El Capricho de Gaudí en Cantabria

Voy a hablaros de uno de uno de los edificios más importantes y emblemáticos que me encontré en mi viaje por Cantabria, concretamente en Comillas. Este es uno de los principales atractivos de esta pequeña ciudad de la costa cantábrica, aunque creo personalmente que tiene muchos más recursos interesantes y lugares de gran belleza.

Se trata de la Villa Quijano, aunque es mucho más conocida como El Capricho de Gaudí. Al planear mi viaje encontré muchas referencias sobre este monumento, así que era una visita obligada y la verdad que merece la pena.

El edificio fue un encargo del indiano Máximo Díaz de Quijano, y fue realizado por Antonio Gaudí con la ayuda de Cristóbal Cascante.

Antonio Gaudí es el mayor representante de modernismo catalán. Una de las cosas más importantes que hay que tener en cuenta es que raramente este arquitecto realizaba obras fuera de Cataluña, por lo que el Capricho de Gaudí en comillas es una obra excepcional, única y de gran importancia, por la exclusividad que supone para Cantabria.

El edificio, por supuesto, es de una gran originalidad, ya que, como todas las obras de este artista, tiene un estilo muy personalizado. Además, la obra pertenece a una época orientalista del autor, lo que se ve reflejado en la decoración de azulejo y los arcos entre otras cosas, por la influencia que el autor había adquirido de Oriente y el arte hispanomusulmán.

Lo que más destaca es la gran cantidad de colores, y también una torre que recuerda a los minaretes persas. Gaudí también trabajó en los jardines, en los que destaca una cueva artificial, y hay una escultura que representa al propio Antonio Gaudí. También me resultó muy llamativa la gran cantidad de hortensias de los jardines, que daban aún más color y belleza al jardín y a todo el conjunto. El edificio también tiene como elemento decorativo girasoles. En general, podemos decir que el conjunto resulta alegre y pintoresco. Tanto en el interior como en los balcones y jardines se encuentran espacios y rincones muy curiosos. Si sois amantes de la fotografía, vais a disfrutar mucho en el Capricho de Gaudí.

El coste de la entrada fue de 5€. La configuración de la villa hace que el edificio no se pueda observar desde el exterior, así que hay que adquirir la entrada para verlo, aunque es algo que hay que hacer si se visita Comillas, y una vez dentro podréis disfrutar de todos los espacios tranquilamente, aunque, por supuesto, hay muchos visitantes.

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