"Once erasmus, always erasmus" Mi llegada a Génova

¡Hola! Esta entrada es la continuación de "Once erasmus, always erasmus" Mi experiencia: el inicio.

Después de subirte al avión y despedirte, te queda un largo viaje para pensar en todo lo que vivirás (te confieso que estos pensamientos nunca serán suficiente, que las cosas no serán del todo como imaginabas, y que vivirás muchas situaciones que no te habías plantado nisiquiera en tu imaginación que podrías vivir).

Sobre el viaje

Mi viaje, fue un viaje largo con 3 escalas de por medio. Antes del salir del país, tuve que viajar desde mi ciudad hasta la capital y pasar casi todo el día en el aeropuerto. Luego tomé un avión hacia Frankfurt, primera vez que salía del país y tomaba un vuelo tan alto. Me mantuve con calma viendo películas, escuchando música, durmiendo, fue un bien viaje. Mientras que viajaba solo imaginaba todo lo fantástico que empezaría a vivir.

El momento de impacto fue cuando llegué a Frankfurt, y el avión aterriza y miro el reloj y la hora ya era distinta, veía a través de las ventanas los letreros en alemán, estaba sola sin mi familia y senti el golpe de que ya había llegado a lo desconocido. Estaba sorprendida, tenía mucha ilusión, estaba emocionada de estar allí. 

Me senté en la sala de espera, y avisaron que el vuelo venía en retraso, pasaron dos horas más de lo planeado, tomé el avión con destino a Munich, cuando llegué a Munich no alcancé a tomar el siguiente vuelo con destino a Génova.

En el momento sentí desespero, pero pensé con cabeza fría y sabía que no había sido mi culpa, así que me dirigí a un punto de información y expliqué el retraso que había tenido la anterior escala y me había imposibilitado llegar a tiempo. Atendieron mi casa, me encontraron un vuelo nuevo del cual ellos se responsabilizaron de todos los costos, me ofrecieron servicio de transporte hacia un hotel y me dieron cena y desayuno.

Al final, todo terminó mejor de lo que esperaba. Al haber perdido mi vuelo, claro que no por mi culpa, terminé recibiendo la oportunidad de descansar después de un largo día de viaje, de poder bañarme, de dormir un rato, de recibir cena y desayuno de forma gratuita, y de no llegar a Génova a medianoche sino en la tarde.

Antes de viajar, me habia contactado previamente con los erasmus de Génova, luego les contaré más sobre como fue el proceso en una nueva entrada destinada a consejos. Así que llegó el nuevo día, me encontraba renovada, tomé el avión de Munich a Génova, me recibió el vicepresidente de los erasmus, que para mi fortuna, iba a ser mi roomie. Así que... esto me facilitó todo el proceso de socialización.

Mi recibimiento en Génova

Me ayudó con mis maletas, me llevo a la que vendría a ser mi nuevo hogar, también tuve la suerte de que sabía algo de hablaba de español. Llegué a la casa, conocí a los propietarios, me hicieron entrega del cuarto. No llevaba ni una hora en la ciudad cuando Luca, el mejor japonés que podré conocer en la vida, me dijo que si quería salir a tomar un café más tarde con otros amigos. Dormí un rato, me arreglé y el mismo día que llegué salí a conocer mi segundo hogar.

Esta es la Piazza Ferrari, en entradas posteriores les hablaré con más calma sobre la ciudad y todas sus maravillas y sitios que debes conocer. 

Así fue como desde el primer día de estar en la ciudad, me uní a la familia Erasmus. Estaba a la espera de la llegada de mi compañera en esta aventura. Pasaron dos días hasta que por fin llegó y nos unimos a vivir juntas esta experiencia.

Mi compañera de viaje

Al inicio la convivencia no es tan fácil, aunque veníamos de la misma universidad y de la misma cultura, no nos conocíamos de antes, así que fue una relación que empezó en 0% y que hoy una persona muy especial en mi vida. 

Conociendo nuestra universidad, y terminando el papeleo.

Como buena turista, saliamos todos los días a conocer las calles, los lugares turísticos. Llegamos en septiembre a Génova, ya casi terminaría el verano, así que las primeras semanas aprovechamos que estabamos en la región de la Liguria, para ir a conocer el mar, y todas las zonas naturales que nos podía ofrecer la ciudad.

Como les mencioné antes, viviamos con un Japonés que hacía parte de la ESN Erasmus y era el vicepresidente, por ese motivo, siempre nos enterabamos de las actividades que se iban a realizar. Los Erasmus hacen una welcome week, que es una semana imperdible, donde se realizan diversos eventos para que entre todos los estudiantes extranjeros, nos podamos conocer y empezar a desarrollar relaciones.

Aquí estabamos en Bocadasse, es la primera playa que está cerca a la ciudad, es muy bonita la vista y te deja tomarte fotos espectaculares. Sin embargo, como en cualquier ciudad, entre más lejos estén las playas de la ciudad más bonita será la experiencia.

Aquí estoy con miembros de la ESN Génova, y otros erasmus Alemanes y de la India. 

Y este fue el inicio de las más grandes aventuras.

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