10 lugares que no te puedes perder de Bruselas

¡Hola a tod@s!

Hoy quiero hablaros de una ciudad que visité ya hace un par de años. Se trata de la capital de Bélgica, en la que estuve un par de días. La verdad es que la ciudad no es demasiado grande por lo tanto en esos dos días nos dio tiempo a ver la ciudad con más o menos profundidad. Fui en avión desde Oporto y lo cierto es que los vuelos fueron bastante baratos.

Bruselas es una ciudad perfecta para los amantes del chocolate y en especial de los gofres, para visitar museos, disfrutar de su arquitectura modernista... Es la capital política de la Unión Europea y es una de las ciudades más multiculturales de Europa.

Si hay algo que destaca de esta ciudad, y en general de Bélgica, es el excelente funcionamiento de su transporte público. Fue súper sencillo movernos desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad cuando llegamos. El precio del autobús desde el aeropuerto fue de unos 2 euros aproximadamente. De todas maneras, para visitar lo que es el centro de la ciudad, apenas es necesario coger el metro pues se llega perfectamente a pie a la mayoría de los lugares que incluyo en esta lista.

Ahora quiero hablaros de estos 10 lugares que considero imprescindibles de la capital belga. Aunque si tenéis la oportunidad de dedicarle más de dos días a la ciudad, hay muchos otros lugares para ver.

1. Grand Place

Como no podía ser de otra manera, esta es una de las visitas imprescindibles de la ciudad y sin duda el lugar más famoso de Bruselas.

Lo cierto es que esta es una de las plazas más bonitas de Europa. A cualquier dirección que se mire, todos son edificios históricos pertenecientes a un conjunto arquitectónico del siglo XVII. Destaca el Ayuntamiento, Le Pigeon, las Casas de los gremios…

Es interesante ver la plaza tanto de día como de noche, ya que la sensación es totalmente diferente. Durante la noche la plaza se ilumina de una forma muy especial y durante el día es perfecto para apreciar mejor cada detalle de los edificios de esta plaza. Nosotros teníamos que pasar casi siempre por ella para llegar a nuestro hotel, por lo tanto pudimos verla tanto de día como iluminada de noche.

Una ocasión perfecta para visitarla es el mes de agosto, cuando toda la plaza se cubre de flores formando una enorme alfombra con motivo de “Le tapis de fleur”. Para llevarla a cabo se necesitan alrededor de unos 100 jardineros que disponen de solo unas 4 horas para realizarlo. Yo solo he podido ver esta estampa en fotos pero debe ser espectacular.

Se puede subir hasta el balcón del ayuntamiento pagando 5€ para tener una mejor perspectiva de toda la plaza, y en especial en estas fechas que os digo y disfrutar mejor de las alfombras de flores.

2. Manneken Pis

No muy lejos de la Grand Place, bajando por la Rue du Midi, nos encontramos con esta pequeña estatua de bronce en la que se representa a un niño orinando. En su día esta estatua era simplemente una fuente más, pero se ha convertido en uno de los símbolos de la ciudad. De hecho la mayoría de los suvenires que os encontréis en las tiendas tienen como protagonista a esta estatua.

Para los habitantes de Bruselas representa el espíritu del inconformismo y de la revuelta de la ciudad. Una de sus curiosidades es que dependiendo de la celebración o fiesta que tenga lugar en la ciudad, se viste al niño orinando con diferentes trajes, todos ellos se pueden visitar en la Maison du Roi en la Grand Place.

Lo cierto es que a mí no me parece de los sitios más impresionantes de la ciudad, pero al fin y al cabo, dado lo que representa para la ciudad, es una visita obligada.

Esta zona es muy conocida también porque en estas calles se encuentran las mejores tiendas donde degustar los famosos gofres de la ciudad. Dudo que seáis capaces de resistiros porque en cuanto se camina por la calle, viene el irresistible olor de todas estas tiendas. Recomiendo probar el gofre al estilo Lieja, se trata de un gofre más pequeño y acompañado solo de azúcar glas espolvoreado por encima y es el gofre auténtico de Bélgica.

3. Palacio de Justicia

Este imponente palacio se ubica en el barrio de Le Sablon y cuenta con un increíble vestíbulo de más de 100 metros de altura. Para ver este vestíbulo y en definitiva todo su interior no es necesario pagar, por lo tanto no os lo penséis dos veces.

Cuando yo fui gran parte del edificio se encontraba en obras, pero aún así era precioso. Nosotros no entramos en el interior y es que he de decir que en ese momento desconocía que era gratuito, y además teníamos el tiempo ajustado para visitar todo lo que queríamos ese día, por lo tanto no nos detuvimos demasiado.

Para llegar a el subimos en una especie de ascensor, y al llegar a lo alto habían varios prismáticos para ver desde allí toda la ciudad.

4. Parque de Bruselas

Este es uno de los parques más famosos de la ciudad y en el que se encuentra el gran Palacio Real. Este palacio fue antiguamente la residencia de los reyes belgas durante bastantes años y en su interior destacan salas como la de los Espejos, la del Trono o la de Goya.

Además, este es uno de los lugares preferidos por los belgas y los turistas que visitan la ciudad para relajarse dando un paseo por sus jardines y bosques. Nosotros aprovechamos uno de sus bancos para sentarnos a comer, ya que no podíamos permitirnos ir todos los días a un restaurante. Nos pareció buen plan comprar algo en el súper y qué mejor lugar que este para comer con tranquilidad.

5. Catedral de San Miguel

La Catedral de San Miguel y Santa Gúdula es de estilo gótico y pertenece al siglo XIII. En cuanto nos acercábamos habían dos filas de árboles de camino a ella que otorgaban a la estampa un toque especial. Se encuentra en la zona alta de la ciudad, por lo tanto desde aquí se puede obeservar parte de esta.

Merece la pena entrar en su interior y observar en especial el órgano y las grandes vidrieras llenas de colores y detalles. La entrada es gratuita.

6. Galerías Saint Hubert

Estas galerías están a prácticamente un paso de la Grand Place y pueden presumir de lujo y belleza, pues en cuanto entras su decoración junto con las lujosas tiendas y chocolaterías te abruman. Estas tiendas de las que os hablo tienen los precios por las nubes por lo tanto, aunque probablemente a todos se os haga la boca agua como me pasó a mí, solo unos poco se pondrán permitir comprar cosas aquí.

Otros dato importante es que son las primeras galerías comerciales de Europa. No dudéis en pasear por ellas y entrar en alguna que otra tienda aunque solo sea para curiosear.

7. Ruta del comic

Esta popular ruta permite ver diferentes fachadas por toda la ciudad pintadas con murales de famosos cómics belgas como los de Astérix y Obélix, Lucky Luke o Tintín.

Existen tres rutas del cómic posibles, pero la más famosa y la que los turistas suelen llevar a cabo es la que recorre el centro de la ciudad. Para realizar cualquiera de estas rutas es aconsejable coger alguno de los mapas con los puntos marcados de la ruta en alguna oficina de turismo de la ciudad.

Yo me quedé con ganas de hacer alguna de estas rutas, de hecho supe de su existencia por casualidad cuando callejeábamos por las calles de Bruselas y nos encontramos de repente un mural del famosso cómic Tintín. Por desgracia, ya teníamos más o menos planeada nuestra ruta por la ciudad y no tuvimos tiempo suficiente para hacerlo. Pero como digo, lo más seguro es que igualmente os encontréis por accidente alguno de estos murales.

8. Barrio Europeo

En este barrio es donde se encuentran la mayoría de las instituciones oficiales de la Unión Europea, de ahí su nombre. De todos ellos destaca por supuesto el Parlamento Europeo. Lo cierto es que hay tres sedes en total por toda Europa pero esta es la más conocida.

Se puede hacer la visita a su interior con un guía multimedia en diferentes idiomas. Nosotros no tuvimos tiempo de hacerla pero parece interesante, además es gratuita.

Además del Parlamento Europeo hay muchos otros edificios interesantes como la sede del Consejo de la Unión Europea, la sede oficial de la Comisión Europea o el edificio Justus Lipsius.

Es una visita totalmente diferente a las demás que incluyo en este post, pero que vale totalmente la pena.

9. Parque del Cincuentenario

Este parque cuenta con muchos lugares interesantes que visitar como un Arco del triunfo, el Museo de Historia Militar y como no, el Palacio Cincuentenario.

En el interior de este último se encuentra el museo Autoworld para aquellos fanáticos de los coches, ya que cuenta con una de las mejores colecciones de coches a nivel mundial. En mi caso no me interesa demasiado por lo tanto decidimos no entrar.

Es bastante grande, así que lo mejor es dedicarle un buen tiempo para pasear por sus jardines con tranquilidad e ir descubriendo sus numerosos rincones.

10. Atomium

El último pero, como se suele decir, no por ello menos importante, es este átomo de hierro que sin duda se ha convertido en una de las visitas imprescindibles de Bruselas. Fue creado para la EXPO de 1958 y equivale a un átomo ampliado 165 billones de veces, de hecho tiene una altura de 100 metros.

Aunque no queda demasiado céntrico, a diferencia del resto de atractivos de la ciudad, y hay que coger un metro desde la estación de Heysel, pocos son los turistas que se van de Bruselas sin pasarse a verlo.

Así como antes os he dicho que es muy común encontrarnos con suvenires con la estatua del Manneken Pis, otra de las figuras típicas es esta, la del Atomium.

Se puede subir hasta lo alto del Atomium pagando unos 12 euros y las colas suelen ser importantes, sobre todo en las horas centrales del día. Se puede entrar a partir de las 10 de la mañana.

Nosotros decidimos no entrar y aprovechar para dar una vuelta por los alrededores ya que había un parque súper extenso. Estuvimos investigando y nos encontramos lugares súper bonitos como este.

¡Esto ha sido todo sobre la ciudad de Bruselas! En mi viaje a Bélgica aprovechamos también para visitar la preciosa ciudad de Gante, de la que os hablaré en mi siguiente post. Espero que os haya gustado.

¡Gracias por leerme una vez más!

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