Un día de paseo en una playa de Livorno

¡Hola a todos! espero que cada uno de ustedes se encuentre muy bien, en está oportunidad quiero contarles de una de las experiencias más bellas que pude tener durante mi estadía en Firenze cuando en uno de los tantos días libres que tuve en el trabajo, mi jefe me llevó junto a un chico más del trabajo que estaba ya por regresar a su país a un lugar oculto por así decirlo que se llama Punta Pacchiano.

A lo largo de este post  vamos a poder ir leyendo juntos lo siguiente:

• Mi trayecto a Punta Pacchiano en Livorno
• La vista del lugar y la belleza de la playa
• Las actividades que pude hacer en la playa.
• Lo que pude comer después de ir a la playa.
• Las conclusiones de este viaje maravilloso al mar de la Toscana. 

Un día de paseo en una playa de Livorno

Hay muchas playas bellas en Italia, de eso no nos quepa la menor duda sin embargo que sucede cuando te enteras que hay una especie de playa escondida muy cerca del lugar donde vives y que puedes darte un salto para ir a conocerlo, y sobretodo cuando te llevan en auto gratis sin pagar un euro, pues bien esa es la experiencia que a mi me sucedio y fue por eso que sin pensarlo dos veces me animé a seguir esta aventura rumbo a una de las playas más espectaculares que pude conocer en Italia y tan cerca de Florencia. 

El comienzo de la salida 

Recuerdo que era un día martes ya que usualmente yo tenia libre esé día durante la semana, me encontraba en Esselunga uno de los tantos supermercados que se pueden encontrar en Firenze, estaba haciendo mis compras de la semana cuando recibí un whatssapp de una de mis compañeras de trabajo diciendome que mi jefe estaba planeando llevar a uno de mis compañeros al dia siguiente a la playa y si me quería unir para que también vaya, entonces sin dudarlo dos veces dije que sí, no sabía donde ni en que lugar quedaba ni mucho menos el nombre de la playa, solo sabía que era el mar.

Como sabrán yo ya he vivido casi dos años en Rímini una ciudad que es pequeña y se encuentra frente al mar, mar que durante la temporada de verano se llena de visitantes de todas partes de Italia y Europa basicamente Rusos y Alemanes, allí estudié mi maestría de turismo y conocí a gente maravillosa que me permitió estrechar lazos de amistad hasta ahora, lo que les quería contar es que el mar de Rímini en la parte Adriatica de Italia era a mi parecer bonita pero no tanto como otras zonas de Italia donde verdaderamente las playas si son un tesoro a la vista de cualquier amante de la vida marina, fue entonces que me fuí con mucha curiosidad ya que sabía que el lugar a donde iría de por sí sería mucho mejor que el mar que estaba acostumbrado a ver en Rímini.

Al día siguiente era ya el momento de poder irme aliste en una mochila mis cosas para empezar este recorrido rapido, recuerdo que en Firenze yo me transportaba con la bicicleta usando unas bicicletas que tienen como nombre Mobike, pagando unos 19 euros por tres meses podía transpotarme sin problemas sin tener que pensar que alguién pudiera robarme la bicicleta en la ciudad Toscana 

Habíamos quedado para encontrarnos cerca de lo que sería el hotel donde trabajaba, el cual esta al ladito del rio Arno, llegué afortunadamente puntual y mi jefe ya estaba allí a los minutos después llegó mi otro compañero que era de Portugal y entonces subimos al auto para poder empezar este recorrido hacia la playa.

Mientras estabamos en el carro, mi jefe nos comentó que él conoció esta playa de casualidad en uno de sus tantas salidas con sus amigos y que desde la primera vez que llego a visitarla se ha convertido en su playa favorita ya que digamos que de alguna manera se encuentra oculta, esta playa se llama Punta Pacchiano y se encuentro dentro de la zona que es conocida como Livorno. 

Aqui les comparto una de las vista del agua clara y cristalina que se puede encontrar en esta zona de Toscana en Punta Pacchiano, un lugar a donde les recomiendo enormente ir a conocer sobretodo para quienes les gusta lanzarse clavados y disfrutas de esa intensidad del mar :) : 

La Toscana es una región muy afortunada de Italia que tiene unos paisajes bellos que enamorar y calientan hasta los corazones más frios que se pueden imaginar, hay inclusive dentro de esta misma zona unas pequeñas islas que yo no tenñia ni idea de que existiera, esto lo descubrí hace poco cuando mi compañera de piso me presentó en la casa a una chica que venía de esa zona y me mostró las fotos de la isla que tiene un pueblo pequeño y donde la vida llega cada verano italiano, en verdad que Italia tiene un sin fin de  sorpresas es una país muy afortunado de contar con tantas cosas para recorrer y conocer.

Mientras estabamos en el auto, mi jefe nos dijo que antes teníamos que recojer en la casa de una sus amigas que estaría yendo al aeropuerto de Pisa para irse a España, la chica era una que vivia en Italia desde hace un par de años por lo que ya hablaba italiano además del inglés y era originaria de Estonia, fuimos entonces en el carro pasando por zonas a las cuales yo aún no conocia de Florencia, el recorrido era agradable , me sentía como si estuviera de vacaciones, como si me hubiera olvidado un momento que estaba en mi vida labora nuevamente y que más bien era cómo la vida que tuve antes cuando cogia mi mochila y me daba la locura de escaparme por diferentes partes de mi país en Perú como también en Sudamérica.

Mientras estaba en el auto conversaba con mi amigo de Portugal y me contaba de la labor que hacía en su país de ayudar con casas prefabicadas en su ciudad natal de Oporto, un lugar donde también existen zonas donde han gente con bajos recursos económicos y debido a ello hay asociaciones que ayudan a las familias a construir casas y buscan voluntarios, esta acción me pareció un hecho tan bello que se debería de seguir replicando en diversas partes del mundo, asñi creo que si cada uno de nosotros se diera la mano tendríamos un mundo más justo no?

Bueno no me explayo tanto en este caso y les cuento que luego de dejar a la chica en el aeropuerto de Pisa, mi jefe estuvo a punto de decirme para ir a conocer la torre de Pisa que se encuentra en la misma ciudad, sí, aquella torre inclinada, la cual me quedé con las ganas de poder conocer ya que al final por la falta de tiempo y para poder aprovechar mejor la mañana fue que nos fuímos directamente  a la zona de Livorno.

Tengo que contarles que esta era la primera vez que me estaba yendo fuera de Firenze, este hecho sucedió en el mes de Junio 2018 cuando recien estaba asomandose poco a poco la temporada de calorcito en Italia, pensaba en ese momento  en mi país y me ponía dar un balance de las cosas ya que en Perú en aquel momento era casi casi invierno, esto lo podía ver a través del facebook cuando miraba las fotos de mis amigos y familiares publicando fotos de sus días en Lima, una ciudad donde casi siempre 9 de los 12 meses del año permanece con un cielo gris.

Haciendo una pequeña parada 

Yo sé que hacer comparaciones entre las experiencias que uno va teniendo en la vida a veces puede resultar un poco incomodo, me puse en algún momento a comparar sobre mis jefes de Perú y mi   jefe de Florencia y me dije a mi mismo, no me imagino a mi jefe de Perú que me diga para ir a la playa en un día libre, la verdad que son dos realidades diferentes que no lo podría consevir en Perú y no digo queu no sea bueno y el otro sea malo, quizás tambien esto se deba  a las diferentes costumbres al modo de vida y a las responsabilidades de cada uno lleva cuando esta trabajando y teniendo a parte una vida familiar donde también debe de cumplir responsabilidades.

Sea como sea yo en verdad me sentia muy privilegiado de que mi jefe me haya puesta esta oportunidad para poder recorrer junto con él y mi amigo esta zona de la Toscana, y ahora que lo pienso con mayor detalle, pues me doy cuenta que aquella vez fue la primera vez que salía de Firenze para poder irme a conocer un lugar cerca de Firenze, y no era que no hay opciones, todo lo contrario, la verdad que Firenze es una ciudad que tiene tantas cosas que ofrecer dentro y fuera de ella en sus alrededores existen tantos lugares que yo los llamaría mágicos y mi experiencia en este lugar fue quizás también uno de ellos.

Ya mientras estabamos en el auto era ya tiempo de salir de el para entrar en un bar, esto también fue para mí algo quizas un poco gracioso cosas que en Perú no puedo encontrar que en la carretera puedas encontrar un Bar con toda la pulcritud y cosas que uno puede encontrar en cualquier otra ciudad, pues bien en medio del calorcito y del sol que ya se estaba asomando fue que entramos a un Bar para que tomemos cafe y agua pero aja! ya sé lo que me van a decir, estan en lo cierto, yo no tomo café asi que lo único que me tomé fue una botella de agua para seguir caminando despuñes ya que me di cuenta que el acceso para esta playa sin arena se encontraba en la parte baja y teníamos que ir a pie para hacer un descenso mientras dejamos el auto se quedaba estacionado en uno de esos lados del estacionamiento muy cerca del bar donde tomaron ellos cafe y yo solo mi botella de agua.

El momento de descender rumbo a Punta Pacchiano

Recuerdo que mientras bajabamos rumbo a la playa escondida, mi jefe me decía que no le diga a nadie que existía este lugar (si supiera que estoy escribiendo este post, me mataría) bueno no importa, tengo la necesidad de escribir sobre este lugar y mientras estaba almorzando en mi casa aqui en Lima, se me vino la idea de publicar este articulo contando mi experiencia :) 

El camino para descender era un poco complicado, no era del todo díficil pero si no facil por asi decirlo, así que quizás por ello es que también no llegaban muchas personas por aquí yo creo que de todas maneras para poder llegar aquí de todas maneras es necesario poder tener un auto para poder llegar sanos y salvos  a este destino. 

El sol quemaba poco a poco y con ello era necesario entonces poder usar unos lentes de sol para poder protegernos de los rayos solares, mientras bajamos más y más contemplaba la belleza del lugar, que me disculpe Rímini pero este lugar era mucho más bello de lo que mis ojos habian podido ver hasta el momento.

Hay en la parte superior en medio de la carretera donde esta este bar y el estacionamiento un letrero con el nombre de esta punta que es como una pequeña playa chiquita, así que aproveché en tomarle una foto para poder recordar el nombre y no se me olvidé después, todos los recuerdos están llegando ahora rápidamente a mi cabeza cuando veo la imagenes y empiezo a recordar las vivencias que tuve que pasar para bajar hasta donde estaba la playa.

Algo particular sobre todo si eres de Perú es que nuestras playas tienes mayoritariamente arena, esta de aquí era extraña ya que no tenia nada de arena sino que más bien eran rocas, era cómo un acantilado y esto era lo que le daba una belleza especial al lugar, en la siguiente imagen les quiero compartir una de las fotos que pude hacer donde se ven mi jefe y mi amigo Andrés que estan apunto  de hacer el descenso, eso si, no pude hacer fotos del descenso ya que era imposible por medidas de seguridad caminar, bajar e ir teniendo la cámara de fotos, dicho sea de paso estas fotos las tomé con una cámara sencilla que era una canon, cámara que ahora la tengo aquí en Perú y se las he dado a mis hermanos para que puedan tomar fotos y cultiven la pasión por la fotografía. Aqui les comparto una de las primeras fotos que pude tomar en esa salida: 

Era entonces momento de ir bajando cada vez más y más mientras frente a mí salía toda una belleza de mar, belleza que aún con solo cerrar mis ojos puedo sentir en mis ojos y en mi corazñon como una de las mejores y más bonitas experiencias que pude haber tenido en mi vida a Italia. Sin embargo había un pequeño problema que yo no me habñia dado cuenta que tenía ¡No sabia nadar! 

Un mar de más de siete metros de profundidad 

Es raro si lo sé, para una persona que vivió toda su vida en una ciudad que se encuentra frente al mar y que encima después se va a vivir en Italia por dos años en otra ciudad que también se encuentra frente al mar, quien me lo diría grave error mio que a pesar de las mies de oportunidades que haya podido tener en mi vida para poder aprender a nadar siempre me daba un paso al costado en ello,  ya que tenía tantas veces miedo de que algo malo me llegará a suceder desde niño, he visto al mar como un Dios como un ser imponente que esta frente a nosotros, si bien en Lima se practican deportes acuaticos como el surf y tantos otros más, yo nunca aprendí a hacer nada, nada de nada.

Entonces, era momento de confesar esto a mi jefe cuando me dijo que nos teníamos que lanzar para poder entrar al agua m  ¿Cómo lo iba a poder hacer yo? no me atrevía así que le tuve que decir la verdad que no sabía nadar, a mi jefe se le salieron los ojos de la sorpresa cuando se entero, ni modo no podía dar una mala imagen así que tarde o temprano tendrñia que aprender a nadar y esa era la oportunidad para aprender a la fuerza a tirarme a un mar que tenia una profundidad de casi siete metros y cómo hariamos con una persona nerviosa cómo yo a  poder afrontar esta situación, fuerza y coraje era lo que me repetía entonces para poder tirarme al agua y empezar a mover las piernas y manos como si fuera algún signo de sobrevivencia de alguién que no quiere morir asi como asi. 

Sin embargo había algo que me daba calidez a este momento de nerviosismo y era ver el color clarito del mar, además de tener ese verde, en sus plantas con sus rocas, era un lugar que me enamoró facilmente , de pronto poco a poco empece a entrar en confianza con esta naturaleza y a no tenerle miedo, de paso que no solamente era tirarse sino que debíamos de saltar un par de metros antes de llegar a las aguas tibias de este mar italiano. 

Sentir la sensación de que las cosas sucedían por algom es algo que siempre me motiva a seguir adelante, sobretodo cuando te encuentras arriconado contra la pared con la única opción de poder der feliz y vivir tu vida como si fuera el último de todos, aquñi en la siguiente foto les quiero compartir la imagen que pude tener desde la parte alta antes de que empezaramos a bajar y llegar a las rocas apra disfrutar del mar:

Italia es ese pais que tiene todo, tiene un montón de maravillas para ofrecer al mundo y para hacer que las personas se enamoren de este lugar único en el mundo, será  por ello que quizas hoy lo consideré mi segunda casa,  recuerdo ahora que cuando llegamos había como una especie de cueva en donde pudimos colocar las cosas que eran basicamente solo nuestras mochilas, allí, tranquilo reía porque sabñia que dentro de unos instantes más me tenía que lanzar a esa playa, a ese mar.

Para mi sorpresa el lugar conocido como Punta Pacchiano era bastante pequeño pero era mágico, bellisímo, allí al costado habían dos chicos italianos que tomaban sol y estaban con un color de piel rostizados por el verano europeo y es que no he conocido a gente más obesionada con verde rojos cómo los italianos, la verdad es que si eres peruano o latina tendras ese colorcito bronceado que tenemos la mayoría de latinos y que a los italianos les fascina poder tener, sobre todo en la temporada de verano que es cuando más se preparan para tener los cuerpos tonificados y lanzarse al mar o sencillamente acostarse en el sol largas horas del día hasta tener el bronceado perfecto. 

Los primeros en tirarse en clavado fueron mi jefe y mi amigo, ya la verdad al inicio como toda persona que le tiene miedo al mar pero que vive enomorado de él me quedé  a un costado donde había como una pequeña piscinita llena de rocas donde te podías arrecostar antes de tirarte el clavado de tu vida asññi que antres que agarrar valentñia empezar a cargar mis energiías estando alli.

La belleza de este lugar ráidca en que se encuentra tan cerca de la ciudad y que al mismo tiempo era tan poca concurrida además de cosas particulares como el hecho que tenía que descender, saltar, brincar, volver a treparte para llegar aqui, y sobre todo la naturaleza, la madre naturaleza que tenía este regalo para cada uno de nosotros, otra de las cosas que me sorprendieron era que muchas de las rocas que se encontraban en ella tenian varios agujeritos como si la naturaleza lo hubiera hecho a proposito, era la verdad la primera vez que sentía esa sensación de tocar una roca con varios agujeritos, aunque de todas maneras tenias que estar atento o atenta ya que en algunas de sus rocas estas se encontraban un poco afiladas qu epodrñian cortarte el pie si no andabas con cuidado en sus senderos, tanto dentro del agua como alrededor de ella.

Aquí les quiero presentar una de las rocas que me pude encontrar como una pequeña piscinita que encontrñe al lado del abismo, esté lugar se convirtió en mi mejor amigo en este periodo de cargar mis energias para poder seguir con mi tero de lanzarme pronto al agua, mientras mi jefe y mi amigo me daban fuerzas para poder hacerlo 

El color de las aguas de este mar tenian una variación dependiendo de donde uno se encontraban habia colores azules intensos como también los de color celeste y los de color claro que se combinavan perfecto con el ambiente que lo rodeaba esto era una de las tantas cosas que me enamoró de este lugar, mientras esto pasaba las otras personas no perdían el tiempo y se lanzaban una y otra vez para poder disfrutar de las aguas de este maravilloso lugar, yo la verdad en ese momento lo que hacia era ver desde la parte del agua baja lo bien que lo estaban pasando los demas igual yo en mi tranquilidad de esta parte del agua me la estaba pasando muy bien, pero sobre todo feliz.

Aquí les quiero mostrar otra foto donde tambien se pueden dar cuenta de los colores del agua que llegan a ser claritos y diferentes que las anteriores la verdad que cada ambiente que uno lo era como si fuera un pequeño mundo por descubrir;

Momento de lanzarse al mar

Luego de casi una hora de haber estado en el mar en la parte baja, mi jefe me animó a lanzarme por primera vez mi clavado :) no lo había hecho antes así que para que eso sucediera tuve que llenarme de valor como también de ver al mar como un amigo que no me iba a ser daño, para mi buena suerte habia en el mar entre las rocas una especia de zoga donde las personas podían agarrar en caso de que necesitasen ayuda para poder mantenerse en el agua despues de haberse lanzado al mar y claro que yo iba  a ser uno de ellos de los que se iba a lanzar sobre el mar y después de ello buscando la pita para poder estar a salvo.

Mi jefe también hizo lo mismo para que se animará  mi otro amigo, quien sí sabía nadar pero que también tenía miedo como yo de poder tirarse la verdad después les contaré que la altura no era tan grande pero como todo novato el miedo de que te pueda suceder algo siempre esta presente asñi que yo no iba a ser la excepción a ello, el primero en lanzarse de los dos fue mi amigo, cuando se lanzo empezó a reirse como loco de que lo habia logrado, era como haber ganado un premio, mi jefe desde un extremo agarro mi camara de fotos y la puso en modo video para recordar este momento memorable :) 

Era entonces mi turno y yo con mi traje de baño tembleque me tenía que lanzar para experimentar esta sensación que hasta ahora recuerdo con cariño, la verdad no voy a exagerar diciendo como fueron las cosas pero hize un mal clavado jajaja si creo que en vez de lanzarme hice como un par de pisadas antes de llegar al agua y eso me dio un poquito de dolor en una de las piernas pero de todas maneras era sensación de libertad no me lo podía quitar badie, lo había hecho al fin, en sumergirme dentro del mar estar en contacto con el agua y poco a poco ir subiendo para contemplar la belleza y yo siendo parte de esta naturaleza.

Aquí les puedo compartir una de las fotos donde estoy después de haberme lanzado donde mi jefe me tomó la foto, no sé como pero me relaje me relaje y empece lentamente a poder mantener mi cuerpo en el mar, a que mis pies no tocaran ningun piso y me sintiera en libertad, pues entonces allñi estuve respirando tranquilo, me sentñi un ganador de haber logrado algo que no pensé que conseguirñia y lo logre lo logré y me siento feliz de haber acumulado esa experiencia 

El tiempo iba pasando y con ellos mi relajo al máximo, recuerdo que también llegaron en ese momento un chico con una chica y ya eramos entonces seis personas en este lugar, un lugar paradisiaco que conservo en mi memoría con mucho cariño, sin darme cuenta este era la primera vez que empezaba a nadar sin miedo, sin temor a que algo malo me sucediera era libre de poder nada, al fin pude aprender, quizas también por que las corritentes del mar me estaban ayudando a que esto sea as´o quizas tambien porque tenía a mi jefe como mentor que me ayudo que más que un jefe a partir de ese viaje lo empece a ver como un verdadero amigo y una persona en lo que podñia confiar.

Allí mientras estabamos los tres después de estar en el mar sentados entre las rocas pude descubrir más cosas de mi jefe como por ejemplo que en su juventud fue un viajero empedernido y que viajo por muchas partes del mundo, lugares a donde yo nunca hubiera imaginado llegar, siempre con la actitud mochilera que todo buen viajera coleccionista de verdaderas experiencias pueda tener, conocer a tu jefe fuera de los ambientes de trabajo creo que es una manera enriquecedora sobre todo cuando te agarra de sorpresa cuando la iniciativa es de él mismo sin que uno espere nada a cambio, esta sensacion de agradecimiento perdura hasta hoy en día.

Los consejos que nos daba mi jefe de viajar y de descubrir el mundo son cosas que no olvidaré, creo que de alguna manera esto lleno mi satisfacción de darme cuenta que estaba haciendo bien de haber tomado la decisión de salir mi querido Perú para vivir esta experiencia, para sentir vivencias que me marcaran como esta, y no digo que en Perú no tengamos estos lugares que también son maravillosos solo que son situaciones diferentes, no sé si me dejo entender :) espero que sí 

Momento de ir a comer 

Las horas de la mañana pasaron de una manera veloz y con ello entonces el momento de empezar a alistar nuestras cosas para irnos a comer,  nos quedamos entoncs un rato más en las rocas sentados para después poder irnos y empezar nuevamente esta vez el ascenso, que para mi amigo que no era tan delgado como yo fue un poco más difícil pero no imposible así que con todas estas fuerzas y con la energia positiva de poder haber vivido esta experiencia empezamos a subir y subir hasta llegar nuevamente al auto para entonces empezar nuestro rumbo frente a la zona industrial de Livorno, ibamos a ir a comer donde comen los lugareños de la zona, era un lugar que mi jefe había descubierto con sus amigos tiempo atras y ahora lo queria compartir con nosotros dos.

Voy a tener que ser sincero que en verdad no me acuerdo del nombre del lugar ni de como llegar allí, solo recuerdo que cuando llegamos allí había ya un monton de personas eran mesas largas donde las personas eran mayoritariamente como había dicho mi jefe italianos que trabajaban en esta zona del mar, por lo tanto lo que más se iba a encontrar por aqui iba a ser eso, platos hechos a base de comida marina, una verdadera deicia para mi amigo y para mí.

Como les habre comentado en anteriores oportunidades yo ya tengo como dos años sin tomar alcohol, sin embargo les debo de confesar que en aquella oportunidad hize una excepción a mi reglas y tomñe un poco de un vino blanco para acompañar la comida aunque tambien había agua así que eso me ayudo a que no me sintiera mal ni mucho menos me emborrachara un poquito de una copita fue suficiente entonces para tomar y de alguna manera agradecer a mi jefe por esta experiencia inigualable.

Mientras estabamos esperando la comida, recuerdo que conversavamos sobre el rol de  la hotelería en Florencia, sobre las oportunidades que se pueden encontrar y las vivencias que cada joven debe buscar sea aquí o en cualquier parte del mundo para disfrutar al máximo de las oportunidades que esta ofrece para vivir.

y es que en el mundo de la hotelería uno debe de tener un montón de carisma y sobretodo paciencia para poder tratar a gente de diferentres partes del mjndo que hace que esto sea una experiencia enriquecedora .

En la siguiente foto les quiero compartir uno de los platos que pude degustar en mi paso por este restaurante, que en verdad la atencion fue muy rapida y muy buena a pesar de haber tantas personas en ella, las meseras se las ingeniaban y hacian magia para poder atender a todos por igual y hacer que los platos llegasen ricos a la mesa, eso es lo que me gusta de Italia que aqui se come espectacular y riquisimo 

Después de probar la entrada vino el momento de probar el plato principal que cómo se pueden ya imaginar era un plata a base de ingredientes marinos como una especia de paella con un montón de cosas la verdad que cuando vi el plato me quedé sorprendido por el gran tamaño que tenia por un momento pensé que no llegaríamos a poder terminarlo pero al final lo pudimos hacer y con ello nos dimos un rico banquete, aquí les presento la foto del plataso que nos tuvimos que comer entre tres personas además de contar con un juguito en la parte baja para poder saborear intensamente cada uno de los ingredientes que se mezclaban en él, habíamos comida un montón y la verdad que al momento de pagar la cuenta grande fue mi sorpresa cuando mi jefe nos dijo que no ibamos a pagar nada nosotros que todo lo iba a pagar él ya que nos estaba invitando a los dos. 

En la siguiente imagen les presento la foto del plato para que se puedan dar cuenta de lo grande que era;

No hay duda de que esta tarde había sido una tarde espectacular llena de esperiencias maravillosas, mientras comiamos recuerdo que estuvimos hablando sobre las cosas que se tienen que hacer en el trabajo y también sobre las anecdotas de la vida de las diferencias que había entre Perú e Italia, dos paises que me han ofrecido tantas cosas y de las cuales me siento y me sentiré siempre enormemente agradecido por todas las oportunidades que he podido recibir.

Ya cuando ya nos encontrabamos a punto de terminar la comida, nos acercamos a la parte de la barra del local y mi jefe nos pidió un digestivo que era un licor tradicional de esta zona de Livorno, allí si yo dije que no ya que con el vino habia sido suficiente para mñi sin embargo para mi jefe no, asñi que tanto el como mi amigo lo probaron.

Mi jefe se tomó el digestivo cómo si nada, pero en el caso de mi amigo no fue así ya que sentía mucho dulce, asi que debido a ello me tuve que sacrificar y aproveche la situación para poder bever un poco de lo que había en ese licor, recuerdo que tenía un sabor como limonada con bastante azucar como si fuera una especia de cafe con todos esos sabores que eran los que más resaltaban además de ser bastante ardiente y caliente cuando pasaba por la garganta, fue entonces que se sentio como una exploción de sabores que tenñia este licor, era entonces ya el momento de partir rumbo a Florencia y con ello el relajo de haber tenido una tarde espectacular en la playa y de haber comido rico en este restaurante.

Mientras estabamos en el auto de mi jefe, estavamos conversando de tantas otras cosas más ese dia entonces llegamos cerca de las 16:00 horas a Firenze y teníamos más o menos unas dos horas para poder descansar ya que teníamos que ir a un restaurante en la tarde para hacerle la despedida a mi amigo de Portugal que ya se iba, esta era su última semana en Florencia luego de terminar sus practicas.

Y asi queridos amigos (as) terminó esta experiencia de aquella mañana y tarde donde pude disfrutar de una gran diversidad de sabores, donde conocí una playa espectacular y donde pude compartir momentos especiales con gente de mi trabajo.

No sé manejar carro asi que no les podría dar las indicaciones de cómo llegar a Punta Pacchiano pero les puedo decir que se encuentra dentro de Livorno, así que si pasan por Firenze durante la época de verano y quieren lanzarse al mar, a un mar limpio, bello, claro y emocionante, entonces no duden en darle la oportunidad a Punta Pacchiano de poder ser conocido para que se lleven una muy bonita experiencia como la que me pude llevar yo. 

Muchas gracias de corazón por haber leído este post y nos seguimos viendo en los demás articulos donde seguiré contando más de mis experiencias en Florencia y elos alrededores en esta ciudad que me acogio por muchos meses durante este 2018 que ya esta por terminar.

Les deseo un día maravilloso y sigan disfrutando de estas fechas de año nuevo que ya estan por llegar en un par de días ¡hasta la siguiente publicación! 

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