Antalya con un presupuesto de estudiante

Hace poco decidí que Antalya es mi ciudad favorita del mundo junto con Nairobi. Solo estuve en ella 3 días pero ¡me encantó! Desde los coloridos edificos a las calles empedradas de Kaleiçi y las palmeras en Lara Caddesi. De verdad me enamoró.

Antalya es una ciudad que se encuentra en la costa suroeste de Turquía, bordeando el Mediterráneo. Mis amigos y yo fuimos a visitarla en pleno verano, cuando el sol era demasiado fuerte. Teniendo en cuenta que somos estudiantes, mis amigos y yo buscábamos unas vacaciones que se encontrasen dentro de nuestro presupuesto, pero que al mismo tiempo fuesen inolvidables.

Viajar a Antalya

Como vivimos en Ankara, decidimos coger un autobús nocturno de 7 horas hasta Antalya, la opción más barata. Reservamos los billetes en el último momento en Obilet, una página de reservas online. También volvimos a Ankara en autobús.

Dónde nos alojamos

Como teníamos un presupuesto bastante limitado, ni siquiera nos planteamos ir a un hotel, sino que usamos AirBnB. El único error fue que no lo reservamos con suficiente antelación. Cuando llegamos a Antalya muy pronto por la mañana ¡ya había una temperatura de 35 ºC! Así que ahí estábamos, dos chicas sudando la gota gorda en una parada de autobús buscando por todas las páginas webs posibles un alojamiento barato. Además, como eran las 8 de la mañana la mayoría de restaurantes no servían comida todavía (¿por qué Antalya? ¿Por qué? ) y los centros comerciales estaban cerrados. Después de una hora conseguimos encontrar el metro más cercano y lo cogimos sin ninguna dirección en particular. A estas alturas he de confesar que no teníamos ni idea de Antalya, y nos dirigíamos a una parada que se llamaba Muratpasa solo porque sabíamos que ahí era donde se encontraban la mayoría de AirBnBs.

Después de un rato, finalmente encontramos a un anfitrión que nos alquiló su apartamento esa noche. Aunque él fuera muy agradable y nos ayudó mucho, la casa estaba tan sucia que nos traumatizó. Por eso decidimos no quedarnos ahí más de una noche y pasarnos a hacer Couchsurfing.

Después de que algunos huéspedes nos rompieran el corazón al rechazarnos, al final encontramos un anfitrión para la segunda noche. Decir que Cagri (así se llamaba) era increíble se queda corto. Sin ninguna duda volvería a hospedarme con él. Además, ese Couchsurfing fue gratuito y fue un gran alivio para nosotras.

Cómo moverse por Antalya

Como en la mayoría de ciudades turcas, solo se puede utilizar el transporte público con un bono. Nosotras compramos nuestros bonos en las paradas de metro o incluso en algunas tiendas. A pesar de que nos encantó el tranvía, acabamos usando principalmente taxis para la mayoría de nuestro viaje porque nunca encontrábamos la parada de bus. También nos era imposible ir en búsqueda de la parada de bus a 46 ºC, y a diferencia de Ankara, en Antalya la parada de bus no aparece en Google maps.

Dónde comimos

Comimos principalmente en las zonas de restaurantes de los centros comerciales porque ahí podíamos encontrar los restaurantes que nos gustan. Además, con más variedad es más fácil para comparar los precios que ir a un restaurante en específico.

Qué visitamos

1. Playas

Fuimos a las playas Konyaaltı y Lara. Konyaaltı es una playa de rocas mientras que Lara es de arena. A mí me gustaba más Konyaaltı porque después de ir a Lara siempre me pasaba un par de días intentando deshacerme de la arena de mi ropa. Os aconsejo llevar unos buenos zapatos de playa, tipo unos "crocs", porque las rocas pueden ser muy traicioneras con tus pies. La entrada a las dos playas es completamente gratis, pero bajo el sol abrasador a lo mejor quieres gastarte un poco de dinero en alquilar una sombrilla.

2. Museos

El Museo de Antalya me pareció bastante interesante porque vi esculturas de mármol de dioses romanos de las ruinas de Perga. También había algunas exposiciones históricas que iban desde la era Paleolítica hasta la época del Imperio Otomano. También estaba el Museo de Juguetes de Antalya, pero desafortunadamente no lo pudimos visitar porque no tuvimos tiempo. El hecho de que tuviésemos un abono de museos que nos permitía entrar a cualquier museo turco hizo que las visitas a museos fueran facilísimas. Estos abonos nos costaron solo 5 dólares cada uno.

3. Kaleiçi

Sin duda alguna, esta fue mi parte favorita de Antalya. Es la parte antigua de la ciudad y está lleno de tiendas que venden productos turcos como alfombras o té de arándanos. Las calles empedradas y los edificios de piedra intactos le dan un aire muy rústico. Aquí fue cuando me di cuenta de que el idioma se usa como una estrategia de supervivencia: los mercaderes pasaban del ruso al árabe, al inglés o al alemán de una manera tan sencilla como cambiar de una mano a otra la bolsa de la compra. ¡Me encantó!

4. Yat Limani

Yat Limani es un muelle con barcos y yates, perfecto para marisco fresco y excursiones. Nosotras, gracias a un descuento de estudiantes, contratamos una excursión de una hora en yate.