por el sitio real de este cuento ficticio fue una experiencia increíble para mí. ¡Era muy parecido a lo que me había imaginado, pero mucho más grande y lujoso de lo que me esperaba!

2. Caminar hasta la puerta dorada de Versalles

   Desde una edad temprana estoy loca por la historia de María Antonieta y, además, Versalles era aun más grande de lo que alguna vez podría haber imaginado, justo como la Ópera Garnier. De hecho, esta fue una de las cosas que me impresionaron de París. ¡Cada lugar fascinante que visitábamos era más grande de lo que yo pensaba en primer lugar! Los jardines de Versalles eran preciosos y paseamos por los alrededores del Pequeño Trianón y las muchas fuentes y prados enormes.

3. Comer crepes en un café de un barrio

   Cerca de nuestro apartamento Airbnb encontramos un pequeño café en el que todos los asientos y mesas estaban juntos y se salían a la acera. Hacían unas crepes increíbles que nos tenían comiéndolos a mordiscos lentos y con los ojos cerrados. Aunque solo estuvimos en la ciudad por unos días, fuimos dos veces a comer a este mismo café. Encontrar cafés pequeños de la zona y lejos de las zonas turísticas es una experiencia maravillosa.

4. Hacerse fotos con la vista de la Torre Eifel

   Es un monumento tan famoso, ¿quién puede evitarlo? Me encantó intentar sacar fotos en las que se me veía saltando enfrente de esta estructura que en su día fue odiada y ahora es tan querida (estaba en esa fase de la vida, la de las fotos-saltarinas).

París puede parecer un sitio muy cliché para visitar cuando tan solo tienes unos pocos días libres, pero es realmente preciosa y, de verdad, da esa sensación de romanticismo de la que todo el mundo habla siempre. Desde la arquitectura hasta los monumentos históricos, desde la comida hasta el arte, esta ciudad fue un amor a primera vista. Recuerda buscar un apartamento Airbnb bonito que te permita estar cerca de los museos y monumentos y no te olvides de vagar por las calles no tan conocidas para encontrar cafés únicos donde comer. ¡Pásalo bien!

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