Las heroínas suecas: Pippi y Lisbeth

La literatura sueca siempre le ha dado un lugar muy especial a la mujer en sus historias. Desde Pippi Langstrump hasta Lisbeth Salander, todas son heroínas por ser distintas a las mujeres de su tiempo. Las dos son valientes, representan los valores del feminismo y predican la igualdad y la justicia.

Cuando Steig Larsson creó el personaje de Lisbeth lo hizo imaginando cómo se desenvolvería Pippi en la sociedad sueca contemporánea. También usó las novelas de Astrid Lindgren para crear al otro protagonista, Mikael Blomkvist. Para ello, se inspiró en uno de sus personajes más famosos, el niño detective Kalle Blomkvist, con el que incluso comparte apellido.

Además de un origen común y unos valores compartidos, Pippi y Lisbeth comparten casa. Y es que la protagonista de Millennium vivía en la ficción en la misma residencia en la que Astrid Lindgren pasó la mayor parte de su vida: en el número 9 de la calle Fiskargatan. El edificio es de 1910 y está situado en unp de los barrios más exclusivos y discretos de Estocolmo.Tiene unas vistas espectaculares de la isla de Djurgården y la bahía de Saltsjön. Tremendamente recomendable.

Si quieres llegar allí bájate en la parada de metro Slussen y sube “al mirador del termómetro”. Una vez allí, dirígete hacia la plaza de Mosebacke y encontrarás la calle Fiskargatan en el extremo derecho. Llega hasta el final y verás el edificio enfrente de tí. Se tarda unos 15 minutos desde la parada de metro.

Para asegurarte de que es el lugar correcto, presta atención a la puerta principal y busca una señal que dice “V. Kulla”, haciendo referencia a la histórica casa en la que el personaje de Pippi vive sus aventuras (Villa Villekulla)

SUERTE Y SIGUE DESCUBRIENDO