London Calling: mi experiencia Erasmus en Londres

El "London Calling" fue para mí la primera experiencia Erasmus después de Varsovia y Barcelona.

Yo era un estudiante que acababa de graduarse en la carrera de Economía Empresarial, y ya estaba pensando en mejorar mi currículum.

De ahí la idea de empezar a realizar unas prácticas en el proyecto Erasmus. ¿Y qué mejor destino podría elegir para mejorar mi CV que Londres?

Así fue que, mientras estaba escribiendo mi tesis y estudiando para los últimos exámenes, también tuve que esforzarme con la búsqueda de unas prácticas.

Una vez graduado no tuve ninguna dificultad en encontrar un trabajo e incluso tuve que rechazar algunas propuestas, encontrar unas prácticas recién graduado no fue algo fácil.

Hay que decir que esto se vio influenciado sobre todo por el hecho de que mi experiencia laboral en ese momento era sustancialmente nula, excepto por la colaboración mientras estudiaba.

Lo que me ayudó fue que tenía un buen nivel de inglés perfeccionado gracias a una colaboración estudiantil que me había visto participar en el programa USAC.

Esencialmente, mi tarea era llevar a los simpáticos estudiantes americanos a visitar la ciudad.

Bueno, de vez en cuando, ¡incluso ligaba con alguna estudiante americana, para ser honestos! Pero volvamos al tema en cuestión.

Para encontrar estas prácticas, finalmente recurrí a una agencia que colaboraba con mi universidad. Así que no tenía que pagarme los gastos de la comisión, ya que lo pagaba mi universidad.

Y así fue como conseguí mis prácticas de marketing en la escuela de inglés Edgware Academy.

Estas prácticas, sin saberlo, cambiaron mi vida.

Esto es porque antes de irme a Londres, mi intención era matricularme en la carrera de finanzas, pero el hecho de haber probado una experiencia de marketing fue lo que me llevó a cambiar la dirección de mis estudios.

Así que una vez que me gradué, me fui a Londres a hacer mis prácticas, pero sin haber encontrado un apartamento todavía. Mi idea era buscarlo durante los primeros días.

¡Salida para Londres!

Cuando llegué a Londres me sentí perdido, o más bien como ¡un pez fuera del agua! Estaba inmerso en una multitud de gente que caminaba frenéticamente en todas direcciones. Esto es una de las características de Londres que siempre recordaré: ¡la locura de la gente!

Luego, en cuanto llegué al hostal, donde pasé los primeros días de aventuras, salí a investigar. Sin Internet y un mapa, fue fácil perderse. Pero igual de rápido volví a encontrar el camino correcto y empecé a orientarme.

Después de haber tomado un refresco, intenté averiguar dónde estaba la escuela donde iba a trabajar. Después de unos minutos andando, descubrí con gran sorpresa que trabajaría en una de las zonas más céntricas y hermosas de Londres: ¡Covent Garden!

Pero todavía quedaban unos días antes del comienzo de las prácticas, así que era el momento de ponerme a buscar una casa.

Después de buscar en algunas páginas de anuncios y organizar un par de citas y acabar en varias zonas de Londres, encontré por fin mi apartamento Erasmus en el sur de Londres.

Una habitación no muy barata porque eran casi 600 libras al mes... Pero por otro lado los precios en Londres son así.

El día siguiente fue un día precioso para empezar mi primera experiencia de trabajo.

A las 9 de la mañana me presento en la escuela y me siento en la sala de espera.

Luego, después de haber tenido una charla con el Operations Manager, un turco gordo y casi calvo llamado Baris, estaba listo para empezar.

Poco después conocí a otro chico italiano, Emanuele, que había estado trabajando en la escuela durante un par de meses y que comenzó a explicarme un poco cómo funcionaban las cosas.

En realidad, para ser unas prácticas el ambiente de trabajo era bastante agobiante. De hecho, los jefes eran bastante estrictos tanto para el trabajo como para los horarios y había veces que tenía que quedarme más tiempo trabajando.

En cualquier caso, tengo que decir que durante esos cuatro meses crecí mucho tanto personal como profesionalmente.

Al principio no tenía muchos amigos, así que hubo momentos en los que tuve que salir o hacer turismo yo solo. Esto no es agradable para una persona sociable como yo que ama estar en compañía, pero aun así supe valorarlo todo.

De hecho, tuve la oportunidad de disfrutar de la compañía de mí mismo y apreciar más la compañía de otras personas cuando más tarde comencé a ampliar el círculo de amistades.

De hecho, no tardé mucho, como trabajaba en una escuela de inglés, había muchas oportunidades para conocer a chicos de mi edad que habían venido a Londres en busca de aventuras y que estaban ansiosos por mejorar su inglés.

Fue así que, gracias a mi trabajo, me facilitaron conocer a nuevos amigos de todo el mundo: venían de España, Francia, Colombia y por supuesto también muchos italianos.

Así que las dos primeras semanas en Londres no fueron realmente las mejores y muchas veces pensaba en la idea de volverme a Italia, pero los cuatro meses restantes pasaron rápidamente, porque estaba pasando buenos momentos.

Por otra parte, vivir en Londres, excepto por el tiempo que a veces es un poco feo y los precios realmente altos en cualquier tienda o restaurante, que no fueran H&M y Mc Donald' s, no estuvo nada mal.

Caminar por las calles de la ciudad entre Leicester Square, Big Ben y los numerosos parques de la ciudad fue un verdadero placer.

La ciudad estaba muy limpia y la gente, para mi gran sorpresa, era muy amable, amistosa y siempre dispuesta a ayudar.

De hecho, recuerdo los primeros días que pasé sin Internet y cuando me perdía siempre preguntaba a alguien y las personas que me atendían fueron muy amables al ayudarme e incluso me enseñan en Google Maps la dirección que estaba buscando.

Esto de alguna manera disipó la creencia de que los ingleses eran unos antipáticos con los extranjeros y descubrir que esto no era cierto fue una agradable sorpresa. Además, otra grata y agradable sorpresa fue que a menudo paseando por las calles de Londres me confundían con Fábregas, el futbolista del Chelsea.

El hecho es que en ese momento en el metro de Londres había un montón de carteles con fotos del futbolista y en realidad si que se parecía un poco a mí como se puede ver en la foto y probablemente confundió a mucha gente.

Volviendo a mi trabajo, como ya he dicho, fue bastante duro. Sobre todo porque los jefes eran bastante pretenciosos y querían que las cosas se hicieran bien, además me prohibían meterme en Facebook.

De todos modos, solo tenía que acostumbrarme y pronto pude adaptarme bien al trabajo e incluso hacerme querer y apreciar tanto que al final de mis prácticas también recibí regalos de la escuela y el Operation Manager me confesó que yo había sido el mejor alumno en prácticas que había tenido. Diría que como experiencia laboral no me había equivocado.

Después de haber trabajado un poco en el campo del marketing, marketing digital y servicio al cliente, me hizo ver que eso era en realidad lo que me gustaba y a lo que me quería dedicar.

El objetivo en ese momento era volver a Londres después de graduarme. En Londres, paseando por las calles, no solo te encantará la belleza de la ciudad, sino que también podrás respirar el aroma de las oportunidades.

Oportunidades, que tal vez estén a la vuelta de la esquina y esperándote. Ahora mis planes han cambiado un poco desde que me mudé a Varsovia después de graduarme, pero Londres sigue estando en mi lista de deseos junto con Barcelona y a menudo busco ofertas de trabajo.

En cuanto a la gastronomía, tengo que decir que aquí hay buenos restaurantes, pero son muy caros. De hecho, el nivel de vida es muy alto y por lo tanto, los precios de la buena comida también lo son.

Probablemente también hay algunos restaurantes más baratos, pero en mis cuatro meses en Londres no pude encontrar muchos, excepto una pizzería pequeña cerca de Covent Garden, La pizzera, por un mexicano y allí conocí a un chico italiano de mi zona. Digamos que esta pizzería fue mi salvación e incluso así durante los cuatro meses que viví en Londres no comí una pizza decente.

Para mi sorpresa, la pizza era buena, barata y estaba cerca de mi trabajo y la pizza acabó siendo una de mis principales comidas. Hubo semanas en las que fui hasta tres o cuatro veces. Después de todo soy italiano, que vamos a hacer...

Cosas que ver en Londres

Un viaje a la capital de Inglaterra no estaría completo sin ver sus principales atracciones turísticas.

Desde el moderno Coca-Cola London Eye hasta la histórica Torre de Londres, hay atracciones turísticas que son imprescindibles en cualquier viaje organizado en esta bella y controvertida ciudad.

Aún mejor, muchos de los monumentos de Londres son gratuitos, mientras que otros están disponibles con descuentos o con ofertas especiales, gracias a iniciativas como el London Pass. Además, también hay muchos lugares para que los niños visiten en Londres.

Primero está el acuario de Londres o el "Science Museum", el centro interactivo de ciencia y tecnología de Londres. Ambos lugares son perfectos para la diversión familiar.

También se puede disfrutar de la cultura de sus museos, visitar a la reina en el Buckingham Palace o hacerse una bonita foto en el Big Ben y en el Parlamento, pero estos son solo algunos de los lugares icónicos para visitar en Londres.

1. Warner Bross. Studio Tour Londres, sobre todo la famosa saga de Harry Potter

En este lugar se puede pasar un día mágico con un recorrido perfecto por las películas de Harry Potter en la Warner Bros Studio Tour de Londres. Puedes ver con tus propios ojos los disfraces y escenas utilizados en todas las películas de Harry Potter y entrar en algunas de las escenas de la película, incluyendo el Gran Salón, la Oficina de Silent's y la cabaña de Hagrid (Hagrid Hut).

2. Coca-Cola London Eye

La mágica noria de Coca-Cola, conocida como "London Eye", es una de las principales características de Londres.

Cuenta con algunas de las mejores vistas de Londres desde sus 32 cápsulas, cada una con un peso de 10 toneladas y capacidad para 25 personas. Sube para disfrutar de una experiencia impresionante, ¡con una vista inolvidable de más de 55 de los lugares más famosos de Londres en solo 30 minutos!

3. Buckingham Palace

La residencia oficial de la Reina de Londres tiene casi 800 habitaciones. Es uno de los pocos palacios reales que todavía existen en el mundo actual.

Las habitaciones del Palacio de Buckingham están muy decoradas y están abiertas a los visitantes durante los meses de verano, cuando la Reina está "de vacaciones".

Aunque se puede visitar durante todo el año para ver el famoso "Cambio de Guardia", una famosa atracción conocida en todo el mundo, que tiene lugar cada hora. Por la mañana se puede ver en su versión más larga.

4. Bus Tour

Es posible visitar la ciudad en uno de los autobuses típicos de dos pisos de Londres: se puede comprar un billete de 24 horas y disfrutar de la libertad de subir y bajar de los autobuses turísticos y visitar algunos de los lugares más famosos de Londres, como la Torre de Londres, el palacio de Buckingham, la abadía de Westminster, la catedral de St Paul y Trafalgar Square, de una forma fácil y como unos verdaderos ingleses.

5. Madame Tussauds Londres

En Madame Tussauds, se pueden ver algunas de las caras más famosas del mundo. Desde Shakespeare hasta Lady Gaga. Conocerás a personalidades famosas del espectáculo, del deporte, de la política e incluso de la realeza.

Posar con Usain Bolt, acercarse a los One Direction o recibir en público a Su Majestad la Reina: el museo de cera será una experiencia inolvidable.

6. Torre de Londres

Una excursión con uno de los Guardianes Yeoman alrededor de la Torre de Londres, uno de los edificios más famosos del mundo. Descubre su historia: ¡lleva 900 años como palacio real, fue una prisión y un lugar de ejecución, un arsenal, hogar de las mejores piezas de joyería y un zoológico!

Visita la Torre Blanca, paseando por el dormitorio del rey medieval y observando las maravillas de las Joyas de la Corona.

7. Abadía de Westminster

Es patrimonio mundial, cuenta con más de un millón de visitantes al año. Descubrirás un sitio lleno de la historia de los reyes y reinas británicos. La abadía es el símbolo de la revolución y de la historia religiosa inglesa.

8. Palacio de Kensington

El Palacio de Kensington es uno de los palacios reales históricos más intrigantes.

Descubre las historias de la vida de la Reina Victoria en la exposición Victoria Revealed, o visita los apartamentos del Rey: también puedes ver la exposición de ropa de Diana y descubrir los secretos de una frágil dinastía en los apartamentos del estado de la Reina.

9. La vista al “The shard”

Este rascacielos se eleva por encima de Londres y se puede admirar el famoso horizonte de la ciudad desde una perspectiva única, con vistas que se extienden hasta 64 km.

Es posible ver todos los puntos de Londres, superando a las cápsulas de Coca-Cola London Eye, St. Paul's Cathedral y Wembley Stadium desde "The Shard", que tiene 244 metros de altura. Una sensación impresionante.

10. Los museos de Londres

Hay muchos museos en Londres, pero los más importantes son el Museo Británico, los Museos de Arte, los Museos de Historia, la National Gallery, el Museo de Londres, V&A - Victoria and Albert Museum, Churchill War Rooms, Natural History Museum y también la Wallace Collection.

11. El Big Ben

Lo cito ahora porque antes me olvidó.

Puede parecer una cosa obvia y tal vez por eso se me ha olvidado. Tengo que decir que pasear por esta zona es un placer. Además te podrás sacar la típica foto en las cabinas, y esto no se puede hacer sin el Big Ben detrás.

Si quieres un consejo sobre una zona para hacerte una foto en una cabina con el Big Ben, puedes copiarte de mí:

12. Trafalgar Square

Otra zona obvia es la famosa y bonita plaza de Trafalgar Square, en el corazón de la ciudad. Una zona donde relajarse gracias al precioso paisaje arquitectónico y donde se encuentra uno de los museos más famosos de la ciudad. Entrada gratuita.

13. Los numerosos parques

Londres está lleno de parques preciosos e inmensos. Son lugares hermosos para visitar dando un paseo, tanto en días soleados como no soleados.

Es verdad que se disfruta más cuando el sol está fuera. Es posible que se te acerque alguna ardilla y en este caso podrás hacerte una preciosa foto.

Conclusiones

Seguramente Londres es la ciudad perfecta si buscas una experiencia profesional para mejorar tu currículum.

Sin embargo, si eres estudiante, significa que probablemente no te pagarán y que como mucho recibirás una ayuda para los gastos. Esto significa que tendrás que pagar muchos gastos por tu cuenta, como por ejemplo, los gastos de comidas y alojamiento que, como hemos visto en mi artículo, son muy caros.

Por supuesto, si cuentas con una beca Erasmus esto podría ayudarte, pero como experiencia personal esta beca no será suficiente como para cubrir los gastos de alojamiento. Por supuesto también depende de la calidad de la habitación que busques y en qué zona.

Si estás dispuesto a viajar más de cuarenta minutos al día, entonces tal vez encuentres algo más asequible. De esta manera, corres el riesgo de vivir lejos de Londres, es decir, en la periferia.

Tengo que decir que mi experiencia en Londres, aunque es un poco cara, valió la pena. No solo porque tuve la oportunidad de tener una experiencia profesional y de mejorar mi inglés en el trabajo, sino por la forma en que estos meses me han ayudado y fortalecido como persona.

Los primeros días serán difíciles, pero acabarás enamorándote de Londres.

Por otro lado, como dice Samuel Johnson: "Cuando un hombre está cansado de Londres, está cansado de la vida, porque en Londres hay todo lo que la vida puede ofrecer". No sé si habré conseguido transmitiros mis sensaciones con mi palabras, pero en cierto modo esto era lo que quería trasmitiros realmente.