Un día en Múnich

Publicado por flag-es Claudia Costas — hace 5 años

Blog: Alemania.
Etiquetas: flag-de Blog Erasmus LMU, LMU, Alemania

Un día en Múnich

¡Hola, hola! Hoy es el turno de Alemania, concretamente la ciudad de Múnich. Visité esta de ciudad cuando volvía de Salzburgo. El aeropuerto de Salzburgo no es muy grande y por lo tanto, no tiene muchas conexiones así que volé dirección Múnich y allí cogí un tren de tres horas hasta Salzburgo. Para volver a España, tren desde Salzburgo hasta Múnich. Ya que el aeropuerto de Múnich quedaba muy cerca del centro de la ciudad, no podía dejar pasar la oportunidad de conocer una ciudad nueva. Además, no conozco mucho Alemania, solo he estado en Hamburgo y en Dresdren, así que una ciudad más para añadir a la lista.

Aunque solo pasé un día aquí, fue realmente la primera vez que visité una ciudad sola. Tiene sus ventajas y desventajas, pero creo que sí me gustaría hacer alguna vez un viaje largo yo sola. Obviamente, es mucho más fácil planificarse, tú decides tu propio ritmo, todo el tiempo del que dispones lo dedicas solamente a ti. Es diferente. Visitar una ciudad sola también tiene sus momentos agridulces. Nunca olvidaré cómo de extraño fue para mí almorzar en un restaurante al lado de la Marienplatz yo sola. En aquel momento mis pensamientos solo los podía compartir conmigo misma, que no significa que sea malo, pero sin duda fue extraño. Aun por encima, ese día tuve que dormir en el aeropuerto porque mi vuelo salía a las 6 de la mañana, si no recuerdo mal. Para dormir, me tumbé en uno de los sofás que había en una cafetería, cerrada a aquellas horas de la noche, y dormí mientras agarraba todas mis maletas, por si acaso. Dormí y a la vez no dormí, porque me despertaba a cada rato. En esos momentos de cansancio es cuando más necesitas un/a compañera/o de viaje.

un-dia-munich-9934d6a609dd5ae59c204eb445

Y por cierto, aprovecho para decir que el aeropuerto de Múnich fue considerado uno de los mejores aeropuertos del mundo, en el puesto número ocho. Lo cierto es que es bastante grande y tiene muchas instalaciones, cafeterías, restaurantes, tiendas. Las conexiones con los trenes también son muy buenas e incluso tiene servicio de duchas y zona para dormir. Son una especie de cabinas donde pagas un precio y tienes acceso a una cama. Están muy bien si quieres pasar la noche en el aeropuerto, la verdad. Es perfecto para ocasiones donde solo tienes que pasar unas seis horas y por lo tanto, no te compensa reservar una habitación de hotel ya que entre que vas al hotel, dejas tus cosas, te tomas tu tiempo para dormir, te despiertas, te preparas y vuelves al aeropuerto al final habrás dormido máximo tres horas y en términos económicos no compensa. En este caso estas cabinas para dormir son súper útiles. Yo no pude utilizarlas porque cuando llegué ya estaba todo completo así que tuve que dormir en un sofá que estaba debajo de la mesa del restaurante. Experiencias.

Y mi recomendación estrella de hoy, aplicable a viajes en general, es la página web Sleeping in Airports. Es muy útil. Yo siempre le echo un ojo antes de ir a un aeropuerto. Tiene información muy útil sobre cada uno de ellos. Organiza los aeropuertos por continentes y por orden alfabético y te cuenta todo lo que necesitas saber de cada uno de ellos: servicios del aeropuerto, si tiene wifi gratis o no, lugares para cargar el móvil, cajeros automáticos, hoteles del aeropuerto, si el aeropuerto tiene opción para dormir en él, expectativas, opiniones de otros viajeros y muchísima información sobre medios de transporte que conectan el aeropuerto con su ciudad. Es muy útil y me hubiese encantado descubrirla antes.

un-dia-munich-d14b4a30490ed2b6783f46c507

Entrando ya en materia, que me he enrollado como una persiana, Múnich es una ciudad no muy grande, yo tuve un día para verla y fue suficiente para ver todo lo principal. Obviamente no puedes llegar a sentirla, no sabes cómo es el día a día y captar la esencia es más difícil, pero oye, menos es nada. A continuación os cuento rápidamente todo lo que yo vi y que fue lo que más me gustó:

1. Marienplatz.

Lo mejor de Múnich es la Marienplatz, ya os lo digo ahora. Es la plaza más famosa de toda la ciudad. Está llena de gente, hay muchísimo ambiente y es preciosa. Lo que la hace tan característica es el ayuntamiento, que me recuerda inevitablemente al Rathaus de Viena o al de Bruselas, pues todos siguen una estructura similar y la ornamentación es muy parecida, de estilo gótico.

un-dia-munich-a8a67953bed951c7c541877bcb

2. Glockenspiel.

Justo aquí, es curioso ver el carillón del ayuntamiento, en alemán ‘glockenspiel’. Para mí es un pequeño teatro, como un guiñol, lleno de figuras que se mueven al ritmo de la música. Estas figuras tan graciosas representan una boda y también un baile que se celebró cuando la epidemia de la peste terminó. De hecho, la plaza donde está el carillón recibe el nombre de Marienplatz porque la virgen María, a quien había que agradecerle que la peste se había por fin acabado. De hecho, en medio de la plaza, enfrente del ayuntamiento, hay una estatua dorada que la representa.

3. Antiguo Ayuntamiento.

Cerca de allí se encuentra el Antiguo Ayuntamiento de Múnich. Un edificio muy diferente al Nuevo Ayuntamiento. Para mí tiene una forma original, de color blanco, que parece a simple vista una iglesia. Como os digo, su arquitectura y diseño destaca y contrasta con el resto de edificios que se encuentran en Marienplatz, y en parte es eso lo que hace esta plaza tan especial. Podríamos decir que este edificio tiene un pasado un poco oscuro y triste ya que fue justo aquí donde durante el nazismo, Hitler y Goebbels decidieron atacar a la población judía quemando todas sus propiedades, incluidas las sinagogas. Este ataque es conocido como la Noche de los Cristales Rotos, ya que todos los cristales de los escaparates de las tiendas quedaron completamente destruidos en el suelo. Como este, muchos edificios tienen un pasado oscuro en la ciudad de Múnich, como la plaza Odeonsplatz, donde todo el mundo debía hacer el saludo nazi al pasar por allí o también Karlstor, el “portal” que Hitler cruzó por primera vez cuando fue nombrado canciller de Alemania. Mi amiga austríaca me dijo que había tours donde te explicaban todas las huellas de la Alemania nazi en esta ciudad.

un-dia-munich-c480b44f29dd8e1bce21012bd6

4. Peterskirche.

La mejor vista al ayuntamiento la tendrás desde la Peterskirche, la Iglesia de San Pedro. Con mi tarjeta estudiante me costó muy poco entrar, solamente 1’50€, creo recordar. El recorrido hasta la más alta torre se hace bastante ameno a pesar de que son bastantes escaleras. Cuando llegas arriba del todo, puedes contemplar el alma de la ciudad de Múnich desde lo alto. Tienes el ayuntamiento enfrente de ti y desde ahí puedes sacar las mejores fotos. En definitiva, es lo más típico y representativo de Múnich así que creo que hay que subir sí o sí.

5. El jardín inglés.

El jardín inglés o Englischer Garten. Pues como su nombre indica, es un jardín, un parque con las características del estilo de jardinería inglés. No solo es un jardín para relajarte, tomar el sol, hacer un picnic, correr bajo la sombra de los árboles sino que para mí, fue la auténtica representación de muchos conceptos que había aprendido en la universidad sobre el jardín inglés. Cuando leí Los sufrimientos del joven Werther, de Goethe, los jardines que aparecían en los paisajes del libro eran de este estilo. Nada tenía que ver con el jardín francés, donde todo está bien podado y recortadito, los setos hacen formas geométricas, arabescos. Las avenidas del jardín francés son muy anchas, por donde puedan pasar las carrozas (véase Versalles por ejemplo). Hay naturaleza, pero la clave es que esta no te invada. De lo contrario, el jardín inglés a pesar de que sí está trabajado, por lo tanto, es artificial quiere provocar sentimientos en la persona que lo contempla. El jardín inglés debe hacerte sentir. Por lo tanto, este jardín en Múnich no sigue unas reglas ni los árboles tienen formas geométricas perfectas, es un estilo mucho más salvaje. Es un jardín con un terreno muy amplio que da sensación de amplitud y libertad. Paseando por aquí, dos edificios me llamaron la atención. El primero se trata de un templo griego que se encontraba en un punto más alto, como en una colina así que podía verse perfectamente. Y en segundo lugar, había una casa del té japonesa que llamaba mucho la atención.

6. Hacer surf.

Dentro del jardín inglés, podéis hacer surf. ¿Cómo? ¿Surf? Sí, exactamente eso. Por el jardín pasa el río Eisbach, cuya corriente es bastante fuerte y además de darte un chapuzón en las zonas más calmadas, existen dos puntos donde se generan olas bastante grandes. Es muy curioso verlo pues hay muchos surfistas vestidos con trajes de neopreno haciendo cola para lanzarse a las aguas del río y coger olas. No es muy ancho así que solo hay espacio para uno. La clave está en lanzarse y aguantar el máximo tiempo posible allí. Me quedé un buen rato viendo cómo lo hacían y la mayoría de las personas aguantaban unos cinco segundos encima de la tabla, después se caían. Es perfecto porque así no tienes que esperar demasiado. Cuando alguien aguantaba más de diez segundos en las olas, desplazándose de un lado a otro, todo el mundo aplaudía. Era un ambiente genial, juvenil y entraban ganas de coger una tabla e intentarlo tú también.

un-dia-munich-f980d6458aad6151be4560025d

un-dia-munich-6e6781d8a1338770c03b0fffff

7. Viktualienmarkt.

Pasear por el famoso Viktualienmarkt. Muy cerca de Marienplatz podrás pasear por este mercado que ofrece en su mayoría productos agrícolas. Todos los puestecitos están tapados con toldos a rayas, lo que le da una cierta uniformidad. Además de fruta, verdura, legumbres, carnes, champiñones, también puedes comprar ramos de flores, miel, aceitunas, comida ya preparada o algún bretzel, si se te antoja.

8. Callejear.

En definitiva, pasear por sus calles sin tener un rumbo fijo es una buena idea. Hay muchos edificios que a pesar de no ser emblemáticos, tienen su propio encanto.

un-dia-munich-c383553fb0411cc672b4d7e00f

¡Y hasta aquí el post de hoy! A modo de conclusión, Múnich es una ciudad tranquila donde poder pasar un día agradable. Espero que os hayan gustado mis recomendaciones y también las fotos, que fueron hechas con el móvil y desde aquí pido perdón por la calidad, pero era el material que tenía en ese momento. Finalmente, volví a la estación de tren de Múnich, cogí la maleta en la consigna y me dirigí al aeropuerto para coger mi vuelo de vuelta. Un día diferente antes de volver a casa. 


Galería de fotos



Contenido disponible en otros idiomas

Comentarios (2 comentarios)

  • flag- Maite Sanchez hace 5 años

    Munich, este año tuve la suerte de repetir la Oktoberfest. Precioso Munich y los Munikeses. Marienplatz y alrededores

  • flag- Aurora Cerviño Otero hace 5 años

    que bonitas las fotos, oh

¿Quieres tener tu propio blog Erasmus?

Si estás viviendo una experiencia en el extranjero, eres un viajero empedernido o quieres dar a conocer la ciudad donde vives... ¡crea tu propio blog y cuenta tus aventuras!

¡Quiero crear mi blog Erasmus! →

¿No tienes cuenta? Regístrate.

Espera un momento, por favor

¡Girando la manivela!