Aeropuerto de Londres
Buenas de nuevo! En definitiva el trayecto desde Madrid hasta Londres fue bastante ameno y correcto en todos los sentidos, a penas tuvimos turbulencias y se mantuvo la paz y la tranquilidad. Siempre ves a alguna persona que no para de moverse de un sitio a otra, pero es que esto tiene que estar en todos los vuelos, porque sino no sería un vuelo normal, sino anormal. Una vez que llegamos, cogí mi maleta y espere a tener la oportunidad para meterme en la cola para salir del avión y despedirme del agradable equipo de azafatos. Ahora si que toca subir la rampa de la que antes hablábamos. Me dispongo a subir la misma y me fallaban las piernas, no me levante ni una vez y claro, estar dos horas sentado en el asiento de un avión no es lo mismo que estar dos horas sentado en el sofá de tu casa. En este momento pensé, si estoy así por un viaje de dos horas, cuando llegue al aeropuerto JFK de Nueva York, como cojones me voy a levantar del asiento? SÍ SE PUEDE ASÍ QUE NO TEMÁIS!
Ya me encontraba en Londres, aún más lejos de Nueva York, pero bueno, supongo es el hacer escala muchas veces conlleva en que viajes a un sitio que te esta alejando de tu destino final. Cuando llegué a Londres, lo primero que hice fue ir al servicio, llevaba meándome desde que salimos, pero no me gusta nada los baños de los aviones, son super estrechos y me agobian...la verdad. Pero bueno, si te da un apretón, que no es mi caso, lo haces donde sea, por lo menos es lo que dicen los expertos en idas de vareta.
Yo llegué ya cansado, y ahora me quedaba lo más duro. Salimos del avión y nos dirigimos a buscar nuestra terminal para embarcar en nuestro avión que nos iba a hacer cruzar el charco. Mi impresión fue que este aeropuerto era bastante más grande que el de Madrid, pero bueno, no puedo asegurarlo porque no me recorrí ni mucho menos por completo ninguno de ellos, son ambos extensos y eso si que os lo puedo confirmar, así que id siempre con tiempo suficiente porque puede ocurrir que vuestra puerta de embarque esté en la otra punta de donde estáis, que es lo que nos pasó a nosotros.
Cuando salimos del avión preguntamos donde estaba nuestra terminal, y nos decían todo recto, todo recto, y claro, empezamos a caminar todo recto, pero cuando llevábamos 20 minutos caminado recto y más recto, pues se te pasa por la cabeza volver a preguntar donde está tu puerta de embarque ya que puede ser que no vayas en la dirección correcta. Volvimos a preguntar y otra vez, recto recto, indicando como si fuera hasta el final del más allá, y nosotros pues haciendo caso, seguíamos recto y más recto.
Por fin una señal, vimos el cartel que indicaba nuestra terminal y puerta de embarque y por fin nos relajamos, porque menos mal que íbamos con tiempo, porque sino o hubiéramos tenido que ir corriendo o hubiéramos perdido el avión y esto hubiera sido una verdadero trauma y más haciendo escala, sin contar con el dinero que se pierde en un vuelo tan caro. De todas formas, estos son suposiciones, porque nosotros íbamos tranquilos y en la dirección correcta.
Cuando llegamos allí, pues nos sentamos a descansar en lo típicos asientos de los aeropuertos de los que ya os he hablado en algún artículo anterior. Nos vino de escándalo el descanso, porque íbamos cansados y aún nos quedaba lo peor. Un vuelo de 8 horas, pero bueno, como os he dicho anteriormente, la ilusión lo puede todo, y en el momento de embarcar sabiendo que vas a Estado Unidos por primera vez y que encima no vas por trabajo sino para disfrutar del turismo, se te olvida todo tipo de cansancio que tu cuerpo pueda estar experimentando en ese momento.
Dni, nombre y apellidos que coincidan con tu tarjeta de embarque y para dentro! Os cuento el trayecto en el próximo artículo, que no tiene desperdicio, sólo digo que me harté de vino allí dentro, pero bueno, ya os lo explicaré con más detalle! Un saludo!
Os dejo una foto del avión que nos llevó a Nueva York!
Galería de fotos
¿Quieres tener tu propio blog Erasmus?
Si estás viviendo una experiencia en el extranjero, eres un viajero empedernido o quieres dar a conocer la ciudad donde vives... ¡crea tu propio blog y cuenta tus aventuras!
¡Quiero crear mi blog Erasmus! →
Comentarios (0 comentarios)