Cowfish

Restaurante Cowfish en Universal Studios Orlando Riverwalk

Si echáis un vistazo a la cantidad de posts que dedico a describir restaurantes, probablemente adivinaréis que me encanta la comida y visitar locales nuevos. Cuando viajé a Orlando durante mis vacaciones de Año Nuevo, uno de mis amigos encontró un restaurante muy prometedor llamado Cowfish ubicado en el segundo piso del complejo de Universal Studios Orlando Riverwalk.

¿Podemos tomarnos un segundo para admirar la decoración? Sí, es algo llamativa pero nada exagerada.

Estoy muy lejos de ser una experta en calificar restaurantes, pero debo decir que Cowfish es uno de los locales más innovadores en los que he estado. En los siguientes párrafos podréis leer qué hizo que mi experiencia en este lugar fuese tan especial.

Incluso la entrada resulta atractiva a la vista. ¿Cómo supieron que mi color favorito es el azul?

¿Qué deberíais pedir?

Esta es una página del menú.

Empecemos por los aperitivos. Lo admito, rara vez pido aperitivos porque me gusta pedir un plato principal y un postre grande al final de la comida. Pero el camarero nos recomendó encarecidamente que probásemos sus calamares fritos, porque, según él, están buenísimos.

Me encantan los calamares y estaba hambrienta, así que decidí probarlos. En cuanto di el primer bocado, me di cuenta de que había estado a punto de cometer el mayor error de mi vida al no pedir aquel aperitivo. Están rebozados y se deshacen en la boca. No hace falta decir nada más.

Deberíais poner de inmediato sus hamburguesas vegetarianas en vuestra lista de comida que debéis probar. Siempre he pensado que las hamburguesas vegetarianas son asquerosas, probablemente porque yo solo las había comprado congeladas en un supermercado local cuando iba a la universidad y no tenía tiempo de cocinar cuando volvía de fiesta.

Pero las hamburguesas vegetarianas de Cowfish son estupendas. En primer lugar, son enormes y apenas fue capaz de morder la mía. Segundo, son muy sabrosas, no como las del supermercado. Y por último pero no menos importante, llevan ingredientes inusuales. ¿Alguna vez habéis visto una hamburguesa con aguacate, col rizada, espinacas, cebolla y brotes de soja? Pues la veréis si coméis en este restaurante.

La hamburguesa vegetariana que veis en esta foto es la más grande que me he comido en toda mi vida. ¡Y viene acompañada con una ración de patatas fritas!

¿Alguna vez habéis soñado con probar una hamburguesa y sushi todo junto? Pues aparentemente no sois los únicos porque en este restaurante tienen una creación especial en su menú a la que llaman "burgushi", una hamburguesa de sushi. Uno de mis amigos lo pidió y me dejó probarlo. Debo decir que está delicioso. Se trata básicamente de un rollito de sushi colocado entre dos panes de hamburguesa. ¿Sushi y pan? Al parecer, no es mala idea.

Además, cuentan con otra creación que resulta todavía más rara que el burgushi. Se trata de la hamburguesa "Cowfish ha dejado el edificio", hecha con mantequilla de cacahuete, bacón y plátano frito. Esto fue lo que pidió mi mejor amiga (Marta, tienes todo mi respeto) y consiguió comerse casi la mitad antes de admitir que era demasiado asqueroso como para terminárselo. Esta hamburguesa parece salida directamente de la mente de una mujer embarazada que tiene antojos extraños.

Bebidas

En Cowfish encontraréis una impresionante selección de cervezas de barril, todas ellas por menos de diez dólares. Desafortunadamente, no nos dejaron probar la cerveza antes de comprarla, como hacen en otros restaurantes, pero quedé bastante satisfecha con mi elección. De todas maneras, probarla creo que hubiese sido innecesario porque el camarero nos explicó el sabor de cada cerveza con todo detalle.

Las creaciones raras no atañen solo a la comida en este local. Cuentan con algunos batidos muy cool y algunos de ellos van un poco cargados (les añaden alcohol y, por supuesto, no pueden servirse a menores de 21 años). Yo probé el "Island Breeze" por doce dólares. Sí, puede parecer muy caro por un batido, pero dejadme deciros que estamos hablando de 500 ml de batido con suficiente alcohol como para que la cabeza os de vueltas un poco, o incluso emborracharos.

¿Es muy caro?

Todos los primeros platos del menú cuestan entre diez y doce dólares, lo cual es una ganga teniendo en cuenta la cantidad de comida que viene en el plato y las creaciones innovadoras que ofrecen. Algunos de los aperitivos cuestan menos de diez dólares.

Conclusión

Si os gustaría probar platos innovadores y que os atiendan camareros muy simpáticos mientras admiráis las vistas del parque Universal Studios de Orlando al fondo y sin tener que pagar mucho por ello (y en un restaurante cuyas paredes son muy coloridas), os sugiero encarecidamente que vayáis a Cowfish. ¡No os arrepentiréis!

La paredes llenas de color son la marca distintiva del restaurante.