Primeros días en Madrid:

Mi experiencia Erasmus: primera semana en Madrid.

Soy Laura, una estudiante de Mediación Lingüística en Milán, de Erasmus durante un año en Madrid.

No habiendo estado nunca antes en España, el 1 de septiembre, casi como los estudiantes de "Hogwarts", cogí un avión dirección Madrid, billete solo de ida.

Ya durante el vuelo las emociones eran muchas y muy fuertes: curiosidad, la justa dosis de ansiedad y muchas expectativas. Expectativas que fueron superadas, una vez llegué.

A pesar de las dificultades en la búsqueda de un apartamento, lo cual condicionó mi primera semana en la capital española, Madrid fue capaz de sorprenderme y de cautivar mi corazón a primera vista.

Los colores, la arquitectura, las calles iluminadas por el sol durante el día y por las luces durante la noche, el olor a tapas y tinto de verano, la vitalidad y sociabilidad de los españoles y el increíble carácter internacional de la ciudad.

Desde el primer vistazo a los edificios rojos de la Plaza Mayor, al primer atardecer que pasas en el Templo de Debod, Madrid te hace comprender desde el principio todo su potencial.

Entiendes enseguida que nunca tendrás tiempo de aburrirte en esta ciudad, llena de lugares para visitar y cosas que hacer, eventos, viajes.

Mi consejo para el que va a llegar a Madrid próximamente es hacer lo que experimenté en mis primeros días: encaminarse hacia la Puerta del Sol (centro de la ciudad) y simplemente caminar, dejarse guiar por la intuición en las calles, llegando a la Plaza Mayor, Gran Vía, Plaza de España. Sin mapas, dejándose sorprender por la preciosa arquitectura madrileña y por sus vivos colores. Y para los más golosos, no perdáis la ocasión de probar los churros con chocolate.