Llega un momento que quieras o no la vida se hace un poco más monótona, la gente tal vez no sale tanto de fiesta, la gente se reserva para la gran fiesta y te apetece animarte. La UEF montó con la ESN una SUPER FIESTA y esta era "La fiesta".
La fiesta se llamó sit sit party, tenía que ir la gente disfrazada, con ganas de pasarlo bien y de conocer más gente y más cultura finesa.
La velada comenzó con una cena (bastante ligerita) basada en ensaladita y postre. Pero mejor, así nos quedó más espacio para poder beber. Tuvimos que apuntarnos con tiempo para que los organizadores de la fiesta pudiesen organizarnos en mesas y calcular la cantidad de ensalada y postre. Así que pequeño consejo, apúntate enseguida escuches que la próxima fiesta será la Sit-sit, ya que los tickets VUELAN!
Entonces llegamos a la fiesta, en realidad estaba muy bien porque la universidad nos ofreció la sala de música para poder llevar a cabo la cenita y la prefiesta. Cada uno tenía un asiento asignado y nadie se sentaba cerca de alguna persona de su misma nacionalidad, el objetivo era que conociésemos a más gente y que sólo se llevase a cabo la velada en un idioma comprensible para todos: inglés.
Mientras llevábamos a cabo la cenita, los organizadores nos explicaban las reglas del juego, si no llevabas a cabo esas reglas, tenías castigos... yo me harté a castigos porque se me olvidaba que no se podía aplaudir.. JAJAJA
la verdad que la noche estubo bien y entre cantos, chupitos, pruebas, castigos la verdad que todos acabamos con la fiesta encima. Estuvo muy divertida y la verdad que me hubiese gustado que existiese más de una fiesta sit-sit. De lo mejor es observar la originalidad de mucha gente a la hroa de disfrazarse, y en el lado opuesto, observar qué cutre e imaginativa eran otras. Lo mejor de todo, es llevar a cabo la preparación, escaparte con tus amigos e ir a una tienda de segunda mano para comprar lo más raro y divertido que se te ocurra, yo encontré una falda como de tigre y me disfracé de troglodita, inventándome el hueso con papel y celo.
Así que si escuchas que la fiesta está por venir, ¡Apúntate!
