Cocos al estilo de Kuala Lumpur

Vale, está vez va a ser una entrada cortita y rápida porque todavía sigo fuera de casa; la cosa es que he visto este pequeño puesto tan lindo y no he podido resistirme a pararme a comprar algo y, lo más importante, sacar unas fotos para hablaros de él. Los puestos de comida como este me encantan, son tan auténticos y adorables y además venden buena comida fresca. Nada más ver los cocos, me he puesto en modo "I'm in love with the coco" y no he podido resistirme... Vale, admito que la broma era algo penosa, pero os prometo que soy una persona divertida. Encontraréis puestos como este esparcidos por toda Kuala Lumpur, sobre todo en el centro si lo comparamos con Bangsar, Mont Kiara y los demás barrios más exclusivos. Si os cruzáis con alguno de estos puestos, paraos y comprad algunos cocos, son súper frescos y baratos y es una pena no aprovechar la oportunidad.

Nada más verlo, me lo había pasado andando y volví atrás solo para comprar aquí. Este estaba cerca de la estación de bus de Ampang, pero como os digo están por todas partes. El vendedor era súper simpático y adorable. Me contó que los que venían envasados valían 4 ringgits y que los que estaban sin abrir valían 5 ringitts. Le dije que me pusiera los envasados porque los otros son demasiado pesados para llevar. Me preguntó si quería azúcar y hielo con el coco y le dije que sí. ¡Os aseguró que era una verdadera delicia venida del paraíso! En plena ola de calor malaya asfixiante no hay nada mejor que esta exquisitez.

También vendía otros tentempiés malayos y demás comida típica, pero no me apetecía nada más. Pagué 4, 50 ringgits por el coco (junto con el azúcar y el hielo) y disfruté cada minuto con este manjar.

Espero que os gusten también las entradas más cortitas, espontáneas y adorables.

¡Hasta pronto!

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