Un finde en Londres: parte II

¡Hola de nuevo a todos, viajeros! En esta entrada voy a continuar hablando de las principales atracciones turísticas. En el post anterior os he enumerado los monumentos más importantes de la zona del centro de Londres. A continuación voy a hablaros de otros sitios imprescindibles de la ciudad que no os podéis ir sin ver. 

• Puente de la Torre

El puente de la Torre, más conocido por su nombre en inglés Tower Bridge, es sin duda el puente más conocido de toda la ciudad. Cruza el río Támesis a la altura de la Torre de Londres (de ahí que se le llame de esa manera), una fortaleza que puedes visitar y que es especialmente conocida porque en ella viven muchos cuervos. El puente de la Torre tienes que ir a verlo sin falta, porque es además uno de los símbolos más emblemáticos de Londres. Está un poco apartadita de los monumentos de los que os he hablado en la entrada anterior, pero aún así no tardarás nada en llegar porque el transporte público en la ciudad es muy bueno. Si vas en metro, bájate en la parada de Tower Hill. La entrada a la exposición es de aproximadamente 7 libras para estudiantes, pero tampoco es nada del otro mundo así que yo casi diría que con verlo por fuera tendrás más que suficiente. 

• Camdem Town

Camdem Town es una de las zonas más conocidas de Londres, y desde luego mi favorita, por el ambiente tan bohemio y animado que la caracteriza. Es especialmente famosa por los mercados que tienen lugar en este área, ya que suelen ser de productos artesanales y vintage. Aquí puedes encontrar absolutamente de todo, y esta es una de las cosas por las que tanto me enamoró Camdem Market. Desde pósteres, vinilos, camisetas de tus grupos de música favoritos, hasta jabones hechos a manos y muebles del siglo pasado. Lo que busques, lo puedes enontrar aquí, y lo cierto es que no es excesivamente caro. Te recomiendo que vayas con tiempo suficiente para poder perderte por entre las calles de Camdem Town, y sobre todo por entre los puestecitos y comercios, porque te aseguro que no podrás levantar la vista de ellos. 

Cuando terminé de visitar Camdem Town la vez que la visité con mi madre, después fuimos a pasear a lo largo del Canal de Regent, y la verdad es que fue súper relajante porque además casi no había gente (y eso que nos hizo un día formidable). Si has comprado algo de comida para llevar en alguno de los puestos, este puede ser un buen sitio para disfrutar de ella tranquilamente. Si decides pasear por este canal, te recomiendo que pases a ver el centro de jardinería de Clifton Nurseries, que aunque se encuentra un poco escondida y tendrás que callejear para llegar hasta la calle de Clifton Villas. Tienen también una cafetería monísima donde puedes tomarte algo, y abren hasta las 6 de la tarde. 

• Buckingham Palace

Si pensábais que iba a terminar esta entrada sin mencionar el que probablemente se uno de los monumentos más espectaculares de Londres, ¡tranquilos! Estábais equivocados. Es prácticamente un delito irse de Londres sin pasarse a ver el Palacio de Buckingham, que es la residencia oficial de la monarquía inglesa. Este palacio, al contrario por ejemplo que el Palacio Real de Madrid, no puede visitarse enteramente, pero algunas de las habitaciones del Estado sí que se abren al público durante los meses de verano. Yo nunca lo he visitado por dentro, pero imagino que debe ser una experiencia genial. 

Cuando vayas a visitar el Palacio, aunque sea sólo a verlo desde fuera, asegúrate que vas sobre las 11 de la mañana, que es cuando se hace el cambio de guardia, y es un espectáculo digno de ver, muy auténtico de la cultura londinense. Dura unos 45 minutos, pero no tienes por qué verla entera... Aún así, es muy curiosa de ver así que te recomiendo que te quedes a verla. Siempre me ha fascinado la seriedad que son capaces de aguantar los guardias del palacio, la verdad... ¡yo sería incapaz!

Aparte, el Palacio de Buckingham está justo al lado del parque de Hyde Park, el espacio verde más grande de Londres, así que puedes aprovechar para pasear por sus caminos y entre sus árboles antes o después del cambio de guardia. 

Visitar Londres es algo completamente obligado, en especial si te gustan las ciudades dinámicas y con mucha actividad. De veras que en la capital inglesa es prácticamente imposible aburrirse, porque siempre hay algo que hacer, monumentos que visitar, calles en las que perderse, e incluso una infinidad de museos para volver a casa un poquito más cultos.