Las playas de los alrededores de Halden

Hoy no os voy a hablar de un solo lugar, sino de tres, tres playas que están a una distancia de entre 30 minutos y 1 hora a pie desde las residencias universitarias de Remmen. Gracias a que los fiordos están congelados en invierno, estas preciosas playas se convierten en el lugar ideal para bañarse o ir a hacer una barbacoa cuando llega el buen tiempo. La clasificación no es por motivos de calidad, sino que están ordenadas por orden cronológico según el momento en que las descubrí.

Playa número 1

Al poco tiempo de llegar, en pleno invierno, descubrí esta primera playa. Aquí os dejo el itinerario que hay que seguir:

• Salid de la universidad en dirección a la carretera principal, la que baja hacia Halden.
• Seguid por esta carretera y subid hacia la derecha (en dirección contraria a la ciudad).
• Pasaréis por debajo de la carretera, por un pequeño túnel.
• Cuando salgáis del túnel, seguid por la derecha.
• Pasaréis por delante del concesionario de coches.
• Seguid hasta lo alto de la colina. Una vez allí, unos metros más abajo, en el camino que baja, encontraréis un sendero que va hacia la izquierda en dirección al bosque.
• Seguid por ese sendero. Al final, tendréis que saltar por encima de algunos troncos de los árboles que hay en el suelo, pero tranquilos porque vais en la dirección correcta.
• Bajad hasta llegar a las vías del tren.
• Tened cuidado con el tren y cruzad.
• Justo al otro lado, encontraréis un caminito escondido entre las ramas, pero al que podéis llegar sin problema.
• Al final, os encontraréis con unas rocas enormes.
• Habéis llegado a vuestro destino. Un poco más abajo, encontraréis la playa.

No me bañé en esta playa, pero el paseo en sí ya mereció la pena. El sitio es muy tranquilo, si no tenemos en cuenta el tren que pasa por detrás cada hora. Mis compañeros de piso, en el mes de agosto, llegaron a ver leones marinos jugando en el agua.

En cuanto a la vista, no hay que tener en cuenta la parte de la derecha, que da a unas fábricas situadas un poco más lejos. Sin embargo, justo enfrente y en la zona de la izquierda, se ven las islas y los acantilados sobre los fiordos. Es un paisaje precioso, tópico noruego.

Playa número 2

La segunda playa tiene una ventaja sobre las otras dos: está a medio camino entre la universidad y la ciudad. Por tanto, se tarda muy poco en llegar, de manera que podéis ir después a la ciudad a comer algo o a tomar una copa después de hacer vuestra barbacoa. Aquí os dejo el itinerario:

• En esta ocasión, al salir de la universidad coged la carretera como si fuérais en dirección a la ciudad.
• Cuando lleguéis a la primera hondonada, encontraréis una escalera de madera a mano derecha, que hará que paséis bajo la carretea hasta llegar a un bosque.
• Una vez más, llegados a este punto todo es más intuitivo. Seguid el camino (coged el camino de la derecha en el cruce, aunque creo que al final todos los caminos conducen al mismo sitio). El bosque es precioso y, en verano, está lleno de flores. Aunque tendréis que llevar cuidado con los insectos.
• Cuando salgáis de este camino del bosque, id por la pequeña pasarela de madera; seguid por el sendero arenoso atravesando la maleza y llegaréis enseguida a la playa, que está rodeada de columpios.

En esta playa me di mi primer baño noruego. Crucé el fiordo a nado para llegar a la isla que hay enfrente. Sin embargo, llevad cuidado porque la corriente es muy fuerte a mitad de camino. Si os animáis a hacerlo, será mejor que tengáis muy buen nivel de natación.

El agua siempre está fría en los fiordos, pero lo más difícil es meterse. Una vez que estás dentro se hace más llevadero, sobre todo si hace calor fuera. En esta playa, lo más desagradable es lo que podéis encontrar bajo vuestros pies: en un momento, la playa (que evidentemente no es de arena fina) se convierte en un pegajoso lodo. Razón de más para meterse en el agua sin pensárselo. Aparte de esto, el sitio es pequeño y el bosque de detrás te permite ponerte a la sombra rápidamente. En cunato a la vista, en esta ocación, a la izquierda encontraréis las fábricas de la ciudad. La maleza que hay a la derecha dificulta un poco la vitsa, pero la isla de enfrente es preciosa.

Playa número 3

Esta última playa es mi favorita porque es la que tiene la vista más bonita. Fue la última que descubrí, a finales de mayo, y era justo en el momento en que dábamos la bienvenida al buen tiempo. Las temperaturas llegaban a los 30 ºC y sí, aquí se nota especialmente el cambio climático. Sin embargo, es la playa que más lejos está de las residencias. Se tarda 1 hora a pie (o 35 minutos corriendo) en llegar. Aquí os dejo el itinerario:

• Para empezar, id hasta la ciudad, concretamente hasta Kongens.
• Seguid por el puerto que hay frente a las fábricas. Como es una zona residencial, el camino por el que pasaréis está asfaltado.
• Seguid por esta dirección y al final encontraréis unas casas muy bonitas.
• Sin cambiar de dirección, llegaréis a unos campos, que dependiendo de la estación estarán cubierto de trigo o no.
• Coged el camino de tierra que cruza los campos y seguid recto hacia el bosque.
• En este bosque, seguid por el camino. Ya casi habéis llegado.
• Al final del camino hay una primera playa. Podéis quedaros aquí si queréis, es un buen sitio para bañarse.
• Si no queréis quedaros en esta, detrás de vosotros, a mano izquierda si miráis los fiordos, hay un camino que sube por el bosque. Si cogéis este camino (tened cuidado porque al principio es un poco empinado), llegaréis a unas playas que están algo más escondidas. Ante vosotros, un poco más arriba, veréis una gran explanda cubierta de hierba. Si vais hasta allí, descubriréis una vista preciosa.

Hablemos un poco de la vista. Por un lado, da a una pequeña cala, a la que muchos jóvenes vanpara saltar desde las rocas. Por otro lado, se ve el fiordo que se extiende a lo lejos y, frente al fiordo, se ven precioas islas llenas de vegetación.

En cuanto al baño, creo que esta última playa es la mejor para bañarse. La cala está protegida por fuertes corrientes. Sin embargo, os arriesgáis a veros de repente con el agua hasta ek cuellos debido a los grandes desniveles que provocan las corrientes y que pueden pillaros desprevenidos. Más vale que no penséis en la profundidas sobre la que estáis. Después, podéis secaros al sol en las grandes rocas, en la playa o en la hierba. Como más os guste. Si preferís poneros a la sombra, el bosque no queda demasiado lejos.

Creo que he ya he acabado con el recorrido por estas zonas de baño. Obviamente, os aconsejo que vayáis en verano. Conozco gente que ha intentado ir en invierno, pero lo han tenido complicado. Es importante que tengáis en cuenta que no son playas paradisíacas, que el agua no está caliente, ni es de color turquesa, y que hay que llevad mucho cuidado con las corrientes. Pero aun así, podréis decir "me he bañado en Noruega" sin tener por qué contar nada sobre la temperatura.