Decálogo de Erasmusu para el trabajo en remoto (o cómo trabajar en remoto sin morir en el intento)

1. Filosofía general para trabajo en remoto

Reconozcámoslo: trabajar en remoto, con todas las ventajas que conlleva, es también complicado y a veces se hace muy cuesta arriba. Y cuánto más grande es la empresa, más complejo se vuelve. Hay personas a las que les cuesta mucho adaptarse por su personalidad o su entorno, o por falta de conocimiento y experiencia en trabajar desde casa. Por eso es necesario tener unas normas mínimas de convivencia, algunas de obligado cumplimiento, y otras simples recomendaciones pero que nos ayudarán a trabajar mejor juntos, a ser más eficientes, y también más felices como grupo y a título individual. Trabajar a distancia puede ser divertido, se pueden hacer amigos, y puede llevar a nuestra empresa a ser más competitiva.

Las claves son sencillas: igual que hay normas que de forma natural aplicamos cuando estamos en una oficina, hay otras que debemos aplicar cuando trabajamos en remoto. Y todas ellas se basan en la empatía hacia los demás, y en seguir una etiqueta básica que nos permita no sólo comunicarnos mejor, si no también conocernos mejor, a los demás y a nosotros mismos.

2. ¡Somos un equipo! (o muchos equipos)

Una empresa no es otra cosa que un grupo de personas trabajando juntas. Y “juntas” no significa en el mismo espacio físico, si no con un mismo objetivo común (una misión clara, bien definida y asumida por todos), y compartiendo una filosofía de cómo hacer las cosas. Es decir, una empresa es un equipo, no una banda en la que cada uno va por libre. Trabajar juntos significa colaborar, conocerse, comunicarse, respetarse. Y aunque hay un “gran equipo”, dentro de la empresa también hay muchos equipos más pequeños, y ese “colaborar, conocerse, comunicarse, respetarse” aplica no solo a las personas, si no también a los equipos entre sí. ¡Necesitamos que haya “roce” entre equipos!

Ese encuentro necesario entre personas y equipos, en la oficina puede ocurrir de forma natural, pero cuando se trabaja online es necesario forzar las cosas un poco para evitar individualismos o la creación de “silos” departamentales.

Para fomentar el trabajo en equipo, en Erasmusu hacemos las siguientes reuniones que nos permiten conocernos y trabajar mejor:

• All hands. Reunión general de toda la compañía, una vez al mes. Se hace un repaso general de la situación y la evolución de KPIs e hitos, y luego se cuentan novedades por departamento (solo si las hay). Todo el mundo puede participar si lo desea, y se pueden también lanzar preguntas en abierto o de forma anónima. Es importante transmitir la visión general, y que todo el mundo sepa por qué se toman las decisiones y hacia dónde vamos. Una hora. Asistencia voluntaria (pero muy recomendable).
• Weekly meetings. Reuniones semanales, normalmente a inicio de semana, para revisar KPIs y organizar la semana entrante. Hay una con todos los managers para revisar departamento a departamento, cada uno comenta solo tres KPI y si hay novedades o insights interesantes, y confirma los temas clave de la semana. Utilizamos siempre documentos de soporte que se rellenan semanalmente antes de la reunión, y que sirven de cuaderno de bitácora o histórico para ver qué se ha ido haciendo en el pasado. 45 minutos - 1 hora, asistencia obligatoria.
• Project meetings. Normalmente son semanales, y son para revisión de grandes proyectos importantes para la empresa: ver avances, bloqueos, próximos pasos, asignación de tareas, etc.. Cada una tiene un nombre en clave (en Erasmusu usamos títulos de películas) y un documento asociado donde anotar los temas a tratar (y el histórico). Una vez acabado el proyecto, se cancela la reunión. 30 minutos, asistencia obligatoria con algunos asistentes voluntarios.
• Dailys temáticas. Son muy cortas y al grano, para revisar distintos temas u organizar el trabajo del día entre departamentos. Entre 5 y 15 minutos, asistencia obligatoria.
• Dailys de equipo. Son muy cortas y al grano, para organizar el trabajo del día y también para saludarse. Normalmente se hacen con un panel kanban (en nuestro caso Trello o Jira). Entre 5 y 15 minutos, asistencia obligatoria.
• Flash meetings. Se organizan en el momento para comentar cualquier tema. En ocasiones es mejor una llamada rápida para aclarar cualquier aspecto que pasarse un rato chateando o enviando emails. Entre 5 y 30 minutos, asistencia obligatoria.
• Coffee break. Se puede organizar por departamentos, por temáticas, por equipos, etc., aunque se recomienda que no haya más de 6 personas por reunión… Aquí cada manager y cada equipo se auto organiza. La única norma es que no deben durar más de 15 minutos, y que NO se puede hablar de trabajo. El objetivo es conocerse mejor, socializar ahora que estamos en casa, y pasar un buen rato juntos. 15 minutos, asistencia voluntaria.
• Afterwork. Algunas veces organizamos reuniones para tomar una cerveza tras el trabajo. Se pueden hacer juegos online, poner música, charlar… Se puede hacer alguna tarde o los viernes antes de comer. Duración variable, asistencia voluntaria.

Parecen muchas reuniones, pero en realidad no son tantas porque no todo el mundo asiste a todas, claro. Y son necesarias para la cohesión del equipo cuando se trabaja en remoto. La clave del éxito de estas reuniones está en hacerlas de forma eficiente, algo que explicamos en el punto 7 de este decálogo.

3. Tu despacho, tu reino, tu imagen

Todos somos conscientes de la importancia de tener un puesto de trabajo adecuado para evitar lesiones, malas posturas, etc., y eso vale para la oficina, y por supuesto para cuando trabajamos en remoto. No siempre es fácil, pero intenta buscar un sitio con buena luz natural, y usa una silla ergonómica y cómoda.

Cuando trabajas desde casa es importante auto imponerse unas normas para ser eficiente y no caer en el hastío o la desesperanza, pero también es importante pensar en los demás. El cómo te muestras tú, y desde dónde lo haces, dirá mucho de ti a los demás. Dependiendo de tu aspecto, y del sitio desde donde te conectas, puedes transmitir energía, determinación y buen rollo, o todo lo contrario.

No olvidemos que el sitio donde trabajas es también el sitio que verán los demás miembros del equipo cuando hagas videoconferencias. Verán cómo es el espacio donde estás, y te verán a ti, y eso manda un mensaje cada vez que te conectas a una reunión.

Empieza por ti mismo. Aunque trabajes en casa, vístete para el trabajo, y arréglate. No transmitas dejadez ni deterioro, porque eso se nota, y mucho. Obviamente nada de trabajar en pijama o chándal: ponte ropa cómoda, pero recuerda que estás trabajando, y no estás solo.

Muchas personas no disponen en casa de un despacho o zona privada para trabajar, aunque obviamente eso sería lo ideal. En cualquier caso, es muy recomendable trabajar siempre en el mismo sitio, y que ese espacio esté ordenado y resulte agradable tanto para ti como para tus compañeros (que lo verán en las reuniones). Esto es especialmente importante si trabajas con personas externas a la organización, tanto clientes como partners o proveedores: lo que se ve en la pantalla transmite un mensaje, y puede perjudicarte a ti y a la compañía.

Dedica un poco de tiempo a organizar tu espacio, y comprueba lo que se ve detrás de ti. Es importante que sea agradable, o al menos neutro, y que transmita profesionalidad y no dejadez: llevamos trabajando en remoto ya más de un año, y no hay excusas para un entorno desordenado o con mensajes contraproducentes (imagina alguien con un poster subido de tono, o que se vea que es una habitación de adolescente, o con una pegatina de un partido político. Todo ello son cosas a evitar).

Un asunto muy importante en relación al espacio de trabajo es la presencia de otras personas. Muchos tenemos hijos, o vivimos en pareja o con otros familiares, o tenemos mascotas. A estas alturas todos estamos acostumbrados a que pueda haber alguna interrupción o que esas personas aparezcan en plano en medio de una videoconferencia… pero es algo que debemos intentar evitar.

Del mismo modo que no te llevas a tu hija o a tu perro a la oficina, o que no permitirías que tu madre o tu pareja se presente en el trabajo para preguntarte qué quieres para comer, debes concienciarles de que aunque estés en casa estás trabajando, y que no deben molestarte salvo que sea algo realmente importante. Que te interrumpan constantemente, aparte de romper tu concentración y afectar a la calidad de tu trabajo, si ocurre durante las reuniones es muy molesto para los demás, y envía un mensaje muy negativo sobre tu profesionalidad.

Una forma de gestionar esa presencia en casa con otras personas puede ser reservar momentos en tu agenda para atenderles, y así evitar las interrupciones.

Finalmente, con el trabajo en remoto es habitual que algunas personas decidan cambiar de residencia, o que temporalmente se muevan a otra ciudad, etc. Es importante que la empresa esté informada de estos cambios.

4. El reloj y la agenda son tus amigos

Cuando se trabaja en casa es importante mantener siempre un horario estable, y cumplirlo a rajatabla, sin excepciones, tanto por tu bien como para poder trabajar con tus compañeros de manera coordinada.

Hay que establecer rutinas, y no solo para la hora de entrada o salida del trabajo o para agendar reuniones, tiempo para elaborar documentos o hacer llamadas, etc. : también para tomar un café o para comer algo, para levantarte y estirar, conversar con las personas con las que vives, hacer deporte, etc. Y para ello, el uso de una agenda online (en el caso de Erasmusu utilizamos Calendar) es vital.

En Erasmusu esas agendas deben estar compartidas con todos, para facilitar la organización de llamadas y reuniones (no hay que estar preguntando disponibilidad a todo el mundo), para ver la carga de trabajo de cada uno, etc.. Sí se puede hacer que aunque la disponibilidad sea pública, el contenido del Calendar sea privado, pero en general, y como uno de nuestros valores es la transparencia, preferimos que todo sea público, dado que es horario laboral. De hecho, la agenda del CEO, por ejemplo, es pública y cualquiera dentro de la empresa la puede consultar.

Un truco muy útil es que las reuniones que organicemos no sean, como norma general, a horas completas. Es mejor hacer reuniones más cortas (30, 45 o 50 minutos) para dejar así espacios entre reuniones y llamadas para levantarte y estirar un poco, ir al baño, comer algo… Recuérdalo cuando convoques a otras personas, porque eso es bueno para todos.

Intenta tener siempre tu agenda actualizada y completa: cancela las reuniones si no vas a asistir, pon una nota cuando canceles, añade información suficiente sobre la temática de la reunión, enlaza documentos y avisa de si hay que completarlos o leerlos antes, etc. Cuanto más preparados vayamos a las reuniones, más eficientes serán, y eso pasa por las agendas de todos.

5. Las herramientas son para usarlas (pero bien)

Para poder trabajar en remoto de forma eficiente hay que hacer uso de distintas herramientas cuyo objetivo principal será mejorar la organización y la comunicación entre personas, dado que no tendremos oportunidad de vernos y hablar en persona, salvo en contadas ocasiones. Si las herramientas son siempre útiles en cualquier empresa, en el caso de las que trabajamos 100% en remoto, se vuelven absolutamente fundamentales. Es muy importante la elección de las herramientas idóneas, pero también darles el uso adecuado.

Repasemos cada una de las herramientas básicas que usamos en Erasmusu, y cómo darles un uso óptimo para garantizar el mejor funcionamiento posible en remoto:

Email

• Utiliza siempre la cuenta oficial de la empresa, tanto para comunicación interna como externa.
• No utilices la cuenta de la empresa para temas personales, ni para darte de alta en sitios web, servicios, etc., ajenos al trabajo.
• Si quieres resolver algo interno y puedes solucionarlo con un mensaje corto por Slack, evita el email.
• En cambio, para temas largos y más complicados y no urgentes (recuerda que el correo es un sistema de comunicación asíncrono, no urgente), utiliza el email. También si hay implicadas personas externas a la empresa.
• Si es un tema urgente, no uses el email, mejor Slack o el teléfono.
• No envíes emails de forma indiscriminada, respeta el tiempo de los demás y no llenes sus buzones de correo sin necesidad. Piensa antes de enviar un correo quiénes realmente necesitan recibirlo.
• Si quieres informar a alguien de algún asunto, pero no necesitas respuesta, usa el término FYI (For Your Information) o ponlos en copia (CC).
• No hagas spam a usuarios, clientes o proveedores. Nunca. Si necesitas contactar con alguien externo a puerta fría, hazlo de forma personalizada y presentándote.
• Firma siempre tus correos con el diseño creado para ello por la empresa, incluyendo tu nombre y apellidos, puesto y forma de contacto, además de un link a la web de Erasmusu. Evita poner cualquier información extra. La idea es que todos tengamos el mismo, como si llevásemos un uniforme.

Slack

• En Erasmusu usamos Slack como nuestra oficina virtual. Es decir, es la herramienta más importante de comunicación interna, así que es obligado seguir unas normas estrictas de comportamiento.
• Completa tu perfil de Slack. Debes poner una foto reciente donde se te vea bien (todos queremos saber cómo son las caras de nuestros compañeros de trabajo), utiliza nombre y apellidos (puedes usar un nick, pero en el perfil pon todos los datos, recuerda que puede haber varios “Miguel”, por ejemplo, y es confuso), tu puesto, email y número de teléfono móvil.
• Descarga la aplicación de Slack en tu ordenador y móvil de empresa, y permite las notificaciones para que te avise si alguien te envía un mensaje en horario de trabajo.
• Mantén la aplicación abierta en todo momento mientras estés trabajando. Recuerda que puedes usar los estados de Slack para avisar de que estás reunido, de vacaciones, de baja, etc., y así evitarás molestias innecesarias.
• Únete a los canales relacionados con tu trabajo (equipo, proyectos ad hoc, general, recursos humanos, off topics que te interesen, etc. ) y lee los mensajes que se publican en ellos.
• Si en un canal quieres que alguien responda un tema, cítale expresamente con su nickname de Slack.
• Sé educado: cuando entres a un canal nuevo, saluda, y si lo vas a dejar porque no aplica en tu caso, despídete. Cuida tu lenguaje y tu comportamiento, que la comunicación sea online no da derecho a insultar, provocar, despotricar, etc.
• Participa en los canales aportando ideas, dando feedback, con emoticonos para mostrar tus sensaciones, etc.
• Pero mantén un nivel de ruido bajo: no se trata de estar todo el día escribiendo cosas en todas partes. Recuerda que el resto de gente tendrá que leer todo lo que escribas.
• Evita siempre los temas polémicos que no tengan que ver con la empresa, como la política y la religión. Todos somos libres de tener nuestras ideas, pero la empresa no es una barra de bar.
• Intenta responder a los mensajes de Slack, privados o con cita pública, en el corto plazo (el mismo día como máximo). Slack es asíncrono, pero es un chat, y se espera como mínimo un acuse de recibo en un tiempo razonable.
• Hay momentos en los que todos necesitamos concentrarnos en una tarea. Si lo necesitas, desactiva las notificaciones de Slack durante ese tiempo, avisando al equipo de que no estarás disponible.

Google Meet

• Usamos Meet como plataforma prioritaria para nuestras videollamadas. Aprende a configurarlo en tu ordenador, y también con los accesorios que vayas a utilizar: micrófono, auriculares, cámara…
• Si puedes, entra a la reunión un par de minutos antes para comprobar que todo funcione correctamente, y así estar listo cuando empiece.
• Utiliza tu cuenta de empresa para acceder, con tus datos completos para que todo el mundo sepa quién eres (recuerda que puede haber gente de fuera, nuevos miembros del equipo, etc. ).
• Aunque nuestra herramienta de uso interno es Meet, es posible que tengas que usar otro software con personas ajenas a Erasmusu: Teams, Zoom, Skype… Es conveniente que tengas esos programas instalados, configurados y testados, por si llega el caso de necesitarlos para reuniones externas.

Calendar

• Usamos Calendar para agendar nuestras reuniones. Usa siempre tu cuenta de empresa para convocar y aceptar reuniones.
• Si te llega una invitación a una reunión, acéptala para que el organizador sepa que puedes asistir. Si no vas a poder, mejor intenta hablar por Slack para buscar una fecha alternativa.
• Recuerda que nuestras agendas deben ser públicas para el resto de la empresa para facilitar la organización de reuniones y el trabajo.
• Si eres el organizador de una reunión, consulta las agendas de los demás para ver su disponibilidad y, si están ocupados, busca otro hueco, o pregúntales, pero no envíes una invitación sin avisar si la otra persona tiene ese hueco ocupado.
• Utiliza las alertas de Calendar (compatibles con Outlook o el Calendario de Mac) para ser puntual.
• Sincroniza tu Calendar con Slack para que el resto de compañeros puedan ver que estás reunido y así eviten molestarte, y además Slack te avisará de que tienes reunión para entrar siempre en hora.

Drive

• Para compartir documentos en Erasmusu utilizamos Google Drive, y de nuevo debemos utilizar la cuenta de empresa para ello, y desde luego no hay que usar Drive para guardar documentos personales.
• Por defecto los documentos de Drive son de acceso privado, pero puedes compartirlos con personas concretas, o con toda la empresa si lo prefieres. También con personas de fuera si lo requieres, pero por defecto recuerda que cuanta menos gente tenga acceso a los documentos, mejor.
• Intenta controlar quién tiene acceso a tu Drive. Si has dado acceso a alguien externo, una vez hecha la consulta es mejor que lo elimines, por seguridad.
• Cuando crees documentos recuerda hacerlo usando las plantillas y templates oficiales de la empresa, y dales nombres autoexplicativos para facilitar la búsqueda y organización de los mismos.
• Debes organizar tu Drive con carpetas por temáticas para que sea fácil de gestionar y mantener.
• Haz limpieza de vez en cuando eliminando los documentos que ya no utilices, para consumir menos espacio y para facilitar la búsqueda de información.
• No dejes ficheros en espacios públicos de la empresa en Drive, salvo que sean de uso común. Y si lo haces, asegúrate de que estén actualizados y tengan vigencia.

6. Vamos a organizarnos

Una buena organización en una empresa siempre es importante para alcanzar objetivos, pero cuando se trabaja en remoto se vuelve un tema absolutamente central. En el caso de Erasmusu trabajamos con filosofía lean startup para nuevos proyectos e ideas, con metodologías agile en varios departamentos, y con un fuerte enfoque en procesos en los departamentos relacionados con ventas y atención a clientes. Es decir, combinamos distintas metodologías y sistemas en función de las necesidades y enfoque de cada departamento.

Utilizamos un sistema de OKRs y objetivos trimestrales para la empresa y por departamentos.

En varios departamentos se definen sprints semanales o bisemanales, se hacen reuniones de planificación, retrospectivas, etc.

Todos los equipos utilizan paneles kanban (usando Trello y/o Jira) para seguimiento de proyectos, y estos se gestionan en reuniones cortas (15 minutos máximo) cada mañana para organizar el trabajo del día, revisar bloqueos, etc.

Todos los managers tienen semanalmente una reunión 1-1 con cada persona de su equipo, tanto para revisión de tareas como para generar confianza, hablar del estado anímico, revisar posibles bloqueos, etc..

También utilizamos mucho la elaboración de documentos colaborativos entre varias personas para agilizar el trabajo y fomentar el trabajo en equipo, revisión de errores, etc.

Recuerda que parte de las claves del trabajo en equipo son el respeto y una comunicación fluida. Respeta el trabajo de los demás, se empático cuando alguien cometa un error e intentad buscar juntos formas de evitarlos en el futuro. Si eres tú quien ha cometido un error, pide disculpas y explica las razones que han llevado a cometerlo, para mejorar en el futuro.

7. Cómo hacer reuniones online útiles

Aunque en general todos odiamos la “reunionitis”, y siempre debemos preguntarnos si hace falta una reunión para resolver temas que se pueden solucionar con un email o con un chat rápido en Slack, como política general a la hora de comunicar y debatir temas complejos, es mejor una reunión que cualquier otro método, especialmente cuando se trabaja en remoto. Dado que no tenemos el contacto social de una oficina, hacer videoconferencias facilita la comunicación y la creación de equipo, genera confianza y fortalece las relaciones entre compañeros.

Pero para que tengan sentido y no sean una pérdida de tiempo, las reuniones hay que hacerlas bien. Aquí van algunas recomendaciones importantes:

• Duración: para reuniones “flash” para resolver un tema urgente o aclarar algo, mejor que sean de no más de 10 o 15 minutos. Para reuniones de equipo diarias, 15 minutos máximo y siempre con un kanban para seguimiento. Para reuniones semanales, entre 30 y 45 minutos debería ser suficiente. Si una reunión tiene que alargarse más de una hora para tratar un tema complejo, intenta partirla en varias sesiones con tiempos de descanso y definiendo asuntos específicos para cada sesión.
• Espacios entre reuniones: deja siempre espacios de tiempo entre reunión y reunión para estirar, comer algo, ir al baño, etc. Además, te servirá para despejar la cabeza.
• Invitados: evita las reuniones multitudinarias. Piensa en quién realmente necesita estar. Recuerda que hay invitados que deben asistir, y otros a los que se puede invitar para que estén informados, pero que no hace falta que asistan obligatoriamente.
• Las reuniones mixtas con gente online y otros presenciales en la oficina no suelen funcionar bien, porque los que están online se pierden parte de la conversación presencial. Hay que intentar evitarlas.
• Vídeo y sonido: ten siempre configurado y comprobado tu equipo antes de una videollamada, especialmente si vas a usar algún dispositivo nuevo como micrófono, auriculares o cámara. Es obligatorio encender la cámara (salvo situaciones especiales), y evitar ruidos de fondo. Mutea tu micrófono mientras no estés hablando, y permanece atento para encenderlo cuando te toque hablar, es muy incómodo estar siempre con el “estás muteado” y se pierde tiempo.
• Recuerda las ya mencionadas recomendaciones sobre tu espacio de trabajo.
• Presta atención y muestra respeto por los compañeros: cuando estás en una reunión, estás en una reunión. Es decir, no hagas otras cosas en paralelo, si te han invitado es porque lo que vais a hablar es importante, y es conveniente centrarse. Salvo que asistas como invitado u oyente, no te pongas a escribir, a mirar el móvil o a leer algo mientras estés en una reunión: es fácil despistarse, y hay que evitarlo a toda costa.
• Interrupción: cuando estamos en casa es probable que de vez en cuando nos interrumpan (el mensajero, un hijo, nuestra pareja, una mascota…) en mitad de una reunión. En estos casos lo que hay que hacer es avisar a los demás de que te desconectas un momento, pedir disculpas, y volver lo antes posible a la reunión. Pero en ningún caso hay que desconectarse sin avisar, es muy incómodo preguntarle algo a alguien para darse cuenta de que no está atendiendo realmente la llamada, aunque esté conectado.
• Conviene recordar que Erasmusu es una empresa internacional que trabaja en 9 idiomas diferentes. Aunque la mayoría hablamos en español, el idioma oficial de la empresa es el inglés, por lo que la elaboración de documentos conviene hacerla directamente en este idioma. Y en las reuniones, siempre que haya alguien que no hable español, se hablará directamente en inglés.

8. Hay que reírse y hacer amigos

En Erasmusu creemos que se puede trabajar de forma eficiente, y al mismo tiempo pasarlo bien trabajando. Si no nos divertimos, lo que hacemos no tiene sentido. Además, la diversión y hacer amigos ayudará a fortalecer relaciones con los compañeros, y nos hará la vida más agradable cuando trabajamos en remoto. Necesitamos gente con quien hablar, y además sirve para conocerse mejor: debilidades y fortalezas de cada uno, saber cuándo alguien lo está pasando mal por alguna razón, ser más empáticos… Mucha gente echa de menos la socialización de la oficina, pero trabajar en remoto no significa convertirnos en máquinas. Por eso en Erasmusu promovemos la participación y la diversión en el trabajo a través de distintas actividades.

Nos gusta la utilización de vídeos, memes, gifs, emojis, música, etc., para transmitir emociones y compartir momentos juntos, aunque sea en la distancia.

Tenemos canales en Slack para publicar off topics, compartir libros, organizar sesiones de juegos online, promover temas sociales… ¡únete y participa!

También organizamos, a veces todos juntos y a veces por equipos o departamentos, videollamadas para tomar café, hacer un afterwork con una cerveza, celebrar un cumpleaños o alguna buena noticia, etc.

No te cortes, participa, cuenta chistes, haz bromas… divertirnos trabajando es clave para nuestra salud y hacer más llevaderos los momentos difíciles, y nos hace mejores profesionales.

9. Descansa, muévete, socializa… y pide ayuda si lo necesitas

Trabajar en remoto puede ser intenso y cansado mentalmente. Por eso es importante que hagas pequeñas paradas cada hora, que te levantes y estires, que mires por la ventana o te des un mini paseo. Recuerda encontrar momentos para descansar, comer algo, etc.

También te recomendamos encarecidamente que hagas deporte tras el trabajo (o antes) de forma diaria, eso te ayudará a estar mejor físicamente, llevar una vida saludable, y encontrarte más animado y feliz, además de evitar posibles problemas de espalda.

Si en algún momento te sientes mal, de bajón, ansioso o deprimido, ¡no te lo calles! La salud mental es tan o más importante que la física. Habla con recursos humanos y con tu responsable directo y dile cómo te sientes, e intentaremos ayudarte. Y por supuesto, busca ayuda profesional si lo consideras oportuno.

Por último, dado que no podemos socializar en el trabajo como nos gustaría, intenta salir de casa, hablar con familiares y amigos, hacer actividades, etc. Todo ello te hará sentirte mejor y eso es bueno para ti, para tus compañeros y para la empresa.

10. Nota final: comunica, comunica, comunica

Hemos mencionado previamente la importancia de la empatía y la comunicación en el trabajo, y eso debe hacerse a todos los niveles, desde el CEO hasta el último miembro del equipo recién llegado. Si esto siempre debe ser así, trabajando en remoto es aún más importante para que nadie se sienta solo o desconectado del resto.

La transparencia es uno de los valores de Erasmusu, y eso debe aplicarse en todas direcciones: por supuesto desde los directivos hacia el resto del equipo contando la visión general y las razones en la toma de decisiones, pero también en dirección inversa. Es importante que hablemos hasta la extenuación, y que nos contemos las cosas, las buenas y las malas, cómo nos sentimos, cuando algo nos gusta y cuándo no, cuándo no entendemos alguna decisión, que nos felicitemos y celebremos cuando algo sale bien, etc.

Callarse no es bueno. Guardarse la información para uno mismo nos perjudica a todos. Por eso hay que avisar lo antes posible cuando se produce un bloqueo, cuando alguien detecta un bug o tiene una “red flag”, etc., si alguien se siente perdido o atascado, etc.. Lo mismo con los “insights” o conocimientos adquiridos, hay que compartirlos con el resto lo antes posible porque es bueno para todos y nos permitirá ser más eficientes, tratar mejor a nuestros clientes y tomar mejores decisiones.

Al final, todo se resume en una serie muy simple de ideas: respeto, empatía, transparencia, comunicación, trabajo en equipo… Si seguimos estas normas básicas, sea en remoto o en presencial no habrá quien nos pare. ¡Vamos!

Autor: Miguel Ángel Díez Ferreira, CEO de Erasmusu

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