Fiebre de Erasmus

Con treinta y nueve grados de fiebre yacía en la cama de mi residencia Erasmus en Lumumby. Qué pereza moverse. Qué dolor, en todos los sentidos. Porque hay algo cierto...

Cuando puedes, porque no quieres; cuando quieres, porque no puedes.
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La cabeza es un bolo, las piernas gelatina, las costillas cuchillos que se retuercen.
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Dolor, dolor, dolor. La garganta cerrada, cada vez que intentas pasar algo, líquido o sólido, mil agujas la atraviesan, los ojos lloran desconsolados ante tan sobrehumano dolor. No puedes hacer nada. Intentas tragar agua disfrazada de magma volcánico a 2000ºC para intentar que el dolor disminuya, no funciona.
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No puedes hacer nada, ni dormir, ni estar despierto, ni tumbado, ni inclinado, ni andando, nada. Sólo tienes sueños febriles, sudas, sientes que estás muriéndote, y entonces, en ese momento, te acuerdas de todas las veces que pudiendo, no has hecho nada. Y te dices, qué irónico.
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Había una vez dos hormiguitas que estaban haciendo un viaje alrededor del mundo. Cual no fue su sorpresa al encontrarse un charco enorme, un charco que no podían cruzar de manera alguna. En esto que un conejito se acercó a ellas, y les dijo:
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-Eh amigas hormiguitas, ¿queréis que os ayude a cruzar el charco?
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-No, no - dijeron al unísono las hormiguitas - No cruzaremos encima de un conejito sucio y feo como tú.
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El conejo, apenado, salió corriendo bosque adentro. Las hormiguitas esperaron un tiempo, hasta que, casualidades del destino, vieron flotar en el charco dos pajitas, que se movían hacia ellas. Allí que se subieron, cada una en la suya, y se dispusieron a cruzar el charco. Cuando iban a mitad de camino, un soplo de viento hizo girar las defectuosas pajitas y las hormigas cayeron al agua, entonces tuvieron que nadar y nadar como nunca habían pensado que nadarían para llegar al otro lado, mojadas y hechas polvo por el duro esfuerzo que se habían visto obligadas a hacer para cruzar...
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Moraleja.: Más vale conejo sucio que dos pajas mal hechas.

Continuará...

Sí Modafokas! Sé que estáis deseosos de otra parte más de esta serie interminable de interesantísimos artículos de bazofia que nada tienen que ver con el concurso. ¡GENIAL! Seguiremos trabajando en ello.

Hasta entonces,

Has luego, hasta lueguito, adios adiosito, que ya nos veremos quiero decir, que eso, que hasta prontooooooooo, hasta la próximaaaaaaaaaaaaaa ¬¬ Lamentable.

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