Finde en Atenas Pt. 2

Buenas Tardes, noches, o lo que sea!

esta es la parte 2 de mi escapada cumpleañera forevah a Atenas.

Día 3:

Nos despertamos sobre las nueve, aunque lo mío me costó, que no me gusta y no puedo madrugar, ya sabéis que soy como los vampiros, solo salgo por la noche y por el día a mimir.

Decidimos ir al cambio de guardia, no sin antes tomar una magdalena de chocolate con chocolate derretido por dentro (gloria bendita) y un chocolate calentico para beber. 

Empezó uno diez minutos antes de lo previsto y se amontonó un número exagerado de gente, al final, como siempre, mi madre y yo nos las ingeniamos para colarnos en la primera fila a pesar de la espesa marabunta. Estuvo entretenido aunque al principio no había visto mucho, cuando cambió la guardia, pasaron los señores guardias vestiditos con sus trajes característicos y la banda de música detrás a modo de marcha.

Cuando cesó el acontecimiento la policía nos dijo que podíamos hacernos una foto con los guardias pero sin tocarlos. Mi madre me gritó que corriera y yo pues corrí claro está vamos a ver, yo quería una foto del guardia, ya que estaba allí pues un detalle gracioso, pero claro un niño se iba a poner, aunque me puse yo :P fui más rápida. La madre de del crío me pidió que lo dejara a él primero, pero resulta que había como veinte críos y si dejo a uno, al final los tienes que dejar a todos y quedarte tú la última,  le dije que no, claro, yo había llegado la primera y por esperar cinco minutos no se iba a morir.

Así que esta señora madre se enfadó conmigo y me llamó de todo menos guapa, pero bueno yo me hice mis fotos y fui feliz, el señor ni pestañeó pero seguro que es buena gente, hehehe.

Después de eso, dando un paseo fuimos a Sephora, pues me había quedad sin polvos compactos y mi maere (madre) me regaló unos de Lancome, que los he probado y oh god son lo mejor del mundo, y un eyeliner de Sephora, muy preciso y negro ^^. Me dibujé en la cara un corazoncito y todo el otro día super cuqui y me quedó genial con el eyeliner ese (aim in lof).

Al terminar de comprar seguimos por la calle hasta llegar a una plaza donde encontramos una iglesia cristiana ortodoxa, que según aprecié era del período Románico y había sufrido un incendio en el ala derecha. Luego lo comprobé y en efecto, me sentí orgullpsa de mi capacidad deductiva y apreciativa. Estaba oscura claro, vi mucho pan de oro, pero oro del bueno, y las pinturas mural, estaban en excelentes condiciones (a excepción de la parte que había ardido) y hay que reconocer que la labor restaurativa estaba hecha de manera meticulosa y con cariño, alucinante.

Tras verla nos dirigimos al Ágora antigua, fui con mi madre pero al llegar nos dimos cuenta de que el GPS nos había llevado al Ágora romana. Allí conocimos a un chico de colombia con la misma profesión que mi madre (profe de inglés) que estaba de viaje por Europa por primera vez, y si, estaba en una nube de felisidad verdadera. 

Tras un ratico andando llegamos, yo por ser estudiante voy de Free a los sitios. había entre varias ruinas, había unas columnas con unas imágenes de Poseidón con los titanes, les faltaban algunos trozos como es costumbre, pero me encantaron, y en lo alto de la colinilla estaba el edificio principal, en el que mi madre se empeñó en hacer como mil fotos, pero good, yo me colé un poco como el que no quiere la cosa porque me hacía ilusión sentarme en el edificio, en el mármol tallado tan antiguo. Solo un segundito para una foto, ni siquiera lo toqué con la piel (no me comáis). Y me gustó ver la lucha entre centauros y hombres reflejada en los frisos :D.

Tras eso dimos un paseo más por el jardín y fuimos al hotel, recogí mis bártulos y decidimos comer algo, yo me pedí un gyros y mi madre otra cosa que no recuerdo pero estaba muy rico también, mientras las palomas nos acechaban.

Entre toda la gente que había ese día me pillé un taxi y fui a la estación de autobuses, no muy caro, allí saqué el billete y me compré unas galletas y eso.

El viaje en bus fue una Odisea (que lista soy, Odisea, Odiseo,  Grecia YIIIII), os juro que yo creo que pasé por el mismo sitio tres veces al menos!, tardé ocho horas, es decir, dos más ue para ir, yo no se por dónde nos echamos, y bueno me desesperé muchísimo, yo pensaba que me daba un infarto o ansiedad o algo, de verdad, pero al llegar me fui a dormir y te tiré allí un día entero, aún así estoy liada con las clases y necesito descansar de todo, por suerte la semana que viene vuelvo a cas y me podré tomar unos días.

Gracias por leerme, 

Natalia.