Tesalónica os va a encantar y os cuento por qué.

Qué hacer en la ciudad

Por el día podéis disfrutar de todo lo que ofrece la ciudad. Por ejemplo, podéis pasear por la costa, explorar la ciudad, visitar los comercios locales, el puerto, las tabernas griegas, algún que otro museo interesante y, por supuesto, los monumentos históricos, ¡que no son pocos! ¿Os he dicho ya que está solo a poco menos de una hora de la playa? Las playas de Grecia son un auténtico paraíso. Va en serio. De hecho, yo soy brasileño, de Río de Janeiro, y para mí son una pasada.

Por la noche, la mejor zona para salir de fiesta es Kamara o Valaourito (así es como llaman aquí al Arco de Galerio), aunque otra alternativa es ir a Bouzoukia, un sitio que ofrece actuaciones griegas tradicionales en directo, pero no esperéis demasiada fiesta. En Tesalónica también se celebran muchísimos festivales, eventos...

Consejos para viajar

No me puedo olvidar de uno de los lugares más bonitos de Grecia: Calcídica y sus "tres dedos" (ya me entenderéis cuando miréis el mapa). Está solo a un poco menos de tres horas en coche. En uno de sus "dedos" solo viven hombres y, lógicamente, solo pueden ir hombres. Sin embargo, no os olvidéis de los otros dos dedos porque son increíblemente hermosos y, en este caso sí, todo el mundo puede visitarlos.

Además, si estáis matriculados en la universidad desde el verano, también podéis aprovechar e ir al camping de la universidad. Si os gusta acampar y la fiesta (y todo al mismo tiempo), no dudéis en ir. Cuando yo estuve en el verano de 2016, había miles de personas literalmente, teníamos conexión a internet (con la misma contraseña y nombre de usuario), baños, duchas, restaurantes (si no me falla la memoria comíamos por 3 €), espacio para aparcar (tampoco demasiado), enchufes y electricidad.

Al este de Tesalónica se encuentra Kavala, una preciosa ciudad ubicada en la costa que tenéis que visitar sí o sí. Una vez que estéis por allí, podéis coger un ferri (con coche, moto... ) y viajar hasta la maravillosa isla de Tasos. Otro consejo que os puedo dar es que estéis siempre pendientes de los horarios del transporte público y de que los cumplan religiosamente, porque muchas veces hay huelgas y el transporte público se retrasa o sale más temprano de lo que debería.

Tras visitar Kavala, podéis alargar vuestro viaje y, ¿por qué no?, visitar en Turquía la ciudad de Estambul. Está a unas ocho horas en bus y cuesta 30 € (solo ida). Está claro que la mayoría de vosotros querrá ir a Estambul, ya que está al lado de Tesalónica y os aseguro que es una de las ciudades más hermosas que veréis en toda Europa. Para darle más rigor a esta afirmación, he de deciros que he estado en 23 países y en más de cincuenta ciudades de Europa (a lo mochilero) y Estambul entra en mi lista de mis tres ciudades favoritas. Además, una vez estéis en la ciudad, aprenderéis muchísimo (en caso de que no sepáis nada de ella) sobre la historia de Grecia, sobre todo del norte del país y de Turquía. La lira turca tiene un valor tres o cuatro veces menor que el del euro, dependiendo del cambio de moneda. Podría decir tantas cosas de este sitio que podríamos estar aquí todo el día, por lo que solo os recomiendo que disfrutéis de la comida turca y de su cultura única.

Hacia el oeste, justo en la frontera con Grecia, Albania y Macedonia, se encuentra el lago Prespa (Prespa National Park). Por cierto (antes de que se me olvide), cuando os refiráis a Macedonia, no la llaméis nunca por su nombre. Es mejor llamarla por el nombre de su capital, Skopie. Para saber el porqué hay que retroceder bastante en el tiempo, por lo que, si os interesa, echad un vistazo a la historia o mudaros a Tesalónica y preguntad a un local, ya que todos, incluso los más jóvenes, están muy informados sobre el tema. Y si os apasiona el tema, podéis saciar vuestra sed de historia con un paseo en barco hasta las cuevas para aprender más sobre vuestro nuevo hogar.

Hacia el sur de Grecia, destaca en primer lugar el monte Olimpo y es el lugar perfecto para hacer caminatas, acampar, hacer escalada, esquiar, hacer alpinismo y demás actividades al aire libre. Y si seguís explorando por el sur, tenéis que hacer una parada en Meteora. Os garantizo que no veréis otras formaciones geológicas parecidas en vuestra vida y también hay unos monasterios preciosos y muy antiguos en lo alto de la montaña. Aquí también podéis acampar y hacer escalada.

Si seguís viajando hasta el sur no paréis hasta llegar a Atenas, la capital de Grecia. Es una gran ciudad que ofrece muchísimas cosa que hacer, como visitar la Acrópolis y su museo, el Partenón, el mercado de la Acrópolis, la plaza Síntagma, el templo de Zeus Olímpico, el Erecteón, el Teatro de Dionisio, el Puerto del Pireo. Este último es muy importante, ya que desde este puerto se pueden coger ferris hasta otras islas, como la de Creta y Zante.

Si vais a viajar entre las distintas islas, os recomendaría, además de consultar tanto los horarios del ferri como las huelgas previstas de antemano como los retrasos y salidas anticipadas, alquilar una moto para moveros por las islas sin depender del transporte público de las mismas, ya que normalmente tienen un horario muy apretado. Otro consejo que os puedo dar es que estéis pendientes de los vuelos baratos, ya que podéis comprar billetes de avión por dos euros. De hecho, yo compré unos billetes por ese precio para ir a Santorini desde Tesalónica, pero tendréis más posibilidades de conseguir estos vuelos baratos si vuestro destino es Atenas y otras islas (2 + 2= 4 €... merece la pena).

Cómo es la comida y la gente en Grecia

Por lo general, los griegos intentarán haceros sentir cómodos y os ayudarán a adaptaros a su cultura. Siempre van a tratarte como uno más con una sonrisa en la cara, lo cual, desde mi punto de vista, se agradece. En Tesalónica, la mayoría habla inglés, por lo que el idioma no será un problema. Aunque si aun así no os fiáis, no os preocupéis porque la universidad ofrece cursos de griego para los estudiantes Erasmus. En mi caso, no tuve que pagar porque era Erasmus Mundus, pero no estoy seguro de si el resto de estudiantes Erasmus tienen que pagar.

La cultura griega gira en torno a compartir y a estar siempre cerca de los vuestros. Pasaos por alguna taberna y comed como si fuerais auténticos griegos. Os recomiendo ir en grupos, ya que de esta manera cada uno puede pedir un plato diferente y podéis probar todo lo que queráis. Probáis un montón de platos nuevos en una sola comida y encima afianzáis la relación con vuestros amigos. ¿Qué más se puede pedir? ¿Aguantáis bien la bedida? Pues en Grecia hay algunas bebidas alcohólicas que tenéis que probar, como el ouzo y el tsipouro. ¡Hay también postres deliciosos! Tampoco me puedo olvidar de un lugar que muchos estudiantes de fuera no conocen, pero que vosotros sí que tenéis que visitar. Os cuento. Un día, hablando con mi amigo griego, me invitó a probar la mejor boutgasa del mundo. En una ocasión, probé la que supuestamente era la mejor bougatsa de la ciudad al lado de la Torre Blanca (un lugar increíble para pasar la tarde con los amigos). Aun así, acepté su invitación y me llevó al lugar con su moto (a los griegos les encantan las motos). El lugar estaba en el 22 de Agion Panton (cerca de la estación de tren). Os dejo una foto de la fachada por aquí.

La mejor bougatsa de la ciudad, (Fuente)

AUTh (Universidad Aristóteles de Tesalónica)

La gente de la universidad es muy simpática y se pone siempre en vuestro lugar. Los profesores están altamente cualificados y la variedad de asignaturas a escoger es amplia. La ESN (Erasmus Student Network) os va a facilitar mucho las cosas y van a intentar hacer todo lo posible en todo momento para que tu experiencia sea óptima. Organizan muchísimas fiestas y viajes.

La ubicación de los campus universitarios es muy buena, aunque hay uno que sí está un poco alejado del centro (cerca de cuarenta minutos en bus). Si es vuestro caso, tenéis que haceros sí o sí con el carné de estudiante Erasmus y el carné universitario. Podéis obtener un montón de descuentos en Grecia con vuestros carnés de estudiante. Existe la posibilidad de pagar un importe fijo para poder utilizar los autobuses de la ciudad las veces que queráis.

Si sois deportistas o simplemente queréis poneros a tono, la universidad ofrece un gimnasio inmenso y todos los deportes y actividades que podáis imaginar. De hecho, el gimnasio cuenta con su propia página web. Una vez que tengáis vuestro carné, tenéis que pagar una cuota de 10 € por semestre, aproximadamente. Los estudiantes Erasmus nos juntábamos y solíamos jugar un par de partidillos de fútbol a la semana, pero la mayoría prefería ir al gimnasio y seguir con su rutina. Como os he dicho, ofertan muchas actividades y deportes que están muy bien dirigidos y organizados.

En mi caso, tuve la oportunidad de dar clase con los alumnos griegos; sin embargo, otros estudiantes Erasmus no se atrevieron a dar el paso y optaron por ir a clase con otros estudiantes Erasmus. Todo esto era posible debido al número de estudiantes Erasmus que había cursando las mismas asignaturas. En mi caso, no había mucha gente que estudiara Ciencias Ambientales, pero de Derecho había muchísimos.

Relajaos (Xalara)

Los griegos no es que sean los más puntuales. No os preocupéis si vuestros amigos llegan tarde, si alguien se pasa del plazo establecido, si no se respetan demasiado los horarios o incluso si vuestros profesores llegan tarde. Aquí es normal, es parte de su cultura, ¡así que tenéis que respetarla! Además, no todo en la vida se reduce a horarios, puntualidad y plazos, aunque parezca que sí. Y no me malinterpretéis, simplemente os pido que seáis comprensivos y que lo entendáis cuando ocurra.