Explicación

Hola a todos,

Bueno, voy a escribir un blog, más para ganar un premio que para compartir mi experiencia siendo sinceros, pero igual empieza a gustarme esto de escribir, ya se verá... En primer lugar me presentaré, soy francés, tengo papeles que lo comprueban y a mis padres, una madre normanda y un padre alsaciano, muy muy alsaciano. Son las únicas cosas que he escuchado de ellos de su vida anterior, su vida francesa, de hecho, no conozco a sus familias. Creo que irme de Francia, y por lo tanto de Europa, era más huir que otra cosa...

Bueno y yo soy Duncan, un salvaje, quiero dejarlo claro de primeras. He vivido 18 años en Madagascar, en Tamatave, la ciudad más bonita del mundo, no es perfecta, pero aún así, ¡forma parte de mí! Digo esto porque tengo la malaria en mi sangre, no se puede tener todo sin sacrificios y, sobre todo, no te puedes atiborrar a cloroquina, ni huir de los mosquitos durante 18 años en un país del hemisferio sur, iba a poner "País africano", pero a decir verdad, Madagascar no es África, está al lado, así que parad de confundirnos con los africanos.

Vengo de la ciudad de Tamatave, está es la costa este, con sus kilométricas playas de arena blanca, ese sol que broncea la piel, esa humanidad tan refrescante, ¡un verdadero placer! ¡El centro de la ciudad me parecía tan grande antes, con su bazar Be y bazar Kely! Y, por supuesto, ¡Mahavelona! Con sus bombones de coco, gambas e incluso lemúridos (sobre esto no se va a hablar tanto).

Y, por lo tanto, en cuanto a mí, hice mi curso escolar desde la guardería hasta el colegio en la escuela de mi madre, La Petite Bulle. Fueron años increíbles gracias a mi madre, una fuerza de la naturaleza que me inspira cada día. Aprendí a leer, escribir y a que me gustara aprender gracias a ella. Es mi madre, ha sido mi directora, mi profesora de natación, de español, de latín, de historia, de arte y de tantas otras cosas. Después fui al Liceo Francés de Tamatave, no fueron mis mejores años, por el reencuentro con el sistema educativo francés en el que no se aprende por placer, sino para contestar a unas preguntas. Fue el primer lugar en el que me reencontré con otros franceses y, sobre todo, con otras personas blancas, fue muy extraño al principio. De hecho, todavía no me acostumbro, tengo la impresión de que no pertenezco a esa "comunidad". Pero, tengo una teoría sobre esto y voy a decirla porque me parece muy importante. Los únicos blancos que he visto durante mi infancia, solo los vi, con una madre que hacía de barrera, como un muro de protección. Además, la mayoría de los que van a Madagascar son pedófilos, hablando claro, no voy a mentir. Por lo que es una mala imagen, especialmente porque la mayoría son franceses. Es más, solo he empezado a tener amigos blancos recientemente y tampoco muchos, mis amigos son de orígenes indios, asiáticos y del mundo. No sé si eso quiere decir que soy algo racista, en cualquier caso, para sentirme mejor me digo a mí mismo que por lo menos no pienso como en Estados Unidos, hablar de razas es serio, solo existe la raza humana, lo demás son características físicas. Después, el hecho de que no tenga amigos blancos es porque la probabilidad de encontrar uno blanco es mínima: lección de historia, ¡vete fuera de Europa y de América del norte! ¡Hay otro mundo esperándote! Bueno, no vamos a entrar en un debate.

Por lo tanto, en Madagascar no todos son africanos, hay grandes comunidades indias y chinas. El hecho de vivir esto me ha dado otra visión del mundo, siempre lleno de esperanza, a pesar de algunos aspectos feos de este mundo y, sobre todo, ese sentimiento de presente, presente como "un presente", porque viviendo con estabilidad y viendo a gente pobre siempre con una sonrisa, me siento muy agradecido de la vida que tengo, ser yo, tener la fuerza de ser quien soy y querer ver siempre el mundo de una manera positiva. Todo esto se lo debo a mi isla.

Bueno, termino con esta parte sentimental, así que voy a retomar el tema del que hablaba. Después de obtener el bachillerato ES (Económico y Social), me fui a estudiar a Reunión, en la IUT de Saint-Pierre, un poco desastroso, ya que me inscribí una semana antes de que empezara el curso, que quieres la APB no es lo mío. En Reunión, pude integrarme mejor en "Francia", siguiendo en mi océano. Y aquí es donde empieza mi aventura en el continente europeo...

Este es mi primer artículo, no habla muchos sobre el tema Erasmus, compartiendo, blablabla, pero era para presentarme, lo haré mejor la próxima vez.

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