Ferrara como destino Erasmus

Desde mi punto de vista, Ferrara es una muy buena ciudad para hacer Erasmus, pero sobre todo si quieres un Erasmus más tranquilo y cultural, no tan fiestero.

Encontrar piso:

Este fue el problema fundamental no solo para mí, sino para todos los Erasmus de este año (2022-2023). He podido escribir a cerca de cincuenta pisos/inmobiliarias sin que prácticamente ninguna responda (quizá 5 o 6, diciendo simplemente "no, lo siento" y sin dar más explicaciones). Aconsejo empezar a buscar muy pronto y buscar a otra gente que haya estado de Erasmus en Ferrara para pasar contactos de caseros. En mi caso, como no encontraba piso, acabé en la residencia Dovevivo; un poco cara, pero es prácticamente como si fuese un apartamento más que una residencia típica.

Asignaturas:

Yo tuve complicaciones a la hora de buscar las asignaturas para convalidar, ya que no me ayudaron ni el coordinador de mi universidad ni la que me asignaron en Ferrara. Además, tuve que estudiar lo mismo o incluso más que si no hubiese estado de Erasmus. De todas formas, solo me ocurrió a mí, que estudio filología; el resto de Erasmus recibían ayuda y podían entregar trabajos en vez de hacer exámenes. Es cuestión de preguntar a los profesores al principio del curso (puede que llorarles un poco para que te echen una mano).

Por otra parte, en Italia las asignaturas se puntúan sobre 30, y necesitas un 18 (como si fuese un 6) para aprobar. Tienes varias convocatorias de examen y puedes presentarte a tantas como quieras. Una vez obtienes tu primera nota, la aceptas o la rechazas. Si la rechazas, te puedes presentar a la siguiente convocatoria. En el caso de los exámenes del primer cuatrimestre, son desde después de Reyes hasta finales de febrero, pero si apruebas todo en la primera convocatoria puedes acabar todas las asignaturas en las dos primeras semanas después de las Navidades. Ya depende de cómo prefieras organizarte, es un sistema bastante flexible y adaptable a lo que el alumno prefiera.

La ciudad:

Es una ciudad muy tranquila y segura, aunque hay ciertas zonas (sobre todo las que están lejos del centro) que de noche están mal iluminadas y parecen desiertas. Todo el mundo va en bicicleta allí; tener una es bastante cómodo. Sin embargo, es muy fácil que te la roben, así que yo opté por no comprar bici: se puede ir caminando a todas partes.

Los fines de semana hay casi siempre puestos de artesanía, gastronomía o medievales en el centro, que siempre está lleno de gente estos días. También hay exposiciones de arte, obras de teatro y demás. En cuanto a monumentos de la propia ciudad, se pueden visitar muchas cosas. Recomiendo ver al menos una vez el castillo; el jardín botánico y el parque Massari fueron mis lugares favoritos de la ciudad; por otra parte, el palacio de los diamantes es un sitio muy famoso y interesante si te gusta el arte.

No hay muchas opciones para fiesta; está la discoteca Renfe y algunos bares en el centro. Yo recomendaría como restaurante el Ciclone y como cafetería la Pasticceria Dario. Para comer yo iba al comedor universitario, la mensa universitaria del Corso della Giovecca. Los precios no están mal incluso para ser Italia y la comida es muy buena.

Los precios de todo están más altos que en España por lo general. En los restaurantes en Italia muchas veces cobran el coperto, que es una cantidad que cobran de manera fija por persona. Algunos restaurantes tienen un euro y medio de coperto, otros dos, algunos tres y, si tienes suerte, puede que encuentres restaurantes donde no cobren coperto. La ropa, por ejemplo, es algo que está muy caro, así que asegúrate de llevar toda la ropa que necesites cuando vayas allí. Si falta algo, siempre puedes ir al mercadillo de la Plaza Travaglio los lunes y los viernes por la mañana; ahí sí puedes encontrar cosas baratas.

En invierno hace mucho frío, sobre todo si eres del sur y no estás acostumbrado. En diciembre y enero puede hacer entre -1 y 6 grados, a veces incluso menos. También llueve mucho.

Experiencia Erasmus:

Hay muchísimos Erasmus españoles. Yo conocí a algunos de ellos, pero si queréis mi consejo, aprovechad para conocer a Erasmus de otros países: españoles podéis conocer en España, pero portugueses, franceses, checos, alemanes son más difíciles de encontrar fuera del Erasmus. Se aprende muchísimo de ellos y, aunque al principio cueste hablar por el tema del inglés, acabas hablando con soltura y entendiéndolos. Es una oportunidad buenísima para conocer música diferente, comida diferente, otras costumbres... Vamos, que no solo se va de fiesta sino que también conoces a gente super maja. Además, con suerte te invitan a sus países cuando acabe el Erasmus.

La asociación Erasmus de Ferrara (la ESN) sirve mucho para conocer gente al principio. Te hacen una tarjeta que te da descuentos en Ryanair y en algún otro sitio más y organiza actividades que, aunque no sean lo mejor del mundo, son buenas excusas para conocer a otros Erasmus.

Viajar:

El norte de Italia está muy bien conectado con trenes. Lo que yo hacía los fines de semana era coger un tren a cualquier sitio, pasar el día allí y regresar por la noche. No están mal de precio y son rápidos. Desde Ferrara casi siempre hay que hacer transbordo en Bolonia, pero te acabas acostumbrando a los viajes en tren. Además, hay ciudades muy buenas para el turismo cerca: Venecia, la propia Bolonia, Rávena, Módena, Verona... Incluso se puede ir y volver en un mismo día a Florencia.

Consejos finales:

Recomiendo que aprendas un poco de italiano antes de ir, lo básico. Después, sobre todo si tienes clases en italiano, aprendes super rápido. No son buenos hablando inglés, así que prueba a hablarles en italiano y, lo que no sepas, en español muy lento.

En cuanto a comida, a mí me resultó casi imposible comprar pescado a un precio medianamente normal. Al final, yo comía pescado solo en el comedor universitario. Lo recomiendo porque es una buena manera de comer un poco de todo sin darle demasiadas vueltas a la cabeza y sin tener que ir a tres o cuatro supermercados distintos. Eso sí, todos los días ponen muchas opciones, pero siempre habrá algo de pasta. No es solo un estereotipo, hay italianos que comen pasta todos los días.

Lleva al día las clases tanto como puedas porque allí no existe wuolah. Allí, si quieres conseguir apuntes, tendrás que comprárselos a tus compañeros. Si estás en los grupos, cada dos por tres verás mensajes de "vendo sbobine di x" (vendo apuntes de x), con lo que, si no te importa comprar, puedes conseguir los apuntes si decides faltar a clase.

Aprovecha el Erasmus desde el día uno y conoce a cuanta más gente mejor. Es una experiencia única, y vuelves sabiendo desde cómo poner lavadoras hasta cómo hacer todo tipo de trámites (porque para hacer el Erasmus ya te aviso que vas a acabar harto de papeleos) o mil datos absurdos sobre la comida de Turquía o de Polonia.

Espero que te haya servido, suerte con tu Erasmus.