Peripecias con el mayordomo del embajador

Pues sí, fue precisamente la semana pasada. Recibí una visita de 5 amigos que vinieron a verme y con tan buen acierto que uno de ellos perdió la cartera. Y por supuesto, con ella, toda la documentación. Lo de la tarjeta bancaria es fácil de arreglar, llamas y listo. ¿pero lo del dni? Menudas peripecias que nos tocó hacer. Fuimos al metro a objetos perdidos, no estaba. Llamamos a la embajada, cerrada porque era viernes y no abrían hasta el lunes... y como ellos se iban el domingo, pues ni cortos ni perezosos allí que nos presentamos, en la embajada, y encima por la puerta de atrás. Llamamos al timbre y se nos abre la puerta de la verja. Entramos y nada, la oficina cerrada pero, ¿entonces quién nos ha abierto?

Pues ni cortos ni perezosos sólo se nos ocurrió llamar en casa del embajador de España. Y allí que salió su mayordomo, él, o no quiso salir a recibirnos, o no se encontraba en casa. En fin, el caso es que ya nos dio un teléfono y hablamos con la el cónsul que nos dijo lo que debíamos hacer en esos casos: denunciar la desaparición, hacer 2 fotos de carné de la persona y enseñar el billete o justificante de vuelo. Lo cierto es que se portó muy bien con nosotros y nos consiguió un salvaconducto para que el pobre Álvaro pudiera volver a casa. La mejor anécdota fue que le dijo:;pues para haber perdido el dni sales muy contento en las fotos;.