Día 5 en Nueva York: Bryant Park, Times Square, St. Patricks Catehdral y Radio City Hall

¡Hola a todos otra vez y bienvenidos a mi blog! En el post del último día os conté que después de visitar la Biblioteca Pública de Nueva York pusimos rumbo a nuestra cuarta parada, el Bryant Park, así que el post de hoy comienza precisamente con este parque.

4) Bryant Park

La razón por la que la siguiente parada era el Bryant Park era porque dentro del mismo se encuentra la Biblioteca Pública de Nueva York, así que nada más salir de ella te encuentras con el parque.

Es un parque muy original porque está totalmente rodeado de rascacielos, y aunque no es muy grande, tiene un encanto especial. En él se reúnen muchos habitantes de la ciudad para descansar del ajetreo de la multitud que hay siempre por Nueva York.

Lo primero que te encuentras al entrar es la famosa fuente del parque, que tiene un nombre larguísimo pero realmente se conoce simplemente como la "fuente de Bryant Park". Además, en todo el parque hay un montón de sillas y mesas en las que te puedes sentar a comer algo que hayas comprado en los múltiples puestos que las rodean.

Sin embargo, además de puestos de comida también hay puestecitos en los que venden joyitas, ropa… Una gran variedad de cosas que hace que el paseo por el parque sea bastante entretenido. Y además, si realmente quieres pasar un buen rato en el parque, te puedes quedar jugando a algunos juegos como el ping-pong o el ajedrez, ya que algo que me sorprendió mucho es que en una de las esquinas del parque hay mesas para jugar a ambos deportes.

Como nosotras hemos ido en invierno, el parque estaba un poco seco, como todos los que hemos visto. Sin embargo, me pareció bastante bonito y lo bueno de haber ido en este período del año es que había un árbol de Navidad gigante… Aquí os dejo una foto:

Además, os dejo por aquí otra foto de una de las casetas del Bryant Park que me pareció muy chula:

5) Times Square

Después del parque nos dirigimos a una parada que tenía muchísimas ganas de ver: Times Square. Aunque es cierto que fuimos en Nochevieja, tal y como os conté en el post que le dediqué a dicha experiencia, tenía ganas de ir otro día para verlo sin tantísima gente y sobre todo para verlo sin lluvia.

Times Square es alucinante, o al menos a mí me lo pareció. Es una intersección de calles del distrito de Manhattan y como curiosidad, hace unos años se llamaba Plaza Longacre (seguro que esto no lo sabíais…).

Esta plaza es un icono de la ciudad de Nueva York y es mundialmente conocida, por lo que cualquier persona que venga a visitar la ciudad tiene que hacer una parada en ella sí o sí.

En ella se encuentran básicamente un montón de letreros anunciando los distintos teatros de Broadway y muchísima publicidad, por lo que la mezcla de colores de todas las pantallas le da un aspecto súper chulo. 

En primer lugar os dejo por aquí esta foto que me parece muy chula, en la que se ve la plaza a lo lejos:

Además, por el camino hacia Times Square vas pasando por calles bastante chulas, y en una de ellas hice esta foto que me apetece dejar por aquí:

En cuanto a la plaza en sí lo más característico son los paneles de colores  llamativos anunciando todo tipo de cosas que ya os he comentado previamente. Además, en esta plaza hay un montón de edificios famosos como los estudios del canal ABC o el edificio NASDAQ.

Por aquí os dejo un par de fotillos:

Algo a destacar es que en Times Square puedes encontrar la cabina de descuentos llamada TKTS, que ofrece tickets para ver espectáculos y musicales de Broadway mucho más baratos. Yo soy muy fan de los musicales y la verdad es que me encantaría ir a ver alguno aquí en Nueva York, así que tal vez el último día me acerque aquí a ver lo que tienen… Lo que encontré esta vez que fui es que es posible conseguir entradas por cincuenta dólares, algo que está muy bien teniendo en cuenta lo que suelen costar las entradas normales… Obviamente no eran tickets para las obras más famosas, pero algo es algo, y seguro que todos los espectáculos que tienen lugar en Nueva York están bien.

Pues bien, además de quedarnos hipnotizadas con la plaza, mis amigas y yo estuvimos haciendo fotos un buen rato, intentando sacar la menos gente posible ya que, como podréis imaginar, estaba llenísima (aunque obviamente no tanto como en Nochevieja). Algunas de estas fotos os las dejo por aquí:

6) Saint Patrick’s Cathedral

Cambiamos totalmente de estilo para dirigirnos a nuestra sexta parada, la Saint Patrick’s Cathedral. Esta catedral es católica y de estilo neogótico, algo que contrasta con los edifcios que la rodean que son la mayoría rascacielos y de un estilo mucho más moderno.

Es una iglesia súper grande y es importante destacar que en ella pueden entrar más de tres mil personas. A mi me pareció preciosa por fuera, ya que está completamente construida en mármol blanco y por aquí os dejo una foto:

Por dentro tampoco se queda corta, y es que la entrada a la catedral es gratis y aprovechamos para entrar y verla. En mi opinión merece la pena entrar, ya que el interior es aún más alucinante que el exterior. Por aquí os dejo una foto de la misma:

Después de la visita a la catedral fuimos a comer al famoso Five Guys. Yo lo había probado en España pero aún no había tenido la oportunidad de ir aquí en Estados Unidos. Es una hamburguesería muy famosa y alguien me contó una vez que la razón por la que es tan famosa es porque es el restaurante de comida rápida favorito del expresidente Barack Obama. No sé si será verdad, pero desde luego que las hamburguesas de este sitio están para chuparse los dedos. Sin embargo, lo mejor son las patatas fritas, que creo que de todas las que he probado en mi vida son mis favoritas. Además, para que lo sepáis, he de deciros que si vais aprovechéis para coger unos cacahuetes, porque están deliciosos y son gratis.

7) Radio City Hall

Pues bien, después de comer nos fuimos hacia el Radio City Hall, que es considerado el teatro más importante de Estados Unidos y por ello se le llama también Showplace of the Nation.

La verdad es que el edificio en sí no es un sitio que tenga mucho, pero como pilla por la zona merece la pena pararse un momento a verlo. Además hay que tener en cuenta que es un edificio súper importante para el país… Por aquí os dejo una foto de cómo se ve desde la calle:

La verdad es que nosotras mo entramos y no os puedo decir cómo era por dentro, pero sé que se puede entrar, ya sea comprando la entrada para algún evento que tenga lugar en el Radio City o contratando una visita guiada al teatro.

Ahora en Navidad es muy famoso ver en este teatro el llamado Radio City Christmas Spectacular, que es un espectáculo que al parecer merece la pena. Yo no he ido, pero aún estoy a tiempo ¿no?

Pues bien, el Radio City Hall se encuentra en el Rockefeller, y después de verlo por fuera nos dirigimos propiamente a la plaza del Rockefeller, que ahora en Navidad tiene una pista de hielo y un árbol enorme. Sin embargo, creo que es mejor que os cuente un poquito más sobre esto en otro post… Así que, ¡hasta la próxima!

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